Dolor, mentiras y algo más...

2.5K 123 106
                                    


Los corazones que merecen ser más amados, enamorados e incluso seducidos son aquellos que, en algún momento de su vida, recibieron tanto dolor y heridas que justo ahora creer que puedan llegar a amarte es sencillamente imposible.

¿No se han encontrado con esa clase de amor alguna vez? Ese tipo de amor que te hace preguntarte una y otra vez: ¿será posible que alguna vez llegue a amarme? ¿Soy tan mala persona que no valgo la pena como para que ella sienta lo mismo que siento yo? ¿Qué demonios estoy haciendo mal?

Es ese tipo de amor que te hace detenerte a pensar qué tanto daño pudieron haberle hecho para que tú, a pesar de tus esfuerzos y voluntad, sigas insistiendo en algo que parece que no va a llegar; un te amo de esa persona por ejemplo, un "te veo en mi futuro", un "también creo que eres el amor de mi vida" o aquel eternamente buscado "no sabría qué hacer sin ti".

¿Saben qué es lo peor? Que esa persona tan difícil de querer es precisamente la única persona que ha logrado robarte el corazón sin medidas ni limitaciones. Sus risas, su forma de ver la vida, sus rechazos e incluso su lejanía autoimpuesta funciona como un imán que, sin darte cuenta, hacen que te quedes ahí, quieta, con esperanza y creando algún nuevo plan que crees que va a funcionar para que al final del día ella sonría de amor por ti.

Quizás lo hermoso de ese tipo de personas, esas que ya no se creen los cuentos de amor contados en alguna borrachera si no que creen en historias de amor publicadas por las mejores editoriales, es que si al final consigues que te amen, la recompensa es tan grande que no cabes de amor y felicidad.

Si me preguntan a mí, creo firmemente que sin importar el tipo de amor que llegue a tu vida o la persona que te mueva el piso, debes de ir regalando amor y voluntad a cada paso que des, aunque al final esa persona no llegue a amarte habrás dado todo de ti y eso bastará para que tu corazón quede en paz.

Pero piensa, si al final esa persona te suelta un "te amo" justo en la cara, de frente y sin tapujos, no habrá mayor regalo en la tierra que disfrutar ese momento, y decirte a ti mismo: "Mi mismo, hoy, un día cualquiera te han hecho el ser más feliz del mundo. Hay hambre, hay miseria, enfermedades y dolor, sigue existiendo gente estúpida y personas sin corazón, pero hoy, una sola persona, la más hermosa de todas, logró que este día se pintara de colores imposibles para robarte suspiros y hacerte sentir que la vida es una mierda (sí, una completa mierda), pero que siempre valdrá la pena vivirla si es a su lado... ¡disfrútalo mí mismo!"

_______________________________________________________________

Es increíble lo fácil y rápido que puede influir la voluntad para que las cosas salgan tal y como las quieres. Por ahí dicen que el valor y la tenacidad mezcladas con la decisión son los ingredientes exactos para que todo, absolutamente todo sea posible, incluso lograr que lo impensable se haga realidad y que todo vaya tal cual lo has planeado e incluso algunas veces mejor de lo que los has planeado.

Quizás entre mis planes no estaba la convicción de ganar un Grammy o de ser acreedora de algún premio Nobel (aunque quién sabe, llevo tanta historia encima que eso de escribir algún libro o canción no es algo que se escape de mis manos en su totalidad) pero sí que estaba la firme voluntad de retomar mi vida con bombos y platillos y sacar flipando a todo lo que me resultara molestoso y en especial si su nombre empezaba con la afanada letra A.

No habían pasado ni tres horas desde que Alice se incluyó en la idea de regresar a Paris, pero yo ya tenía absolutamente todo listo para volver e incluso, a regañadientes, estábamos camino al aeropuerto con una Alice marcada por la alegría, una Mairím deseosa de ver a su mamá Alejandra y mi familia pegando el grito al cielo por haber adelantado la fecha de regreso.

Sin Fronteras... (Loving without an Ending) ¡Hasta el final del camino!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora