Capítulo 22

690 52 8
                                    

- Pues claro que puedes venir Ana.- me dice con una sonrisa.

- Gracias.- le contesto yo bastante tímida. Vuelvo con las chicas, nos pasamos la tarde hablando y ni nos hemos dado cuenta que los chicos se habían ido.

- Aleix me ha mandado un mensaje y me ha dicho que pasemos en media hora más o menos.- nos dice Laura.

- ¿Voy bien así?- a mi misma me sorprende mi pregunta.

- ¿Intentas sorprender a alguien Ana?- me pregunta Carlota. Yo no contesto nada.

- Quiere sorprender a Marc.- dice Laia.

- Que va.- digo en un tono demasiado agudo, eso significa que miento.

- Si tu mejor amiga se ha dado cuenta que te gusta Marc es que realmente te gusta Marc, y no intentes negarlo porque es mentira y lo sabes.- me dice Laura.

- Pero no puede ser, Zara, su novia, está embarazada y supongo que se hará cargo.- las tres se quedan con la boca abierta.- Esto no lo sabe nadie, así que más vale que no digáis nada por favor.

- No vamos a decir nada.- dice Carlota.- Vamos a dejar eso y vamos a arreglarte.

No quiero ir demasiado arreglada porque si no se iba a notar mucho, aunque ellas si que van muy guapas. Entre las tres me eligen un pantalón roto tipo boyfriend y me doblan los bajos, luego me escogen un top crop de flores hawaianas y de fondo rosa, yo elejo las zapatillas Adidas blancas y negras porque no quiero ir muy llamativa y para acabar unos pendientes rosas. Por último me pinto los labios de rosa y ya estoy lista para ir a la cena de los pilotos.

 Por último me pinto los labios de rosa y ya estoy lista para ir a la cena de los pilotos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Bajamos las cuatro juntas y Roser nos ve.

- Ana hija, estas preciosa.- me dice, a lo que yo bajo la cabeza y me pongo roja.- Seguro que a mi hijo le encantas.

Las chicas se ríen, pero yo no puedo estar más roja. Vamos a casa de Marc, aunque nos abre la puerta Álex. Se acerca a mi y me susurra.

- Si quieres volver loco a mi hermano lo vas a conseguir.- estan consiguiendo que este como un tomate durante media hora seguida y como siga así mi cara va a reventar. Entramos las cuatro juntas al salón y los tres chicos se dan la vuelta. Los tres sonríen como idiotas. A mi me entra la vergüenza y acabo detrás de las tres chicas. Pol y Aleix se acercan a ver su novia y mujer respectivamente, y Laia se va con Álex, así que ahora me quedo totalmente al descubierto. Marc de está acercando y mi corazón está al borde del infarto.

- Hola Anita, estás muy guapa.- yo me pongo roja otra vez.

- Gracias.- le digo tímida, ahora mismo me estoy preguntando donde se ha quedado la chica que no le temía a nada y no tenía vergüenza, ¿dónde estará? Porque me hace mucha falta ahora mismo.

- No comáis pan delante de los pobres.- digo en alto para que las tres parejas se dejen de besar y sobar, los únicos que no hacían nada los casados como buenas personas civilizadas.

- Anda vamos a la cocina a que me ayudes, más que nada para no ver estas escenitas.- me dice un poco incómodo. Voy detrás de él hacia la cocina. Allí le ayudo a terminar de preparar la ensalada, vamos sacando las cosas, yo voy delante, cuando me giro para preguntarle donde dejo lo que llevo en las manos lo pillo mirándome el culo.

- ¡Marc! ¡NO ME MIRES EL CULO!

- Es que ese pantalón te lo realza y te lo hace más redondito.- mi mandíbula se desencaja.

- Te odio.- aquí ha vuelto la chica impulsiva.

- Me quieres.- me responde él un poco chulo.

- Matar.- si él tiene respuestas yo tengo más.

- A polvos.- no me puedo creer lo que acaba de decir. Las tres parejas nos miran cada cual más sorprendido, más que nada porque Marc no es así. Dejo las cosas en la mesa y a falta de respuestas le va un buen tortazo en toda la mejilla, se lo merece.

Me voy de su casa como alma que lleva el diablo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me voy de su casa como alma que lleva el diablo. ¿A dónde voy? Pues no lo sé, antes de llegar a pasar la puerta de su casa una mano me agarra el brazo.

- Lo siento.- me dice él con su mejilla roja por mi mano, acabo de joder pero bien la cena.- Entra otra vez y hablamos, te prometo que no vuelvo ser un patán maleducado.- entro sin decir nada, en el salón hay un silencio bastante incómodo por mi culpa.

- Creo que podemos aplazar la cena para otro día.- dice Laura, y yo me siento totalmente culpable.

- Sí, mejor.- dice Álex. El resto asienten sin decir nada. Se van todos y yo me siento en un lado del sofá. Marc vuelve.

- Siento haber jodido la cena.- digo un poco bastante avergonzada.

- Lo siento yo, ya sabes que yo no soy así, me he pasado y me merecía la ostia que me has dado y aun me duele.- me levanto y voy voy a por algo frío a la cocina. Cojo un paquete de guisantes muy mítico para quitar el dolor. Lo envuelvo en un trapo y con cuidado se lo pongo en la mejilla dolorida. Sin darme cuenta me he sentado en sus piernas y él me está agarrando la cadera. Miro como el trapo incide en su mejilla ya que no lo quiero mirar a la cara, me da un algo si ahora lo miro, más que nada porque tengo su cara a centímetros de la mía.

Hola chicas, feliz navidad a todas 🎄. Espero que hayáis pasado uno días fantásticos en familia, yo lo he hecho. Espero que os guste el capítulo mañana sobre esta hora habrá otro. Nos leemos pronto 😘😘😘❤❤❤.

¿Mi Salvación O Mi Perdición?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora