CAPITULO 4- Resaca, Clases y... ¿Calmar Fieras?

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CAPITULO IV Resaca, Clases y... ¿Calmar Fieras?


Me remuevo y la presión en mi cabeza crece ¿por qué tenía que beber así? estúpido Ashton. Lloriqueo aun con los ojos cerrados. Trato de acomodarme mejor en mi cama complaciéndome encontrar un calor agradable, se siente tan bien que me hace enrollarme más en las sabanas. Aun con dolor de cabeza punzante se siente bien estar acurrucada... sonrió...

Espera Becca... ¿acurrucada?... ¿con quién?... mi cabeza comienza a trabajar a toda velocidad para recordar todos los sucesos de la noche logrando acrecentar el dolor.

Poco a poco comienzan a llegar a mí: el cine en donde fui un desastre total, luego la llamada, la disco, dos rondas de chupitos, el baile con el chico que intento besarme... qué más... ¿baile con Ethan? recuerdo su cara muy cerca de la mía ¿acaso nos besamos? mis labios pican tratando de recordar algo que se me escapa. Luego de eso recuerdo a Shelsey vomitando en el estacionamiento y... que llegamos a su casa... no, la Ethan, era la casa de él.

Después de eso todo es borrones... Ethan abrazándome por un pasillo y... nada más.

Eso fue todo lo ocurrido que puedo recordar así que ¿él me está abrazando por la espalda? ¿Tuve sexo con Ethan?. Abro los ojos con rapidez y observo los brazos enroscados en mi cintura y que atraen mi cuerpo al suyo con fuerza, deja un beso en mi cuello y al hablarme al oído descubro que en efecto es quien sospeche pero eso no cambia mis nervios.

- Buenos días, Laine. ¿Cómo amaneces?.- La voz de Ethan es suave, apenas un susurro.

- Buenos días, Ethan. La verdad mal. ¿q... qué haces aquí en la habitación conmigo? ¿es tu cuarto? ¿tú y yo...?- Mi voz es amortiguada por la sabana en mi boca, el aliento mañanero no es agradable y menos estar acostada con alguien que apenas conocí ayer. No sé qué paso y comienzo a sentir el desquicio apoderarse de mi mente.

No pensabas lo mismo mientras dormías acurrucada.- Grita mi conciencia.

Cállate que tú no ayudas olvidando que sucedió, ese es tu trabajo. Consigo calmarme al descubrir que aún estoy vestida. Él, por otro lado, lleva otra ropa. Se sienta y me observa divertido ante mi expresión de terror.

- Calma Laine. No pasó nada entre nosotros, no estaba ebrio ¿recuerdas? aunque tú si lo estabas y mucho - ríe y continua hablando -. Acabo de entrar a despertarte, anoche venias balbuceando algo sobre que tienes que ir a la universidad con tu mejor profesora del mundo mundial... si, justo así lo dijiste.- ríe fuerte y yo doy un salto fuera de la cama buscando mis zapatos y creando distancia entre nuestra cercanía. Mi cabeza me insulta por mi brusquedad.

- ¿Dónde está el baño?.

- Esa puerta.- señala una puerta y entro rápidamente cerrando tras de mí. Lavo mis dientes con un cepillo nuevo que estaba en un cajón junto a otros muchos. Torturo a mi cabeza para que ceda y me muestre lo que no consigo recordar pero nada llega a mí.

Salgo y repaso mentalmente que hacer, no puedo ir a estudiar con este vestido, no puedo ir a casa porque mamá sospechara al ver que no me cambie con la ropa de Shels y llamaría a Karina, de la casa de Shels sería la misma historia con diferente casa y no puedo faltar.

- Tengo que llegar pero no puedo ir así. No sé qué hacer pero debo ir - Hablo rápido y voy de un lado a otro en la habitación mientras Ethan solo esta acostado con los brazos tras su cabeza haciendo que se marquen los músculos de sus brazos y su camisa blanca se adhiera más a su abdomen, ese pantalón de chándal le queda de muerte y todo eso lo noto mientras aprovecho escasos momentos para mirarlo al ir de un lado a otro.

EL VECINO DE MI AMIGADonde viven las historias. Descúbrelo ahora