5.Desesperación.

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 Lo que recuerdo después de que acabara aquel viaje tan traumático, fue despertar a secas en mi habitación de nuevo como si nada hubiera pasado, pues, intenté hacerme creer que todo  fue una larga y tortuosa pesadilla. Temiendo confirmar de que todo hubiera sido real me dispuse a comprobarlo pues, lo único que debía hacer era confirmar la fecha.

 Salí de mi habitación tras un largo periodo de reflexión, aún sintiéndome insegura y temerosa de confirmar mis sospechas me dispuse a echar un vistazo al calendario de la cocina, la caminata del pasillo hasta la cocina pareció eterna y tortuosa, al llegar a la esquina del pasillo noté la presencia, pues podía escuchar levemente algunas voces desconocidas entonando un coro espeluznante.

 No sé cómo, ni por qué pero sentí que una fuerza me guiaba a través del pasillo para revelarme la terrible realidad de que nada había sido una pesadilla. Al instante de dar vuelta a la esquina solo podía observar personas vistiendo con una gabardina negra con marcas en la frente y agujeros en las manos.

 Me sentí obligada a voltearme y regresar corriendo a mi habitación cuando de un momento a otro me percaté de que algo estaba detrás de mí, y efectivamente estaba allí podía sentirlo y solamente tenía que darme vuelta para confirmar lo que ya sabía se encontraba a mis espaldas. antes de poder darme vuelta observe rápidamente a mí al rededor y tomar algo que me ayudase a defenderme, logré divisar una pequeña lámpara en un instante di la vuelta y lo arrojé con la mayor fuerza posible solo para observar como ese objeto atravesaba aquella figura densa y negra en la cual se le podía palpar el odio y la rabia que de aquella figura emanaba.

 En aquél momento lo único que sentía era la adrenalina en la sangre junto con aquel coro diabólico, observé como la figura se dispersaba y se convertía en humo denso y negro mientras emitía un horrible sonido de rabia y desesperación, empezaba a transformarse en una criatura con un cuerpo físico cada vez más lucido. Fue entonces cuando empecé a correr por mi vida rodeando aquella criatura.

  Corrí lo más rápido que pude a mi habitación mientras sentía que ese ente diabólico iba tras de mí, de nuevo se sentía como si aquel pasillo no tuviera fin, el aire se impregno de un fuete y fétido aroma de carne podrida mientras corría, el ambiente se hacía más y más oscuro y sentía como aquella criatura me alcanzaba con una velocidad inhumana con zancadas alargadas y precisas a mis espaldas. En solo un segundo todo se fué deteriorando frente a mis ojos el papel tapiz se resbalaba de las paredes, la madera a mis pies se pudría y agrietaba el techo caía en pequeñas porciones como si fuera polvo y sentía como mi ropa se llenaba de polvo como si alguien la hubiera dejada abandonada hace años.

 Pude llegar a la puerta de mi habitación la abrí lo más rápido posible y luego arrojé para cerrarla, cuando una violenta fuerza la golpeaba  mientras yo gritaba desesperadamente que se alejara. Al parecer mi comentario le afectó pues en un instante los golpes ya no se escuchaban y todo parecía estar de nuevo en orden, miré a mi alrededor para asegurarme. Las  luces encendieron y alguien toco la puerta diciendo:

-Zafiro, ¿estás bien?

-Hija abre la puerta 

 Al parecer era mi supuesta madre intentando entrar a mi habitación para preguntar por qué estaba gritando y decirme que dodo estaría bien. Comencé a gritar que se largara pues no quería saber nada de ella, cuando dijo enfadada:

-Bien, lo aremos a tu manera

 Y ya no escuché nada mas.

Ellos me observanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora