Las caras empiezan a nublarse a mi alrededor. Se me hace difícil avanzar por la multitud. Pero es la única forma que tengo de que no me vea. Sus gritos están muy cerca.
Entonces, un brazo me coge y tira de mí hacia un lado. Intento soltarme efusivamente, no puede ser, no puede estar tan cerca.
-Para- escucho una voz en mi oído. Me suena esa voz. Y no es para nada la de uno de los encargados. Tengo el brazo aprisionado detrás de la espalda y no me puedo mover.
Lo intento, pero no sirve de nada así que paro.
-Me va a coger...-murmuro preocupada.
- ¿No te das cuenta de que corriendo es como más llamas la atención? Voy a soltarte el brazo, pero tienes que caminar disimulando. -asiento con la cabeza, me suelta el brazo y me coloca las manos por encima de la cintura. Rodeándome. Su pecho choca con mi espalda y noto su respiración tranquila e intento acompasar la mía. De repente el hombre pasa por nuestro lado. Casi corriendo, mirando hacia delante. Aguanto la respiración, pero ni siquiera se inmuta de mi presencia. Sigue avanzando, pero no me muevo hasta que lo pierdo de vista.
Me giro lentamente para averiguar si mis sospechas sobre esa voz eran reales. Y lo son.
-Supongo que ya estamos en paz -me dice sonriendo con esos dientes alineados-. Tú me diste el libro, a cambio yo te doy lo que sea que hayas cogido.
-Esto... No es lo que parece...
-No tienes que darme explicaciones- me dice e involuntariamente levanto las comisuras de la boca. Me quito la chaqueta y me la ato a la cintura. Con la tensión del momento y el ir corriendo me ha entrado calor.
-Gracias, Will- digo realmente agradecida.
-Vaya, te acuerdas de mi nombre.
-No es difícil. -es un nombre bastante típico y estoy segura de que Anna tenía más de un amigo llamado así, aunque no quiero recordarlos.
Me he colocado a su lado y ahora caminamos juntos. Y aunque estamos entre miles de personas, lo noto a él mucho más presente. Además, a veces, siento el roce de su mano. Pero ya no es nada comparado con sentir su respiración en mi espalda.
-Beth, -me llama de pronto sacándome de mis pensamientos- mira hacia la carretera y no te separes de mí. Vuelve a venir. -Abro los ojos preocupada, antes no me veía porque estaba de espaldas a él, pero ahora iré de frente y me verá... Will se muerde el labio y me mira- Espera -dice acercándose un poco a mí y me quita la goma del cabello dejando que este caiga -así mejor.
Mi corazón, que ya había vuelto a batir normal, vuelve a acelerarse y no sé si se debe a lo que acaba de suceder o al hecho de que vayan a pillarme. Respiro entrecortadamente, aunque intento camuflarlo.
Me coge la mano y aprieta una vez para que me calme. Y lo hace, es agradable sentir que no estoy sola en esto, que él me está apoyando, aunque no entienda muy bien por qué, Es decir, ni siquiera me conoce, y supongo que por esto podría meterse en un gran lío. Miro hacia la carretera como él me ha dicho y con el pelo me tapo un poco la cara.
El hombre pasa por nuestro lado, lo entreveo por el rabillo del ojo, y estoy a punto de soltar el aire contenido cuando, de repente, veo que se para dónde estamos nosotros.
Trato de no mirarlo e intento parecer tranquila. Cualquier movimiento en falso y me daré por muerta. Vale, tal vez no es para tanto, pero la vergüenza que sentiría sería inmensa.
- ¿Ocurre algo, señor? -pregunta Will a mi lado. Su voz grave está tranquila y es gracias a eso que no me he puesto histérica. Me giro un poco, pero no como para que me vea completamente la cara, sino para parecer una chica normal.
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Empty box.
RandomTras la muerte de sus padres Anna desaparece y en su lugar nace Beth, una chica sin ganas de vivir incapaz de expresar todo el dolor que siente, una absoluta "caja vacía", casi sin sentimientos. Diversas personas se adentrarán en su vida y la mejora...