My Happy Face

capitulo 14

Después de la batalla, de haber sido derrotado por el hombre que me había arrebató todo yo solo me deje caer en mi propio abismo mientras la muerte se aparecía frente a mí con una guadaña de nieblas. Elena se liberó de lo que happyface le había hecho, entonces me miró mientras lloraba, me pidió perdón al haber fallado. Yo le di la mano para ayudarme a levantar, le dije que tan sólo debíamos caminar hasta que la sombra de la derrota se aparte de nuestras mentes, ella me miró para abrazarme ante lo que quedaba de la ciudad
- Estos cuerpos deberían tener una santa sepultura, ¿me ayudas?- le pregunté a Elena
- Sí claro, en parte fue nuestra culpa que ellos murieran - ella respondió y al hacerlo una pregunta vino a mi mente
- ¿Quién había derrotado al rey Alfredo que causó todo esto??Quién es happyface?... Aunque no quería creerlo no pude esconder que escuche la voz de él tratando de hacerle entender a Alfredo los sueños de las familias que hoy visitaban su discurso, él lo mató por ellos, pero al igual mató a mis hermanas y además me pidió perdón – dije con indignación golpeando el piso
Tomamos los cuerpos luego de haber cavado la tumba, los sepultamos en ese lugar como el último que su alma sin descanso verían, miré el cielo y comenzó a llover, llovió pétalos blancos del cielo cayendo cada uno en las tumbas de las vidas perdidas. Luego de terminar mi trabajo caminé junto a Elena en busca de un nuevo destino, de una nueva parada, más bien sólo lo buscaba a él porque por alguna razón sólo podría vivir hasta que ese maldito se muera.
El quien me lo quito todo, yo quien lo arrastrará al infierno hasta morir los dos, para poder terminar la historia en la parte más triste del final. Como un papel con una promesa que luego es quemado para dejar que las cenizas se lleven lo poco que quedaba.
-Por el momento trabajemos, vivamos en esta nuestra ciudad y levantemos los cimientos de las cenizas de la voluntad de vivir en paz, seamos los héroes de este mundo roto, para eso necesito tu ayuda, ¿vienes? - pregunté mirando a Elena.
- No necesitas dar un gran discurso, estoy dentro – respondió Elena
Mientras caminábamos entre los escombros vimos la cara de un niño, la sangre cubría su cuerpo, sus facturas eran profundas realmente no tenía idea de que tan grave eran sus heridas, pero eran graves, aparté los escombros y lo lleve corriendo aún hospital los cuales estaban llenos de pacientes. Entonces grite pidiendo ayuda mientras mis manos se llenaban de sangre, de su sangre, un doctor quien pasaba luego de haber terminado una operación, escuchó mis gritos y me ayudó a llevar su cuerpo a las salas de cirugías. Elena estaba sentada comiendo un dulce, después de todo era inmortal así que realmente no sabía el significado de la muerte.
Me dormí esperando el resultado de la operación, dormí frente a la puerta, me levanté y busque el doctor entonces lo encontré bebiendo café luego de fumar su cigarrillo.
-¿lo salvo? - le pregunté
-Primero que todo por un demonio sea educado y diga buenos días joven – dijo terminando de beber su café y luego agregar la respuesta que necesitaba -  Sí, lo salve de milagro, su cuerpo tiene múltiples fracturas además de la sangre pérdida pero está estable, búscalo en el cuarto 201.
Corrí luego de darle las gracias y lo mire, mire su pequeño cuerpo para luego agradecer a Dios por la oportunidad que le daba, me marché y le dije que volvería.
Meses después…
En efecto los meses pasaron y luego de largos días de trabajo en un café de acompañantes pude pagar el dinero de la operación.
Volví a ver cómo estaba y me encontré con un Ángel que me sonreía al ver mi cara. Su cabello era dorado, sus facturas se habían curado y hoy le daban de alta. El doctor minutos antes me había informado que sus padres murieron en aquel incidente así que todo lo que tenía era yo
- Soy tu hermano perdido, vengó para llevarte a casa – le dije mientras me acercaba a darle un fuerte abrazo - Vamos a casa Hope
Él se convirtió en mi nuevo hermano, aquel pequeño compartía mi misma desgracia…. el no tener nada.