El álbum de una chica con el corazón roto| Crush 1.5

1. Consequences.

Empecemos por heridas que nunca sanaron por completo. Shawn Mendes era una de ellas.

Eran vacaciones de navidad, me encontraba en mi habitación del hotel donde mi familia y yo nos estábamos hospedando; tenía hambre, así que decidí salir para comer algo. Papá y mamá estaban en una cita, por lo que solo era yo.

Para mi suerte, había una cafetería a unas cuantas cuadras y por la nieve que hacía en Nueva York, sería fácil que nadie me reconociera; además nadie estaría ahí por la nieve

–Hola, ¿me podrías dar un panini italiano y un té chai? –la chica asintió con emoción en su rostro–. Gracias.

–¿Podría tomarme una foto contigo?

Asentí con una sonrisa y ella salió de detrás del mostrador para tomarse la foto, así que después de agradecerme, me dirigí a una mesa a esperar mi pedido; pero me vi interrumpida por unas chicas que se acercaron y tomaron asiento frente a mí.

<<Rude much>> pensé. Amo a mis fans, pero pudieron haber preguntado si el lugar estaba ocupado antes de sentarse... pero quizá no eran mías.

Aun así, salude con una sonrisa: –Hey, lindas, ¿cómo están?

–Ahórratelo, caza fortunas.

–¿Disculpa? –le pregunté a la castaña.

–Como oíste, sabemos muy bien lo que buscabas de Shawn; es chistoso que justo cuando tu ganabas fama hayan terminado–respondió la rubia esta vez.

–Creo que están malinterpretando las cosas, Shawn y yo acabamos por acuerdo mutuo y...

–Y son buenos amigos ahora–me interrumpió la primera chica y yo fruncí el ceño–. Sí, nos sabemos el discursito que ambos dan, pero todos sabemos que Shawn cortó contigo porque eres una entregada que iba tras Connor y lo engañaste con él, eso es seguro.

Solo había pasado un año desde el tour y cabe mencionar que mi autoestima estaba en los suelos por comentarios como los que las chicas estaban diciendo; si bien nunca he experimentado la depresión, pero la tristeza que sentía no se comparaba a nada normal.

Mis ojos comenzaron a picar por las lágrimas y solo me limité a mirarlas fijamente: –Sin ofender, pero ustedes no saben nada sobre lo que pasó entre él y yo, así que si me disculpan.

Me levanté de mi asiento para recoger mi pedido y llevármelo al hotel, pero el sentir algo caliente en mi espalda me sobresalté y observé como las chicas reían, pues me habían tirado su café hirviendo encima.

–¿Está todo bien? –la chica que antes me atendía salió junto con un hombre mayor que podría fácilmente ser un guardaespaldas. Al verme empapada en café, miró a las chicas, quien lo veían con un tanto de temor en su rostro–. Les pediré que se retiren de mi establecimiento ahora mismo sino quieren que involucremos a la policía.

Ambas salieron como alma que llevaba el diablo y yo tomé mis cosas, agradeciéndoles por la ayuda y asegurándoles que estaría bien.

Quizá la canción había empezado por Scott, pero fue terminada aquel día que me di cuenta que querer a Shawn había implicado un corazón roto, perder el respeto que merecía y mi autoestima. Shawn Mendes había traído consecuencias en mi vida.

–Alexa eso es bullying–me encojo de hombros restándole importancia–. ¿Por qué no lo sabía?

–Nadie lo hace, no quería armar un escándalo–contesto a Noah mientras tomo palomitas del bowl–. Olvídalo, no tiene importancia ahora; pasó hace años.

–De acuerdo, ¿Y cuál es tú línea favorita? –inquiere como niño pequeño–. Es más, hagamos algo: me contarás la historia y me cantarás tu línea favorita.

–¿Tengo opción? –niega con ganas y suelto un bufido–. Bien, pues esta es mi favorita de la canción:

>>Loving you was dumb, dark and cheap
Loving you will still take shots at me
Found loving you was sunshine, but then it poured
And I lost so much more than my senses
'Cause loving you had consequences