—Al principio todo era genial, nos llevábamos bien, viajamos por el mundo, algunas veces teníamos discusiones, pero nada que no se pudiese solucionar. Todo era simplemente fantástico. Sin embargo cada vez éramos más famosos y la gente enloquecía en mayor grado, fans descontroladas y que hacían cualquier cosa simplemente por tocarnos, aunque simplemente fuese con un dedo.
>Eso hacía gracia y nos emocionaba, pero todo tenía un límite y algunas fans lo traspasaban con frecuencia. Después comenzaron a meterse en nuestra vida privada aprobando o desaprobando a nuestras novias e incluso algunos amigos. Todo comenzaba a ser agobiante y encima solo iba a peor. Todos en alguna ocasión habíamos dicho hasta aquí llego, ya no puedo más, no quiero que estén las veinticuatro horas espiándome, diciéndome con quien tengo que salir y a quien tengo que querer. Todos absolutamente todos lo habíamos hecho, nos habíamos propuesto dejar de cantar, pero cuando veíamos a las otras fans, chicas normales, que, inevitablemente, sueñan con casarse contigo y vivir un amor eterno, que sin embargo en la vida real son felices con un simple autógrafo y un abrazo cariñoso… esas ideas se te van de la cabeza, porque recuerdas por qué en un principio te gustaba ser cantante, la idea de hacerlas felices, de que griten tu nombre y un simple hola las haga sentirse las más afortunadas del mundo. Nos apoyábamos mutuamente, los cinco, para soportar a aquellas fans tan agobiantes, pero Louis comenzó a comportarse extraño. Primero comenzó quejándose demasiado, después actuaba extraño recibía mensajes constantemente de alguien que no nos quería decir y al principio pensábamos que era Eleanor, pero ¿Por qué nos iba a ocultar eso? No le di mucha importancia aunque por curiosidad, más que por otra cosa, decidí cogerle el móvil. Se me ocurrió la idea de que quizás estuviese engañando a Eleanor y sin embargo lo que me encontré fue algo totalmente diferente. En la pantalla se iluminaba un nombre: Sr Director. Primero pensé que era una broma, pero había demasiados mensajes.
“Louis, deberías pensar si esto es lo que quieres para el resto de tu vida”
“Louis, ¿de verdad piensas que no tienes más opciones?”
“Louis, aun estas a tiempo de cambiar tu vida”
“Louis, aun estas a tiempo de volver a ser feliz”
“Louis, elige a unas personas, para no sentirte solo y yo las puedo salvarlas contigo”
“Louis, puedo salvar a tus amigos, a los cinco, piensa en lo que te estoy diciendo, solo tengo que pulsar un botón y serás feliz, nadie guardara recuerdos, volverás a ser el Louis de antes y todo seguirá igual en tu vida, no puedo garantizarte la de los demás”
Esos entre otros, pero por primera vez después de este último hubo respuesta.
“De que estás hablando, ¿Qué botón? deja de mandarme mensajes, si eres una fan no vas a conseguir mi atención”
“Louis, no soy una fan, soy alguien que quiere ayudarte y que quiere que tú le ayudes”
“¿Cómo vas a ayudarme? deja de decir mi nombre vas a borrármelo… ¿Y como podría ayudarte ¿Qué quieres, dinero?”
“Louis, puedo llevarte a otra realidad en la que tu vida es exactamente igual a excepción de lo que te molesta… FAMA. En cuanto a lo que quiero yo no importa, de momento.”
“¿Y como se supone que vas a hacer eso?”
“Louis, confía en mi”
“No sé ni quién eres”
“Louis, me conoces”
“¿Quién eres?”
“Louis, yo soy…”
ESTÁS LEYENDO
Paranoia [Editando]
RomantikCuando tu vida es normal eres feliz, con tus amigos, familiares, una exitosa carrera… todo es genial, Pero cuando una noche te lo arrebata todo un simple mensaje de ordenador que ni siquiera aceptaste queriendo ¿Qué harías? El doctor Tomlinson dice...