Capítulo 5 Maratón 2/3
Jade la miraba desde arriba, con ese aire de superioridad que la caracterizaba. Ella era un año más grande que Kate y le hacía la vida IMPOSIBLE. Desde que había llegado al colegio Jade no la dejaba en paz, todo el tiempo la molestaba, si no era porque no hablaba, era por su ropa, y si no era por su ropa, era por su peinado. Nada satisfacía a esta chica y Kate nunca entendió porque le tenía tanto rencor si nunca habían cruzado palabra, y literalmente porque con la única persona que había podido hablar era con George, exceptuando su círculo íntimo.
Jade: ¿Y si te fijas por donde vas?
Kate tenía ganas de gritarle tantas cosas, pero no podía, nunca pudo y tenía un presentimiento de que nunca iba a poder. Siempre tenía a alguien que la defendiera, en este caso era su hermana, antes había sido Niall. Se levantó rápido del piso y corrió, esta vez fijándose para todos lados, hasta el baño, para buscar a su hermana.
Entró en el baño con la respiración agitada.
Kate: ¿Tefi estas acá?
Se quedó en silencio y solo oía sus jadeos que se producían por la corrida que había hecho por casi todo el colegio. No escuchaba nada, absolutamente nada, su hermana no estaba ahí. Salió del baño otra vez en busca de su hermana y la vio caminando por uno de los pasillos laterales con la cabeza cacha, lo cual no era propio de ella. Tomó su bolso con fuerza y nuevamente se echó a correr, hasta que por fin la pudo alcanzar.
Tefi: ¿Estás bien? – preguntó preocupada
Kate: La que tengo que hacer esa pregunta soy yo, ¿Por qué no me esperaste en el salón como hacemos siempre? Pasa algo, no me lo quieras ocultar, tu mirada no tiene ese brillito que tenes siempre.
Tefi: Harry me dejó – dijo después de unos minutos de silenció y se echó a llorar en brazos de su hermana.
¿Harry la había dejado? Kate no podía creerlo, Harry y ella eran novios desde hacía más de un año y medio ¿la dejó así porque sí? Consoló a su hermana hasta que sonó el timbre, ambas tenían clases, pero Kate no quería dejar a su hermana así.
La acompañó hasta la cafetería y se sentaron en una de las mesas del fondo, Tefi ya no lloraba, pero sus ojos estaban hinchados.
Kate: Tranquila
Tefi: No puedo estar tranquila Kate, me dejó. Y sin razón alguna, le di todo de mí, y ¿así me paga? No puedo creer lo tonta que fui en enamorarme de él, Zayn tenía razón, él era mucho para mí.
Zayn, el mejor amigo de Tefi, siempre le decía que Harry no era el indicado, que Harry iba a lastimarla, y ella, siguiendo su corazón, nunca le hizo caso.
Kate: Eso es una gran mentira, vos eras mucho para él. Tenes que ser fuerte y demostrarle que no puede jugar así con tus sentimientos, vos lo amaste de verdad, fue lindo mientras duró, pero ahora tenes que ser fuerte y seguir adelante. Muchos chicos mueren por una chica como vos, no le des la oportunidad a Harry para decir “yo salí con ella y la deje”, esa no sería mi hermana – le dijo mirándola a los ojos y Tefi sonrió entre lágrimas
Tefi: Tenes razón, no vivo de ningún hombre, y menos de Harry. Al menos te tengo a vos – dijo abrazando con fuerza a su hermana
Kate: Siempre me vas a tener
Se pararon el resto de la hora de clase en la cafetería hablando. Kate le contó lo que había pasado con George y Tefi, al igual que Kate, se sorprendió ante su reacción, pero le dijo que tal vez, ella en el fondo ya estaba cansada de que todo el mundo se burlara de ella y la tratasen como quisieran, ella en algún momento tenía que defenderse, y llegaron a la conclusión de que era el momento.
Kate: Pero… ¿Por qué con George si, y con Jade no? – le preguntó mientras tomaba un sorbo de su jugo de naranja. Tefi se encogió de hombros- me sigue pareciendo muy raro esto.
Tefi la miró unos segundos sin saber que contestar. El timbre sonó y la cafetería se llenó de alumnos, los típicos grupos. Kate vio como Jade entró en la cafetería con sus bobas amigas detrás de ella, le recordaba tanto a Cloe, se levantó rápidamente y se despidió de su hermana.
Tefi: ¿Por qué te vas? – preguntó confundida
Kate: Tengo que cambiar mis libros, y mi clase es del otro lado del patio – rodó los ojos y salió.
Era cierto, tenía que cambiar sus libros, pero no había salido precisamente por eso. Estar en el mismo lugar con Jade la hacía sentir extraña, o más que eso, incómoda, y no entendía bien porque. Fue hasta su casillero y renovó sus libros, lo cerró y cuando camino hasta el patio se chocó con alguien ¡acaso era el día de choquemos a Katherine! Se preguntó furiosa en su interior. Levantó sus cosas, que nuevamente habían quedado por todo el pasillo y cuando se paró el chico con el que había chocado traía algunos de sus libros.
Al verlo a los ojos, pudo notar algo familiar, algo que ya había visto antes y una rara sensación de satisfacción la invadió de los pies a la cabeza. Esto no podía estar pasando, no este momento.
Kate: ¿Niall? -Él la miró de arriba abajo, todavía con una incógnita en sus ojos. Él no se acordaba de ella, perfecto. Ella todo este tiempo pensando en él, en que pasaría si se volvieran a encontrar y él ni siquiera la reconocía.
Ella suspiró frustrada y tomó las cosas de las manos de Niall, pero al rosas su piel con la suya una corriente inexplicable vagó por todo su cuerpo, haciéndola soltar las cosas nuevamente- qué torpe – susurró y se agachó a juntas sus cosas, y él también. Al mismo tiempo, y chocaron sus cabezas.
Ambos empezaron a reír, mientras se tocaban la cabeza donde se habían golpeado.
Niall sabía que la conocía de algún lado, su sonrisa, sus ojos, y la sensación cuando su piel rozó la suya. No podía ser, esto no estaba pasando.
Niall: ¿Kate? – preguntó sonriendo, y con una mueca de dolor, porque el golpe había sido bastante fuerte
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