A veces que esperamos que suceda algo mágico en nuestra vida, pero cuando pensamos en magia se nos viene a la mente una magnífica y bonita fuerza paranormal que resuelve nuestros problemas. Lo que la gente no piensa es que puede haber distintos fipo...
Estaba en un hospital de incógnito, disfrazada de enfermera. Buscando a mi cliente, sí, mi cliente. Hace unas horas me enteré que le dispararon en la cabeza. El muy idiota decidió hacerse el valiente con la mafia y ahora puede que lo este pagando con su vida. No le permitiré que se muera sin pagarme. Ya van dos veces en este mes que un cliente se las arregla para morirse sin pagarme antes.
Camino por la zona de urgencias hasta que lo encuentro tendido en una camilla inmóvil y un señor lo vigilaba
-¿Que vas a hacer con ese paciente ...Bernard?- leí el nombre de su vata
-Vamos a trasplantar los órganos del paciente, ¿quien eres?
Me toqué la sien para entrar en su mente fácilmente, mi cliente aun seguía con vida, pero al estar en un estado critico moriría en poco tiempo, habían decidido quitarle los órganos para usarlos para el beneficio de otros clientes.
-una enfermera como otra cualquiera- dije aun con mis dedos puestos en la sien para obligarle a que se olvidara de mi
-Pero el paciente sigue vivo- dije ya sin usar el control mental- Hay que quitarle la bala de la cabeza
-Es complicado y casi imposible- dijo el tal Bernard
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-Tu lo has dicho, casi, pero no imposible- dijo alguien detrás de mi, era un chico unos 10cm más alto que yo con algunas canas a sus lados de la cabeza y unos ojos verdes o azules bonitos ojos
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-doctor Strange- dijo Bernard
-Tenemos que sacarle la bala de la cabeza o morirá de verdad.
Trasladamos a mi cliente a una sala de operaciones, íbamos a quitarle la dichosa bala, lo que es un problemilla, Yo no soy ENFERMERA. Intente marcharme disimuladamente pero alguien me interrumpió
-Enfermera no se vaya la voy a necesitar- noté como los pelos de la nuca se me ponían de punta.
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