Fría y temerosa...
En sus hombros carga una bolsa.
Una bolsa con los restos de aquellos cuyo tiempo llegó.
Y ni siquiera tuvieron tiempo de decir adiós.
Valiente y fuerte.
Lista para cualquier adversidad.
La muerte un día, te va a llegar.
Pero mientras no lo haga, ella se sienta y espera,
Cuidadosamente y con paciencia.
Con el reloj de la vida en la mano, mira como transcurren tus días sin ningún apuro.
La muerte es bella sin duda.
Un ser puro.
Sin embargo teme a ella, pequeño mortal.
La muerte será delicada y paciente, pero en un instante te llevará en su bolsa abismal.
La vida es larga y lo mejor que puede haber.
Pero cuidado, la muerte puede llegar sin saber.
Disfruta pues, hombre o mujer. La vida está hecha para crecer.
Y no todo es eterno, y algún día lo vas a ver.
Disfruta con pasión, emoción y con todo tu corazón.
Por que tu tiempo se acaba, simple mortal.
Y la muerte un día, te va a llegar.