Delirium: Melancolía de Media Noche

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Me acerco para entregar lo que tengo. Pero huyo antes de recibir porque me asusta lastimar en cuanto reciba.

Amo al amor, pero le temo. Me encanta sentirlo, entregarlo y vivirlo, pero le huyo cuando lo siento cerca.

Me volví un ermitaño, consumido por la soledad, incapaz de compartir con alguien por mucho tiempo.

¿En qué momento me encerré de esta forma en mí?

¿En qué momento me volví incapaz de recibir?

Es como tener todo un mundo qué compartir y mucho qué aprender y no poder hacerlo porque no hay un contacto con la superficie... Al menos no uno correcto.

Hoy más que nunca me arde la llaga. Quiero amar y ahogarme en el regocijo de entregar y de poder recibir, Y que el silencio nos consuma en un éxtasis de inaudible ruido.

Y poder decir que me siento amado, y que eso que me entregan me llega. 

¿Por qué se me puso el corazón como una piedra?

¿Por qué precisamente me torné en un insensible cuando más sensible quiero ser?

¿Por qué no puedo recibir al amor correctamente?

¿Por qué la carnalidad me consume en una espiral interminable de sufrimiento vacío y vicios malsanos?

Amo tambien a la música y me entrego a ella, pero... ¿Por qué no me puede hacer sentir bien de nuevo?

¿Por qué me ahoga?

Bueno, quizás si la siento. Pero me consume como un vicio más; me lleva lejos, y cuando termina... es caos.

Huyo hacia realidades alternas, creando mundos y serpenteando la tan endeble realidad, procurando arrastrar conmigo a quienes deseen volar.

Me regocijo viéndoles volar junto a mí, viéndoles huir libres, extraerse del mundo, abstraerse de la realidad; Aprender, y luego aterrizar sanos y salvos.

A su vez yo también aprendo y acepto; Comprendo y entiendo. Pero por más que entienda, no puedo de alguna forma asimilarlo.

Sencillamente nada rompe la barrera de mi existencialismo. No atraviesa ello que yo si puedo desde adentro.

¿Por qué puede salir y no entrar?

¿Por qué exhalo luz, pero no puedo inhalarla?

Espero en algun momento encontrar aquella persona con una aguja fuerte que pueda atravesar esta burbuja de indiferencia, y me haga sentir.

Sentir de verdad. No cariño, ni afecto; mucho menos el tan incondicional amor que le suelo entregar a la humanidad.

Sentir aquel amor que me hace querer mostrar lo que en realidad puedo hacer. Que me haga volar alto y alcanzar las estrellas que contemplo.

Nota: Escrito en la pared del ya ahogado y deteriorado cuarto lleno de letras.

Abses Tani: Amante EspacialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora