Dos años después:
Caminé resonando mis tacones y moviendo mis caderas de un lado a otro. Estos dos años han sido, hasta ahora, lo mejor que me ha pasado.
–¡Hola, Emma!–Saludo Rubi.
–Hola, lindo vestido–Dije y seguí caminando.
Las miradas estaban en mi. Ahora, señores, soy la popular de este colegio.
Miré la hora en mi teléfono, era algo tarde, pero creo que no habrá problemas.
–Hola linda–Dijo Johan.
–Hola–Tomó mi cintura y besó mi mejilla.
–Tengo que ir a clase–Asintió besó mis labios cortamente y se fue. Johan, es él chico popular, capitán del equipo de fútbol americano. Mi novio. Se preguntarán ¿Que pasó con Alexis? La verdad, no lo se. Quedamos en que iría en vacaciones de verano a visitarlos a todos pero papá no quería. Eso pasó en vacaciones de verano y navidad, Alexis se enojó mucho conmigo sabiendo que no era mi culpa. Poco tiempo después dejó de llamarme yo no deje de llamarlo, pero cada vez me contestaba más cortante, ponía excusas como "Tengo una cena familiar hoy" o "Tengo tarea".
No se que es lo que pasó. Con él único que tengo contacto es con los gemelos. Ellos siguen siendo mis mejores amigos aparte de Liam claro. Liam es él chico de la patineta. Me dijo que tenía un secreto, jamás se lo contó a nadie y ese secreto es que es gay.
El fue quien hizo este cambio en mi, dijo que yo era bonita pero no sabia como demostrarlo, así que él me ayudo.
En fin, se supone que mañana regresaríamos a México.
Papá sale con una chica llama Emma, si igual que yo. Es muy agradable, creo que por fin mi padre se enamoro y es correspondido. Están a punto de casarse y quieren hacerlo en México. Todavía no termino la preparatoria solo falta medio año. Liam, quiso venir conmigo a México, sus padres viven haya así que irá con nosotros.
Creo que mi vida ahora ya es perfecta, y con Johan, no es nada en serio, ni siquiera lo amo, solo unos besos, sexo y ya. Nada de sentimientos.
(...)
Llegamos a México, fue demasiado agradable estar en un avión con tu mejor amigo a tu lado.
Bajamos las maletas, estaba demasiado cansada.
–¡Hey, Liam! ¿Me cargas?–Hice un puchero, él rió y puso su espalda, me subí y comencé a andar más bien, comenzó a andar, mi nuevo caballo. Recuerdo él día en que Ian y yo íbamos por los pasillos, gritando y riendo mientras él era mi caballo, reí.
–¿De que te ríes? –Cuestiono Liam.
Enterré mi cara en su cuello haciendo que una risa gruesa saliera de sus labios.
–De nada–Entramos al aeropuerto. Tomamos nuestras maletas, más bien papá envió a alguien a que las cargara, Liam seguía cargándome.
Caminaron afuera, levanté la mirada y encontré a los gemelos y a su lado estaba Mateo y Alexis. Al verme, dejaron de sonreír. ¿Que les pasa? Creí que se alegrarían de verme.
Bajé y me acerqué a ellos.
–¿Que mierda te pasó? –Cuestionó Sebastián.
–¿Les gusta?–Cuestioné sonriendo y dando una vuelta haciendo que mi falda se levantara un poco.
–No–Dijeron todos.
–Te vez horrible–Dijo Alexis. Fruncí él ceño, bajé la cabeza.
–Emmh–Murmuré–El es Liam, es...–Me interrumpieron.
–¿Tu novio? –Cuestionó Alexis de nuevo.
–No, es mi amigo–Dije.
–Ah, claro. Tu amigo–Asintió cruzando sus brazos.
–¿No se alegran de verme?–Cuestioné mirándolos tristemente.
–Emma...–Dijo Ian seriamente.
No dijo nada y se abalanzó contra mí, abrazandome fuerte.–Te extrañé–Enterró su cara en mi cuello, lo abracé fuerte, extrañaba estos abrazos.
