Dime otra vez, ¿cómo nos conocimos?

Capítulo 5

NARRA ASHLEY:

A las 12:30 íbamos en el carro, cantando como locas. Imagínense eso... Cinco chicas, el álbum de su artista favorito y el volumen al máximo. ¡Qué bueno que ya llegamos! pensé, no me quería quedar sorda. 

Lo primero que hicimos fue ir a una tienda que nos encantaba a todas, después fuimos a almorzar, dimos una última vuelta y en ese momento fue cuando lo vi...

NARRA MARTIN:

-¡¿MARTIN?!-gritó Ashley.

Watse había conseguido el primer vuelo a Guatemala y yo me puse tan feliz que... (no lo puedo decir, es muy vergonzoso).

-¡Hola!-le dije mientras corría hacia ella-¿cómo estás?-la cargué y le di un beso en la mejilla.

-¡Wow!-me sonrió y yo la bajé-estoy muy contenta de verte de nuevo-su sonrisa se volvió más amplia.

-Yo también estoy feliz de verte-me dio un abrazo y luego aparecieron cuatro chicas más. De ellas solo reconocí a Diana que estaba atrás de todas. 

Todas se acercaban lentamente, yo solo quería hablarle a Ashley, a solas. Le tenía que decir, la invitaría a tomar algo...

-¡Hola!-me dijo una voz chillona, me di la vuelta y descubrí a Diana atrás mío.

-Hola, ¿cómo te va?-le pregunté mientras soltaba a Ashley y abrazaba a Diana.

-Pues... Me va de maravilla-hizo una pausa-¿y tu? No quiero sonar grosera pero, ¿por qué estás aquí?

-A mi también me va bien-le guiñé un ojo-y... me encantó el país entonces quería regresar.

Seguimos hablando como unas dos horas, conocí a sus otras amigas que eran muy simpáticas. Ya a eso de las cuatro de la tarde las chicas se empezaron a ir, menos Diana y Ashley. Necesitaba quedarme a solas con Ashley, teníamos que salir pronto ya que yo solo estaría en Guatemala por tres días.

NARRA ASHLEY:

Quería decirle algo muy importante a Martin, pero tenía que ser a solas, sabiendo lo chismosa que es Diana... Lo publicaría en todas sus redes sociales y yo no quería eso. Al final Dios me mandó un milagro, ¡Diana tenía que ir al baño! Y cuando quería ir, tenía que ir. Nos dijo que regresaba en un momento y salió corriendo por el pasillo mientras que yo soltaba un suspiro.

-Oye-dijimos al mismo tiempo- ¡oh! perdón, tu primero-me dijo.

-Okay...-dije algo insegura.-Me preguntaba si...¿Quisieras salir conmigo?-se quedó impactado.

-Sabes, yo te iba a preguntar lo mismo-me dijo con una sonrisa.-Y por supuesto, me encantaría. 

Al final, quedamos en ir a cenar a un restaurante muy fino mañana por la noche. Él iría por mi al apartamento... Ya quería que llegara mañana...