¿Mi Salvación O Mi Perdición?

Capítulo 34

Estoy en una cama que no es la mía. Me despierto y veo a Marc a mi lado, dormido, con un brazo por mi cintura. Sonrío como una idiota. Estamos los dos desnudos. Me giro. Pongo mi cara en su pecho y lo abrazo. Vuelvo a cerrar los ojos. Estoy tan agusto que me vuelvo a quedar dormida. Noto movimiento a mi lado y dejo de notar calor. Alguien me besa en la frente. No abro los ojos y sigo durmiendo. Al rato suena la puerta y se cierra. Yo sigo en mi mundo. Vuelvo a notar el calor a mi lado. Abro los ojos despacio y Marc me empieza a dar besos por todos lados.

- Buenos días.- me dice después de la sesión de besos.- He pedido el desayuno, ya se que desayunas en mi casa, pero nunca se que desayunas, así que he pedido chocolate con churros.

- Eso a ti no te combiene.- le riño.

- Que humor por la mañana, vamos que es solo un día, además siempre lo puedo quemar por la noche.- me muero. No me puede decir estas cosas.

- Sí, si quieres lo podemos quemar ahora.- sabe que lo digo a coña.- Anda vamos a desayunar que las cosas se enfrían.

Salgo de la cama y me pongo la camisa de ayer, suya evidentemente y unas bragas. Su camiseta me queda como a él ya que yo soy un poco más alta. Cogemos la bandeja del desayuno y la metemos a la cama. Hablamos de la gala, Marc no deja de echarme piropos y yo no paro de ponerme roja, no es que no me guste que me diga que iba guapa, si no que él me gusta y que piense esas cosas de mi pues hace que me lo crea.

- Marc o paras o...- me corta.

- ¿O qué?- se acerca a mi peligrosamente.

- O... o...- me calla con un beso, el beso sabe a chocolate. El beso se vuelve rápido. Marc se coloca encima mío, me quita la camiseta a la velocidad de la luz. Seguimos besándonos. Me quita el sujetador y seguimos con el beso. Sus labios bajan a mi cuello, está bajando a mis pechos cuando suena la puerta.

- Joder, ¿quién coño será ahora y que querrá?- Marc se levanta de encima mío, yo cojo la sábana y me tapo, oigo algunas voces pero no salgo a ver lo que pasa. Marc entra, coge la bandeja y se va. Vuelve a entrar a la habitación.

- Nos tenemos que ir.- me dice de mal humor.

- No te enfades.- voy hacia él y dejo que la sábana se caiga.

- No me enfado, pero estábamos tan bien que no quiero que esto se rompa.- me dice a milímetros de mi.

- No sé va a romper Marc.- le digo apoyando su frente con la mía. Se separa de mi y empieza a vestirse. Yo me quito su camisa y se la lanzo. Me pongo el vestido y subo la cremallera, salgo de la habitación y lo espero en la entrada del hotel, ya he pedido el taxi para los dos y que nos lleve al circuito. Baja y se dirige a mi.

- ¿Te has enfadado?- me pregunta.

- Sí, me enfada que no confíes en mi, pero vamos que si tu quieres que esto acabe lo dejamos aquí, te pago la mitad de la habitación y punto.- me cruzo de brazos y lo miro. El baja la vista y no dice nada.- Perfecto.

Salgo fuera, se que el viene por detrás. Una ráfaga de aire nos azota. Me froto en los brazos para intentar quitarme el frío. Veo como se quita la chaqueta y me la pone por encima. Me la quito y se la doy.

- No quiero nada tuyo.- estoy muy cabreada. Si piensa que puede hechas un polvo conmigo y decirme palabras bonitas lo lleva claro. El taxi llega y nos montamos atrás. El conductor viendo el ambiente que hay pone la radio. Yo miro por la ventanilla hasta que llegamos al circuito. Bajamos y vamos andando hasta su motor home. Álex ya no está, se ha ido a hacer los test a Jerez, así que me voy a su habitación. Me tiro a la cama y decido llamarlo.

- Hola petita.- me saluda muy contento.

- Hola Álex.- le digo yo no muy animada.

- ¿Qué te pasa?- se lo cuento todo omitiendo ciertos detalles.- Mi hermano es un mentecato, ya se le pasará, se dará cuenta que no ha sido solo un polvo, además tú le gustas y espero que no te deje pasar porque si no lo mato.

- Gracias Álex, voy a recuperar horas de sueño.- le digo ya despidiéndome de él.

- Vale petita, hablamos luego.- me cuelga. Me quito el vestido y me meto en la cama. Caigo rendida al minuto de rozar la almohada.

Narra Marc

Se que la he cagado, para mi ella no ha sido sólo un polvo. Mientras pienso en mis cosas suena mi móvil. Es mi hermano.

- Eres un idiota.- dice según descuelgo la llamada. Supongo que Ana le ha contado cosas.

- Lo sé.- le doy la razón porque lo soy.

- No te quedes parado, haz algo, dile a Joselu que te ayude a preparar algo, no sé, pero no te quedes parado porque ella piensa que es un simple polvo y los dos sabemos que no, así que espabila.- me dice antes de colgar. Ya sé lo que voy a hacer para demostrarle que me importa.

Hola chicas, espero que os guste el capítulo de hoy porque es el último de estas navidades. No me matéis jajajaja. Bueno espero que los reyes os hayan traído muchas cosas, a mi me han traído ropa interior 😏,  una bolsa de agua caliente, unos calcetines super calentitos para dormir y un antifaz para dormir, más las cosas del caga tio, una camisa, una chaqueta de cuero y un pijama super calentito 😍. Escribirme en los comentarios vuestros regalos. Nos leemos pronto 😘😘😘❤❤❤.