Volviendo a sentir [Style]

9. Olvidando [2/2]

— Ow, eso fue muy romántico— Stan dirigió su mirada hacia la voz que acababa de escuchar y se sorprendió de encontrarse con Damien— ¡Fue tan lindo que casi me hace vomitar! — El sarcasmo en la voz del anticristo provocó una leve molestia en el contrario.

— ¿Y tu que mierda quieres? Pensé que deberías estar difundiendo el caos en la tierra o algo así—  Stan se cruzó de brazos y Damien chasqueó la lengua.

— De eso me encargaré luego, ahora debo encargarme de otra cosa—  Y antes de que Stan preguntara, Damien lo señaló con su dedo índice.

— ¿Yo? ¿Y ahora que hice? — Stan se señaló a si mismo y miró a Damien con una ceja alzada, el anticristo rodó los ojos y miró a Stan con cierta molestia. Las personas que tenía que soportar.

— No sé si te habrás dado cuenta, pero hoy el pobretón de McCormick se a olvidado de ti, o mejor dicho, se a olvidado de tu nueva situación.

— Eso explicaría el porqué no me habló.— Stan apoyó una mano sobre su mentón, pensativo. — Espera un segundo, ¿eso significa que los demás también dejaron de verme?

— Con el paso del tiempo perderán sus recuerdos sobre ti en tu estado actual y sólo recordarán al chico que conocieron en vida— Damien se encogió de hombros— Pero si te sirve de consuelo, esos dos de allá todavía te pueden ver— Damien señaló con la cabeza hacia una de las mesas del patio y Stan dirigió su mirada a dicho lugar, viendo como dos cabelleras rubias le miraban preocupados.

[***]

El viento soplaba de manera fuerte esa mañana, los rayos del sol estaban ocultos tras unas gruesas y oscuras nubes y el día parecía estar al borde de la lluvia.

Pero aún así, y por petición de su amigo amante de los tacos, los chicos decidieron comer afuera, el viento soplaba fuertemente y Tweek se mantenía en su lugar completamente apegado a Craig, quien no dejaba de abrazarlo.

— Deberíamos ir adentro— dijo el azabache, como por tercera vez en el día.

— ¡Pero Craig! Sabes que no me gusta comer adentro — Clyde hizo un puchero y se acomodó en el hombro de Bebe, quien le estaba dando pequeños cucharones a probar de su comida.

— Pero hace mucho frío, idiota— Craig le levantó el dedo medio a Clyde y este evitó que se le escapara un grito de indignación.

— Pero, Pero... ¿Por favor?— el castaño le sonrió con inocencia a Craig y antes de que este respondiera Token intervino en la situación.

— ¿Que les parece si cuando Clyde termine su comida nosotros vamos adentro? Aún falta mucho para que el timbre toque y a Clyde casi ni le queda comida.

— Token tiene razón— apoyó Nicole a su pareja, aprovechando de ver la hora en su celular— Aún falta mucho para que el timbre toque, y un par de minutos afuera no le va a hacer daño a nadie ¿Está bien?— Nicole miró a Clyde y Craig y ambos chicos simplemente asintieron.

A lo lejos, se pudo escuchar un grito y los presentes giraron su cabeza hacia donde se escuchaba. A cierta distancia de ellos pudieron ver a Kyle gritando con histeria hacia el cielo, dejando confundido a más de uno en la mesa.

— Pobrecito, ya perdió la cabeza — Clyde negó con la cabeza lamentándose y Nicole le reprochó por su actitud.

Tweek miró de reojo a Bebe y esta le devolvió la mirada. Gracias a una visita a la enfermería el chico pudo descubrir que la rubia igual podía ver cosas del más allá. Y en este momento, ambos se dieron cuenta que Kyle no le estaba gritando precisamente a la nada.

En menos de un segundo, el pelirrojo se lanzó al suelo y los presentes en la mesa desviaron la mirada.

Nadie comentó nada, después de todo, todos sabían que Kyle no estaba en su mejor momento, pero la mayoría tenía esperanza de que pudiera superarlo.

Cuando Kyle se fue, el joven rubio volvió su vista de manera discreta hacia Stan, quien se había quedado quieto en su lugar mirando como Kyle se iba del lugar.

Cuando vio a Damien llegar dio un pequeño grito de terror que preocupó a su pareja, pero rápidamente se excusó diciendo que parecía haber visto un gnomo a lo lejos.

— No te preocupes, si yo estoy aquí no dejaré que te hagan nada— Craig besó la frente de Tweek y Nicole y Clyde miraron a sus respectivas parejas algo indignados ¿porque no le decían ese tipo de cosas también?

Bebe ignoró los posibles lloriqueos de Clyde y dirigió su mirada hacia los azabaches, quienes estaban mirando justo hacia donde estaban ellos, Bebe pateó suavemente la pierna de Tweek y antes de que este gritara le indicó con un sutil movimiento de cabeza a los dos jóvenes. Tweek entendió enseguida y tembló en su lugar antes de levantarse.

— V-Voy a buscar más café— avisó Tweek y antes de que Craig se ofreciera para acompañarle Tweek le detuvo— Voy y vuelvo, n-no es necesario que me acompañes. — Craig le miró confundido, pero igualmente asintió.

El joven rubio se fue y un par de segundos después Bebe se levantó diciendo que iba al baño y que no tardaba en volver.

Era su oportunidad para ir a ver que le ocurría a Stan.

[***]

— Esos chicos son inteligentes, al parecer se retiraron para poder hablarte — dijo Damien, viendo como Bebe se levantaba de la mesa y se iba caminando en dirección del gran edificio.

— ¿Lo dedujiste por ti mismo?— preguntó Stan, asombrado.

— No, sólo leí sus pensamientos — Damien se encogió de hombros, restándole importancia— Ahora puedes ir a hablar con ellos si quieres, yo  tengo otros asuntos que atender.

— Está bien — Stan miró por última vez a Damien y le sonrió— Gracias— Damien hizo un gesto con su mano restándole importancia  y Stan se fue corriendo hacia la dirección en donde ahora debían estar los dos rubios.

Mientras, el anticristo comenzó a caminar en dirección de la cafetería, en donde le estaba esperando un joven rubio, acompañado de dos chicos más.

— Oh, Damien, me estaba preocupando de que no llegaras —Habló Pip, moviéndose a un lado para que el azabache se sentara a su lado.

— Si, bueno, tenía un par de asuntos que atender— dijo sin darle mucha importancia.