[1] 𝐂𝐎𝐅𝐅𝐄𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐏 ࿏ Choi Yeonjun

IV. I Need You

Fue difícil separarse después de unos minutos en los brazos del otro. Ambos se sentían tan completos en ese momento y temían que al separarse, el sentimiento desapareciera. Yeori grabó en su memoria el aroma de Yeonjun y por fin decidió alejarse un poco.

Se dejaron caer en las sillas de la terraza y se quedaron en silencio, el teléfono de Yeori sonaba en el interior del apartamento pero ella decidió ignorarlo, no quería arruinar este momento, dejo caer su cabeza sobre el hombro de Yeonjun dejándose llevar por los sonidos de la calle y la vista de los pocos locales abiertos que quedaban.

Por una vez quería ser la dueña del momento, aún si mejor que nadie sabía que la vida nunca es como nosotros esperamos y mucho menos como la planeamos, cada día es un nuevo capitulo que ni siquiera nosotros tenemos el privilegio de escribir a detalle, somos solo un par de marionetas que son controladas al placer de un destino y casualidades.

Finalmente accedió a entrar por su teléfono encontrándose con los mensajes mostrando preocupación por su larga ausencia. Yeonjun apareció detrás de ella y dudo un momento en volver a rodearla con sus brazos, finalmente solo coloco su mano sobre el hombro de Yeori robándole un ligero suspiro.

— Debo volver a casa —anunció casi en un susurro desganado—. Lo he pasado muy bien contigo, Jun.

Hizo el intento de quitar la sudadera de Yeonjun, pero él fue más rápido y tomo el borde de la prenda impidiendo que Yeori se deshiciera de ella, ella lo miro extrañada.

— Quédatela. Es un obsequio. —Yeori sonrió y sin decir nada más asintió sabiendo que Yeonjun no aceptaría una respuesta negativa de su parte.

Era increíble cómo en tan poco tiempo habían entablado tal relación. Ninguno se quejaba, solo dejaban que el destino los manejara a su deseo permitiéndoles estar en la vida del otro por le tiempo que fuera necesario, siempre rogando que fuera por un día más.

Yeori decidió llamar un taxi, ignorando por completo el reproche de Yeonjun insistiendo en llevarla debido a la hora. Pero ella no permitiría que descubriera aquel destino que le aguardaba, aquel lugar que en su momento le brindo felicidad, hoy era una espina en su delicado pero fuerte corazón. Yeonjun se alejo un momento y Yeori aprovecho para dejar escrito su número de teléfono en una nota adhesiva.

Se despidieron en la entrada del edificio de apartamentos con un último abrazo y un pequeño beso en la frente de Yeori que la mantuvo sonriendo en el camino a casa.

Al bajar del vehículo, agradeció y miro la gran casa delante de ella. Por fuera lucía tan normal e incluso irradiaba luz, ojalá fuera cierto. Sacudió su cabeza y ahuyento las lágrimas para adentrarse en su roto hogar.

Todo seguía igual que cuando salió, incluso la nota seguía en la mesa de centro, ahora acompañada de otra nota que relataba lo que había sucedido en su ausencia, camino un poco y la habitación se hizo presente en su campo visual. Sonríe. Saco su teléfono y envío el mensaje que anunciaba que había llegado a casa y se disculpaba por la gran demora, invento una excusa rápida y lo coloco en modo avión; no tenía ánimos de lidiar con su padre en este momento.