¿Por qué todo me sale tan mal? Yo no quería hacer esto, no fue mi intención. Encuentro a la persona mas importante en mi vida y la hago sufrir. No se confundan, quiero mucho a los chicos, pero es diferente. Si tan solo no la hubiera invitado. Claro está que en ese tiempo no sabía quien era, y lo único que quería era hacerla sufrir. Sufrir ... lo único que he hecho últimamente es hacerle la vida imposible. Pase la mayor parte de mi vida buscándola y cuando la encuentro pasa esto. ¡Que suerte la mía!
- Hola, hijo- Una voz interrumpe mis pensamientos.
-Hola, Sra. Wilson- respondo. Ella recién acaba de llegar junto a una joven.
-¿Como se encuentra ella?- pregunta
-El doctor me dijo que se encuentra bien, que solo fue un desmayo por cansancio, también dijo que no ha comido bien últimamente- digo mientras veo a Mady acostada en una cama de hospital. Su rostro muestra serenidad y paz.
-Ahora que me acuerdo, la noche anterior ella se quedo toda la noche despierta mienta conversaba conmigo. Al día siguiente, o sea hoy, ella no desayuno porque llegaba tarde al colegio, no almorzó porque me acompaño a comprar ropa y por ultimo, no ceno por ir a tu fiesta.- dijo la joven.
- Y el hecho que haya caido a la piscina lo empeoro.-
-Tranquilo, no te preocupes, no fue tu culpa, Adam.-
-¿Como sabes nombre? ¿Te conozco?-pregunto sorprendido. ¿Será que Mady le hablo de mi? NO, lo dudo.
-Soy Paulette. ¿Ya te olvidaste de mi?-
-¿Paulette? ¿Tu eres la pequeña Paulette? Te ves diferente, has cambiado mucho. No te reconocí.-
-Lo se, lo se. Vamos salgamos un rato a conversar.-
-Pero ¿Y Mady?-
-No te preocupes, mi tía la cuidará.- dicho esto la sgi fuera de la habitación, caminamos hasta la sala de espera y ahí nos sentamos a conversar.
-Dime ¿Como la encontraste?-
- No se si yo la encontré o ella me encontró-
-¿A que te refieres?-
- Por años la busque, por mar, tierra y cielo, pero no podía encontrarla. Un día mi secretario vino a decirme que la había encontrado y apenas lo supe, salí corriendo a verla. Cuando ya estaba ahí, frente a su casa, no pude acercarme. No tenia la valentía de acercarme, así que no lo hice. Desde ese día, todos los viernes caminaba al rededor de su casa. Pensé que algún día tendría el valor de tocar esa puerta, pero no fue así. Un viernes me la encontré a la Sra. Blair, bueno ahora Sra. Wilson regando las flores de su jardín. Ella me reconoció apenas me vio, no sé como pero lo hizo. Me ofreció entrar pero me negué. Le conté que no podía hacerlo, no sabía que pasaría si la veía. Así pasaron los años y nunca me digne en entrar, no la podía ver, hasta hoy. Hoy antes de visitar a mis padres fui a la casa de Mady. La Sra. Wilson se encontraba regando el jardín, estaba hablando con ella como siempre y de repente escuche su voz y ella apareció. Ahí me di cuenta que estaba mas cerca de mi de lo que creí. lo único que pude hacer fue darme la vuelta e irme como lo cobarde que soy.-
-Así que recién te distes cuenta hoy. Dime ¿tú eres el que la molesta?-
-Si- digo avergonzado.-Y no sabes cuanto lo lamento.-
-Tranquilo, no lo sabias. Al final tenía razón-
-¿Razón en qué?-
-No es nada-
-Chicos, Mady ya se levantó- nos interrumpe la Sra. Wilson
-Entonces, yo me voy- informo.
-¿No quieres verla?- pregunta Paulette.
-Estoy mas que seguro que Mady no querrá verme.-
-Sera para la próxima- dice la Sra.Wilson.
-Nos vemos.- me despido y me pongo en marcha hacia mi casa.
POV Mady
Me despierto y lo primero que veo es una luz blanca que va directo a mis ojos. ¿Dónde estoy?.
-Hija- escucho la voz de mi madre.
-Hola Mami-vocalizo con una voz bien baja tanto que casi ni se escucha.
-¿Como te sientes?-
-Cansada-
-Descansa un poco mas, iré a buscar a tu prima.-
Nunca pensé regresar al hospital, ha pasado un largo tiempo. ¡Y todo por culpa de Brooks!
-¿Ya despertaste?- escucho la voz de un hombre.
-Si- afirmo. A juzgar por su bata, es un Doctor y alado de él está una enfermera.
-¿Como te sientes? ¿Algún dolor?-
-Ningún dolor-
-Primita ¿Te encuentras bien?- veo como Paulette entra a la habitación y corre a abrazarme.
-Doctor,cambio de opinión. Me duele todo el cuerpo- digo mientras poco cara de dolor.
-¡Que mala prima!- dice con un pucherito y al mismo instante me suelta de su agarre.
-Tienes mucha suerte, tienes un gran novio- dice la enfermera.
-¿¡Novio!?- pregunto sorprendida.-¿Cual novio?- vuelvo a preguntar mientras veo que mi mamá y mi prima se miran con cara de complicidad.
-El chico que te trajo.- dice la enfermera.- Llegó tan desesperado al hospital mientras te tenía cargada en su espalda, hizo un gran alboroto para que te atendieran rápido.-
-¿Un chico?¿Quién era mamá?-
-No seee...- me contesta.
-¿No me estás mintiendo?-
-Bueno, si lo vi. Él se quedó hasta que te despertarse, pero no se quién es.-
-¡Mentirosa!-
-Eso es todo lo que sé-
- ¿Te acuerdas de su apariencia?-
- No me acuerdo-
-¡Mamá!-
-¿Qué? No es culpa mía que me ataque el alzheimer- dice cruzándose de brazo y desviando la mirada.
-Hoy te salvas por tu edad, mamá.-
-Disculpen por interrumpir su discusión- dice el doctor sonriendo.- Al parecer te encuentras mejor. Por ahora te quedarás esta noche y mañana por la mañana te daremos el alta.-
-Claro y yo que amo estar en el hospital-digo sarcástica.
-Tranquila, la noche se pasa volando.- dice el doctor.-Bueno, me retiro. Que pasen una linda noche.- espero a que el doctor y la enfermera se vayan para poder hablar con mi mamá.
-Mamá, siento haberte hecho preocupar, no fue mi intención-
-No te preocupes hija, no siempre vas a estar saludable. Pero eso si, a partir de ahora no te vas a saltar ninguna comida y te voy a dar mucho jugo de naranja para que estés saludable.-
-Per..-
-Sin peros-
-Este será un fin de semana muy largo- suelto un suspiro.