Capítulo 1

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Hacía tiempo que no me sentía tan tranquilo, el viento suave que sacudía las ramas del cerezo que decoraba el jardín de casa hacía que los pétalos volaran libres, me relajaba verlo. Era una vista que solo se podía ver durante un corto periodo de tiempo en primavera. Amaba estar así, no acostumbro a relajarme, no con la ajetreada vida que llevo. 

Soy un doncel sacerdotiso, mi familia y yo nos dedicámos a matar a los demonios que acechan los pueblos para comerse a personas o hasta raptar a doncellas y donceles de familiar ricas. En los tiempos que corren, ahora la gente necesita nuestra ayuda, cada vez són más fraqüentes los casos así. Nuestra familia lleva años trabajando en este oficio, somos los más especializados respecto a otras pero eso no quiere decir que seamos los únicos. Aun así, nuestro servicio no és nada barato, pues solo los adinerados pueden tener ese privilegio.

Nos empiezan a preparar desde que somos muy pequeños. En los primeros años nos enseñan a purificar objetos o sitios maldecidos o hacer sellos y manejar las armas. Más tarde, con un adulto, se nos enseña a derrotar a un demonio y cuando ya estamos preparados dejan que hagamos las misiones solos.

-Sasuke, tenemos un nuevo cliente, padre dice que vallamos.

-Vale, ahora voy.

Él es mi hermano mayor, Itachi, es muy bueno en todos los aspectos, tanto como realizando sellos muy poderosos como manejar a la perfección todas las armas y, aun que me cueste reconocerlo, es más bueno que yo. Incluso cuando era pequeño decían que tales habilidades no eran comunes en un niño de su edad. Por eso siempre lo veo como alguien a quien superar, me esfuerzo mucho y entreno para ser más fuerte que él. Pero no solo lo veo como a un rival sino que también lo veo como un hermano mayor y por eso mismo me gustaría pasar más tiempo con él a solas como solíamos estar cuando era pequeño, pero ahora es diferente. Siempre está ocupado, o entrenando o se va a los pueblos por encargos de clientes. Ahora casi nunca lo veo, es frustrante.

Luego de que se marchara me levanté unos segundos después y me dirigí hacia la habitación donde mi padre y mi hermano estavan sentados en el suelo con las piernas cruzadas y, delante de ellos, estaba un señor de unos 50 años. Se trataba del cliente y al parecer era el jefe de una aldea. Me adentré y me senté al lado de mi padre.

-Perdón por la espera.- Mi padre solo afirmo con la cabeza.

-El es mi hijo Sasuke.- mi padre me presento y yo me incline hacia delante.

-Un gusto conocerle- volví a mi postura anterior.

-Dinos, ha pasado algo?

-Sí, ha pasado algo terrible.- parecía realmente asustado y preocupado -Hace un día, una criatura atacó a nuestro pueblo por la noche, ha provocado un incendio y gran parte de las casas están totalmente destrozas. Y no solo eso, la mitad de la gente del poblado ha desaparecido pero por suerte no hemos encontrado a nadie muerto.

-Nadie?- mi hermano parece sorprendido aun que es normal, los demonios no actúan así, no secuestran a gente, normalmente los matan por gusto pero que no hayan encontrado a nadie muerto es algo extraño-

-Exacto, me ánima pensar que aun los podemos encontrar vivos aun que no pueda hacer mucho…

-Seguro que si puede, danos toda la información posible que nos pueda servir-Itachi intentaba animarlo- ha visto a la criatura?

-No, nadie del pueblo lo ha visto con seguridad. 

-Si nadie lo ha visto, cono puede estar seguro que se trata de un demonio- mi padre preguntó para asegurarse, seguro que ha pensado lo mismo que Itachi y yo, la actitud de esta criatura no es normal, los demonios no tienen este tipo de comportamiento. -Si no es un demonio no podremos hacer gran cosa, para otro tipo de bestias o animales feroces normalmente se encargan los cazadores.

Miradas en la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora