Capitulo 6

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Las clases dieron por finalizado por lo que ya me puedo ir de la escuela al trabajo, puede que logre salir más temprano hoy, después de la pequeña conversación con Pedro, el en momento de receso me espero en el salón y me invito a conocerlo mejor al igual que el a mí.

Descubrí que es un gran patinador y que está encantado con la fotografía, además de que prefiere no llamar la atención en la escuela y así solamente graduarse y no ser recordado por ningún estudiante de este lugar, de algún modo me dio un poco de pena que el pensara de ese modo... Digo, todo el mundo quiere ser recordado.

-Bueno, ahora a donde?-El paso el brazo por mis hombros pero de inmediato lo retiro por la gran diferencia de altura.

Normalmente siempre es así, apenas mido 1.68, la verdad no es una estatura tan baja, pero a diferencia de las personas que viven aquí en Londres, si lo es, normalmente aquí la mayoría de la población mide de 70 para arriba, mas yo soy de altura pequeña para esas personas.

-No entiendo cómo puedes ser tan enana, a la par mía pareces un enano- desordeno mi cabello pasándolo por mi cabeza y haciendo un desastre con él.

-Pues yo no entiendo cómo puedes ser un gigante- Pedro abrió la boca y se coloco la mano en el pecho, como si lo hubiera ofendido de algún modo, claro no fue así cuando el se comenzó a reír.

-Ya, en este momento tengo que ir a mi departamento, tengo que trabajar luego- El me miro algo extrañado y de inmediato me di cuenta que hable de mas.

No me molesta que las personas se enteren que trabajo, pero si me molesta los rumores que hacer sobre eso, ya sea diciendo que necesito trabajo para pagar una deuda de muerte o simplemente diciendo que trabajo de prostituta.

No me gusta hablar de mi vida.

Inmediatamente negué con la cabeza y comencé a avanzar tratando de alejarme de él y evitar que me haga alguna pregunta de la cual no quiero responder. Como si de una película se tratara, el me siguió y me sujeto de la mano para darme vuelta y verme al rostro.

Quise evitar su mirada.

-Ahora que te pasa?- El me sostuvo el mentón y me obligo a verlo a los ojos, y ahora que lo veo directamente, me puedo dar cuenta que tiene unas facciones muy hermosas.

-No me gusta dar explicaciones- El asintió levemente y me soltó latamente, como si no lo quisiera hacer, como si quisiera que me quedara así junto a él.

El me acomodo el cabello posándolo suavemente detrás de mi oreja y sonriendo de una manera muy tierna, yo lo imite.

-Te acompañare a casa, a partir de ahora yo te cuidare- Me pareció algo infantil lo que dijo, ya que estoy muy segura que el solamente quiso imitar a los típicos chicos atractivos de los libros o novelas.

Al darme cuenta que la situación en la que me encuentro si se asemeja a una novela, decidí dar por finalizado eso, todos sabemos cómo terminan.

-De acuerdo, solo, déjame ir al baño... este, espérame aquí mismo. –Me sonroje al extremo al poner esa excusa tan patética solamente para alejarme de el unos minutos y que quede en el olvido esa pequeña escena.

El asintió y de inmediato comencé a corres al baño femenino, tratando de evitar algunos alumnos que todavía se encuentran en ese lugar.

Finalmente llegue al baño y me asuste un poco al encontrarme con Andrea viéndose en el espejo con una sonrisa.

Obviamente me noto.

-Noah, que sorpresa verte... Normalmente me evitas en la escuela- Dejo de verse en el espejo y se concentro en mí, coloco una mano en la cadera y me miro con una sonrisa.

-Bueno, no somos amigas así que no tengo razón por la cual hablarte en este lugar- Trate de ser discreta y dar a entender que no estoy escapando de alguien, así que me acerque al espejo y fingí acomodarme un poco mi cabello detrás de mi oreja y revisar el maquillaje.

-La verdad es que, tu a mi me importas... No entiendo la razón por la que me evitas- Se recostó con en la pared con los brazos cruzados esperando mi respuesta, en la cual no estoy segura si dársela.

En estos momentos me gustaría solamente ignorar sus palabras y su existencia e ir junto a Pedro pero lamentablemente recordé que, ella a mi no me ha hecho nada, por lo que no tengo razón por la cual ofenderla o ignorarla.

-Solamente no me gusta estar donde esta Barbará- Ella me miro por unos segundos y luego se acerco a mí con una sonrisa y así ponerse a la par mía y recostarse en el lavabo.

-Ya veo... Ella te da miedo, quien lo diría, no te preocupes... Solamente te quiere asustar- Me sorprendió un poco que ella me dijera todo eso, pero también sospeche, bien puede ser una trampa para que confié en ellos y después dejarme con una gran marca humillante en la escuela.

Levante mis hombros y observe bien mi reflejo, mi maquillaje está un poco corrido, tome la decisión de desmaquillarme y así no estar con la preocupación si se corre mi resaltador de ojos.

Sentía la mirada de Andrea en mí, no me agrada para nada quitarme el maquillaje en frente de ella, pero en este momento me tiene que dar igual, al fin y acabo solamente es mi tutora, nada más.

-Sabes, te miras mejor con maquillaje- La voltee a ver por unos segundos, solamente con un ojo maquillado y el otro al natural. No me importa su opinión, pero si me molesta que me diga si le gusta o no como me veo.

Negué con la cabeza y seguí desmaquillándome, su mirada me penetraba o simplemente me ponía nerviosa, por lo que decidí dejar de lado mi ignorancia y clavar una conversación con ella, puede que saque algo bueno de eso.

-Tú te verías mejor sin maquillaje- Dije tirando los paños manchados al contenedor de basura y analizando su rostro, una pequeña sonrisa se asomo en ella y no pude evitar sentirme bien.

-Crees que es correcto que una chica popular, porrista, inteligente y linda... Camine por los pasillos con el rostro descubierto, claro que no, tengo que tener una imagen perfecta- Fruncí mi entrecejo al escuchar aquellas palabras.

Sin duda ella no sabe valerse por sí misma, es triste saber que una de las chicas más atractivas que conozco, necesitas productos solamente para sentir que vale algo.

De un momento a otro ella saco su celular y lo puso en modo cámara, me miro y me pidió con la mano que me acerque a ella y así lo hice.

-Espera, antes... Dame un paño y te mostrare algo- Saque de mi mochila otro paño y se lo entregue, con una sonrisa lo acepto y mirándose en el espejo se retiro todo el maquillaje de su rostro.

Me sorprendí un poco al notar la diferencia, sin duda, sin maquillaje cambia mucho, pero sigue igual de hermosa... Lamentablemente ella no ve eso.

-Ahora si- sin más se acerco a mí y con una sonrisa levanto el celular frente a nosotras capturando una fotografía muy linda.

Me mostro la fotografía y sin duda se nota mucha diferencia, ella sin maquillaje se ve más triste y apagada.

Eso duele.

-Ves, tú eres hermosa y es porque tú si te aprecias a ti misma, no importa que vengas a la escuela en traje dormir, tú seguirás sintiéndote especial... Y lo eres. – Sin dejarme decir algo, se coloco un par de lentes de sol y salió del baño, dejándome ahí parada y con la palabra en la boca.

en multimedia Andrea.  

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⏰ Última actualización: Nov 29, 2016 ⏰

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El diario de una adolescente realDonde viven las historias. Descúbrelo ahora