Solo, soledad absoluta en penumbra finita, infinito sentir en palabras solitarias, palabras que surgen en el interior, pero no son de escucharse ahí afuera. ¿De qué vale? ¿De qué sirve? Actos benévolos en horas y horas transcurridas para obtener agua salada corriendo cual gotas de cristal líquido por mi sangre y cráneo, por una dermis que no se deja mojar, y dos glándulas en sequía permanente, aunque llueva cuando la sequía esté apunto de destruirlo todo.
Agradecer, ser inculcado sobre el buen agradecimiento, pero que el mismo no sea retornado cuando la importante impulsividad externa que te cambia como se le venga en gana, esa que hace praxis los engranajes de tu risa articulada, necesite hacerlo.
Se siente como un puñal, un puñal entre tus costillas, aumentando el dolor con cada diente del mismo que entra y sale de entre ellas. Duele, realmente duele, se vuelve un dolor mas y mas inmenso dentro de ti. ¿Alguna vez te has preguntado que tanto dolor tiene un guerrero dentro de sí? ¿Te has preguntado, o incluso, sabes, que se siente ser un guerrero amoldado con las manos del mismo destino que tanto te hizo perecer ante tu orgullo y tu lealtad? ¿Qué se siente ser un monstruo que ama? Tener unas garras filosas adheridas a tus manos y morir por acariciar su dulce rostro. ¿Tan poco vale? Cada detalle, cada cosa mínima, cada pequeño gesto que es como lastimarme para verte reír. ¿Tan poco vale? ¿Tan poco es todo lo que a diario sacrifico por ver brillar algo entre tus labios? ¿Tan poco soy? Sé que valgo mas allá de lo inimaginable en tu realidad o en alguno de tus ensimismamientos, pero así se siente, así. Vacío obscuro, asfixia neta, así se siente cuando tu finges que no sientes.
ESTÁS LEYENDO
Escritos de medianoche
PoetryCuando la mente duda, cuando el pensamiento ataca, cuando la timidez enfrenta, cuando la valentía huye, cuando la inexperiencia grita, cuando la experiencia habla, sucede esto...