Capítulo 18: ¿Adiós _______?

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—¿______?— Niall agitó el cuerpo de la otra ______ con nerviosismo.

—¡Espera!— dijo Louis, le tomó el pulso y negó con la cabeza mientras comenzaba a sollozar, abrió uno de sus ojos y unos preciosos orbes azules y apagados se dejaron ver.

—¡¿Esto qué significa?!— Gritó Niall— ¿_____ está muerta?— Louis no le respondía solo lloraba y besaba la cabeza de ______, Niall solo se estresaba— ¡Louis! ¡Escúchame joder!— lo cogió por el cuello de la camisa— ¡Llévame a mi realidad!

—¡No sé si ella seguirá viva! ¡Podrían haberla incinerado si allí ya estaba muerta! ¡O peor podría estar…!

—Enterrada viva…— Niall cayó en la cuenta— ¡llévame de una jodida vez  a mi realidad!

Louis solo asintió mientras trataba de no llorar y movía el cadáver de mi yo de esa realidad. Niall se echó impacientemente en la cama, ni siquiera quería mirar el cadáver de la otra ________. Louis conectó todo y le dio un aviso.

—Vas a volver ahora.

Niall cerró los ojos y al volver a abrirlos se encontró con un techo blanco, se incorporó, reconocía el lugar, su casa, su habitación, su cama. Había vuelto, encendió la radio.

“Y ahora volvemos a poner la última canción de One Direction, las directioners se han vuelto locas esta mañana en el live que han dado en…”

—¡Sí!— gritó Niall, estaba en casa.

—¿Niall? Hijo, ¿Qué ocurre ahora?, no me digas que vuelves a estar con el tema de los aliens otra vez—su madre entró por la puerta.

—¡Mama!— Niall corrió a abrazarla, pero se separó inmediatamente y la miró horrorizado— ¿Estamos en Irlanda?

—No… estamos en Londres, vine porque me dijeron que te estabas comportando raro y me preocupé.

—Oh…— Niall se reactivó al recordarme y dejando a su madre muy sorprendida en la habitación buscó un teléfono con el que poder llamar— recuerda…— se dio unos golpecitos en la cabeza mientras marcaba mi número de teléfono.

“El número al que llama está apagado o fuera de cobertura, por favor deje su mensaje después de la señal…”

Niall colgó frustrado y volvió a marcar.

“El número al que llama…”

—¡No!— Dio un fuerte golpe en la mesa. Se relajó al recordar que también sabía mi fijo. Lo marcó y tres pitidos intensos se hicieron eternos para sus oídos.

—¿Diga?— sonó al otro lado del teléfono, era una voz muy parecida a la mía.

—¿_______?— se le iluminaron los ojos.

—No… soy su hermana.

—Oh… ¿Podría hablar con ella?—Niall se mordía tan fuerte el dedo gordo por el nerviosismo que no se dio cuenta de que se había hecho sangre  hasta que la saboreo con su lengua.

—¿De parte de quién?

—De Niall, un amigo.

—No… lo siento… pero no puedes hablar con ella… murió… antes de ayer— se notaba que mi hermana hacía esfuerzos por no llorar.

—…— Niall no sabía que decir, ni cómo solucionar aquello.

—El ataúd ya ha sido sellado, pero vamos a celebrar el entierro esta tarde en el cementerio de New Mariane a las siete.

—Oh… bien…— Niall estaba en shock, se estaba imaginando muchas cosas, a mi tendida sobre una camilla de la morgue y con una sábana blanca por encima que tapa lo justo, pero que dejaba ver mi pálida piel y mis cicatrices de la autopsia— No quiero que te moleste la pregunta, pero… ¡tengo que saberlo!… ¡¿Le habéis hecho autopsia?!

Paranoia [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora