treinta y nueve.

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/Importante leer el capítulo treinta y ocho (Final de la 2 temporada) de nuevo para refrescarse la memoria\

-Meses después-

- Martin apúrate qué vamos a llegar tarde. -

Había venido a buscar al Martin a su casa porque quería que nos vinieramos caminando a la universidad juntos, si, ya por fin estamos en la universidad y como la vez qué estabamos en el bar y me curé, supe qué el quería estudiar mi misma carrera, nos las ingeniamos para estudiar en la misma u.

- Ya flaco, estoy listo. -

En este tiempo, solamente el Arthur y la Feña se vinieron a vivir por aquí, la Feña porque tenía a sus abuelos y quería vernos todos los días y el Arthur... La verdad no sé, supongo qué debe tener familia por acá o algo así.

A la universidad podíamos ir en micro o caminando, esta vez decidimos caminar.

- Weón, ten cuidado. - Le digo al ver qué casi se cae el muy asopa'o con una piedra.

- Ya, flaco, seguro qué vos nunca te haz tropezado. -

- Obviamente, pero tampoco tal agila'o. -

- Sos malo. -

Le saco una sonrisa.

En este tiempo también "Creo" qué he madurado, o sea, ya no soy la vieja Espinoza qué era antes, no me enojo por todo, me tomo más las cosas con calma.

Pero tampoco soy un tipo de esos de "Paz y amor hermanos." Soy un termino medio entre el enojo y la paz.

- We-ón, sabi' qué me carga caminar cuando podemos tomar la micro. -

- ¿Te querés quedar como un espagueti así toda la vida? -

- Mientras no esté gordo, bueno, yo puedo comer y comer y no pasa nada. -

- No por ser gordo, vas a estar horrible de no hacer ejercicio, podés ser flaco y estar horrible de ejercicio, delgadez no significa salud. -

- Anda a webear con tús metrosexualidades para otro lado. -

- Ah, qué pelotudo qué sos, te hablo de salud y ya para vos es metrosexual. -

- Vo' eri' metrosexual y todo el rato hablai' de "Ay, ejercicio, uy, Manu, teni' qué estar sano, uff." - Digo con voz aguda.

- Porqué es verdad, deberías cuidarte. -

- Mira, si tú... -

Una voz cansada me responde.

- ¡MANU, MANU, MANU, MANU, MANU, MANU! -

- Arthur, tranquilizate, ¿Qué te pasa? -

- Primero qué se vaya este hijo de p... -

- A ver, ¿Qué onda? Porque lo veni' a insultar. -

- Podemos hablar un momento, Manu. -

- Arthur, tengo qué llegar a la uni. De verdad, sorry, no tengo tiempo. -

- Es muy rápido, es para qué te des cuenta lo cegado qué estás. -

Suspiro un momento y me alejo del Martin junto al Arthur.

- ¿Qué pasa? -

Me muestra su celular, el cuál tenía una foto.

Me muestra su celular, el cuál tenía una foto

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- ¿Qué e-es eso? -

- Como ves, Martin con Luciano dándose un beso, y es reciente, esa camisa Martin se la había comprado hace nada, o al menos eso pone en su Instagram. -

- Es verdad, esa camisa se la compró hace una semana. -

- Ves qué no te miento, por eso lo iba insultar, porque te engañó. -

Me quedo sin palabras mirando atentamente la foto, mientras veo al Martin por detras del Arthur.

- ¿Flaco, nos vamos ya? -

Agarró el celular del Arthur y le muestro la foto.

- Dime qué la foto es mentira, dime qué es un montaje. -

- Flaco, te lo puedo explicar. -

- ¿Qué me vai' a explicar, qué me vai' a explicar? Uh, ¿Qué po'? -

Le entrego su celular al Arthur.

-  Vos. - Dice mirando al Arthur. - Vos sabes perfectamente cuando se tomó la foto. -

- La camisa nueva azul te delata aweona'o. - Le digo apunto de llorar.

- ¿¡POR QUÉ TE TRATAS DE METER EN NUESTRA RELACIÓN, ENTENDÉ QUÉ NO TE AMA!? - Grita el Martin al Arthur.

- Eso está por verse. - Dice el Arthur.

- ¡Vení acá forro! -

Se le abalanza encima tratando de pegarle.

- ¡¡¡Martin suéltalo!!! -

- ¡Suéltame me duelee! - Dice el Arthur casi llorando, porque de verdad el Martin le estaba pegando brijido. -

No sabía qué hacer, el Martin de verdad estaba enojado, nunca en mi vida lo había visto tan enojado.

Atina po' Manuel, dice mi preocupado subconsiente.

- ¡AYUDA! - Grito para qué la gente me ayudara a separar al Martin del pobre Arthur qué no podía defenderse.

El Martin cada vez le pegaba más fuerte, de verdad no sabía qué hacer, era desesperante.

Y si me hago el desmayado para qué el Martin me vea, no, piensa en algo más inteligente.

- ¡¡¡Martin suéltalo, por favor!!! - Digo llorando de la desesperación.

N/A:

Uff y recontra uff, el Martin se puso super bélico je.

Y yo los dejo en suspenso porque soy cul, adios mushasha/o

En serio, ¿No te das cuenta? || ArgChiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora