El álbum de una chica con el corazón roto| Crush 1.5

16. Run and Hide.

No mentiré diciendo que después de mi ruptura con Sebastián todo estaba bien. No solo había perdido a mi novio, sino también a uno de mis mejores amigos. Luego de aquel día no volvimos a hablar; yo deje de contestar y él dejo de intentar, porque ambos sabíamos que era lo mejor en ese momento. Necesitábamos volver a nuestras vidas sin el otro, para no lastimarnos más.

–...y eso sería necesario para el lanzamiento, debemos comenzar de inmediato, ¿estás de acuerdo, Alexandra?

Salí de mi trancé, para dejar de mirar la ventana y ver como todas las miradas estaban puestas en mí.

–¿Disculpa? –pregunté a Simon, quien me envío una mirada de desaprobación total.

–La reunión terminó, salgan todos; me gustaría tener una conversación con Alexa.

Sin quejarse, todos cerraron sus carpetas y salieron uno tras otro de la sala de juntas, mientras yo me giraba de nuevo a ver mi reflejo en la ventana. Escuché la puerta cerrarse.

–No entiendo que te está pasando, todos hemos visto que has estado bastante distraída en ensayos, en el estudio y ahora hasta en juntas–me giré a verlo y por un momento vi preocupación en su rostro, pero aquello se eliminó a los segundos–. Entiendo que hace poco terminaste una relación, pero debes de ver que es necesario para tu carrera, para hacer a tus fans felices...

La carcajada que salió de mi garganta lo detuvo y negué levantándome, mientras apoyaba mis manos en la mesa y lo miraba: –¿Para hacer a mis fans felices? Eso es una tontería Simon, mis fans no son el problema en todo esto porque sé claramente que ellos quieren mi felicidad.

>>Y en el caso de que tuvieras razón, aunque no lo haces, ¿Qué hay de mí? ¿de mi felicidad? –mis ojos se cristalizaron y tragué lentamente–. He sacrificado tanto para hacer a otros felices y eso solo me ha traído miseria. Así que felicidades, Simon, haz logrado que algo que amo, mi trabajo, se vuelva en una pesadilla.

–¡Oh vamos, Alexandra! Déjate de berrinches ya, porque ambos sabemos que solo es eso, estás molesta por lo de Sebastián; pero no iba durar de todos modos, era uno de muchos amores.

Retrocedí empujando la silla, como si me hubieran dado un golpe físico.

–Nunca entenderé la necesidad de ustedes los jóvenes de enamorarse, es solo una batalla perdida de muchas...puedes retirarte–se sentó en su silla y comenzó a revisar algunos papeles.

Estaba por hacerle caso y salir de la sala de juntas, pero estaba tan cansada de ser su marioneta que mi cuerpo actuó solo y estampé mis manos contra la mesa, causando que ardieran un poco y que Simon se espantará.

–Esto no es un berrinche, Simon, simplemente he llegado a mi limite–mi tono de voz era seco y rudo, logrando que por primera vez el hombre me viera con cierto miedo–. Estoy harta de que alguien más planifique mi vida a su antojo, y por suerte para ambos solamente nos toca trabajar juntos por un año más. Acabando mi gira el año que viene olvídate de verme la cara.

Caminé con seguridad hasta la puerta y antes de salir me detuve.

–Respecto a lo que dijiste sobre el amor: lamento que no veas la belleza de enamorarte, sé que ya tienes a tu esposa e hijo y quizá eso para ti es lo suficiente; pero deberías de ver lo genial que es enamorarte de una persona una y otra vez todos los días... yo sabía que Sebas y yo no duraríamos para siempre, pero tenía esperanza, incluso cuando sabía que el corazón roto sería inevitable.

El silencio reino en la habitación y salí de la habitación.

–Es tu forma de no cerrarte al amor–afirma mi mejor amigo y aun así asiento.

–Estoy enamorada del amor, creo que tu deberías saberlo mejor que nadie–le digo con diversión y el ríe, mientras yo le cantó mi parte favorita–. But love don't gotta be a loaded gun
Or a losin' fight
And when did we all start thinkin' that the world
Stop spinnin' in a kiss goodnight?
And when did our heartbeat beatin' too fast
Stop meanin' it was worth the while?

–El resto de tu historia no es un misterio para nada: Simon te llamó unos días después y como lo predijiste te emparejo con alguien más.

–Así es, con la persona más odiosa del mundo.

–¿Crees que estar contigo es divertido? ¡Eres como la llorona, pero con el amor! –dice entre risas, al igual que yo.

–Creo que has sido mi mejor pareja falsa hasta el momento, somos mejores amigos y me alegra que no me haya puesto con alguien más–le sonrió y él corresponde mi gesto–. Gracias por aceptar aquel día.

–¿Qué puedo decir? Me generas la fama que necesitaba–lo empujo de la banca logrando que caiga y él se levanta sonriendo–. Mentira, en realidad no me costaba nada y sabía que si me negaba te encontrarían a alguien más.

–Mañana tengo junta con Simon y dice que habrá invitados especiales, ¿Qué crees que planea?

–De seguro algún acto de apertura para el tour–responde.

Ya es tarde, así que nos levantamos y salimos del establecimiento donde el me acompaña a mi auto, y antes de irse al suyo me mira con una sonrisa burlona.

–¿Ya escuchaste el álbum de Shawn?

Niego con diversión y lo miró. –No, no planeo hacerlo y lo sabes.

–¡Oh vamos, deberías de hacerlo! –hace un puchero logrando que ría–. No es por nada, pero es bastante bueno, además de que hay ciertas canciones que no me caben duda de que son para ti y no puedo...

Cierro la ventana de mi auto y el exclama un "¡hey!" con enojo mientras yo saco mi auto del cajón del estacionamiento.

–¡Adiós, Centineo! –grito con la ventana aún cerrada y el solo me mira con indignación mientras me voy de ahí, pensando en que mañana me espera un día bastante largo.