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Me quedé callada, no sabía como reaccionar, así que abracé mis piernas fuertemente.

-Repetiré la pregunta.. ¿Eres dueña de las cámaras?

Tragué saliva y asenti tan lentamente que incluso yo me sorprendía.
Pude ver que el de cinta azul fruncio los labios y tiró al suelo mi cámara rota.

-Yo...- Murmure, ganandome la mirada del que tenia cinta roja. -No era.. Mi intención..

El mas bajo tomó una especie de tenedores gigantes, avanzó un solo paso pero el otro le frenó. -Basta..- Me mira. -¿Tu nombre?

Trago saliva. -__..- Murmuré.

-De acuerdo, __, borra la memoria de tus cámaras, frente a nosotros. ¿De acuerdo?- Asiento lentamente.

-So.. Solo hay.. Un problema.. No se como borrarlas.

-¡¡Agh!! ¡Llama a Donatello! ¡Que él se encargue!- Exclama el de los tenedores.

-De acuerdo Rafael, sólo calmate..- Toma un celular con forma de tortuga y comienza a llamar.

-Niña..- Me llama "Rafael". Yo lo miro. -¿Quien más sabe de los videos?

-Nadie mas que yo.- Le digo mientras niego con la cabeza aún sentada.

-¡Mas te vale..!

Justo habia sacado denuevo los tenedores cuando una vez mas el mayor lo detuvo.

-Detente..- Me mira. -__, ¿quien más está en la casa?

-Nadie mas.. Leila, mi hermana, está en una pijamada. Estoy yo sola..

Pude ver entre la tenue luz que el de ojos verdes miro mi computadora y toco el hombro del mayor quien miro el aparato.

-¿No puedes borrar los vídeos allí?- Negué con la cabeza. El de ojos azules mira su celular. -Don está subiendo...

Justo cuando dijo eso, otros 2 entraron. Uno era mas alto, le podía notar sus ojos carmesí y una cinta morada. Además de que tenía un palo en la espalda, el otro era el mas bajo, con ojos celestes y cinta naranja.

-¿De que debo encargarme..?- Preguntó el de morado, el tal "Rafael" señaló la computadora.

-Encuentra y borra los vídeos.- Dijo serio el de cinta azul.

-De acuerdo, Leo, me tomará un rato, no te preocupes.

Así estuvimos, a obscuras, yo con mis brazos, piernas y glúteos adormecidos, el mas bajo sentado en mi cama mirando a "Donatello" al igual que el de cinta azul, en cambio el otro no dejaba de mirarme.

-No hay nada.. Está vacío chicos, no encuentro ningún video para borrar.- Tragué saliva, eso significaba que habian estado viendo todas mis fotos vergonzosas con mis pijamas, mis bikinis, videos en la costa y mas cosas.

El de cinta azul se me acercó y se colocó de cuclillas para estar frente mío. Me miró con sus ojos azules tan profundos como el mismísimo océano.

-¿Que has hecho con los vídeos? ¿Donde están?- Murmuró..

De la nada, la luz se encendió, dejándome ver que eran las tortugas de las que se quejó el tigre la vez pasada. Abrí ampliamente mis ojos, no podía ni gritar, por lo que le di una patada en medio de su cara para salir corriendo hasta el baño de mi habitación, encerrandome allí.

-Imposible.. Como.. ¿Como puede ser esto verdadero..?

Escuché que intentaron abrir la puerta.

-¡Abre la puerta!

-Calmate Rafael..! __, por favor abre para que podamos hablar tranquilamente.- Tragué saliva y me acerque a la puerta mientras inhalaba hondo.

Continuará...

Desde La Ventana [Tmnt×Lectora] [EN EDICION]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora