Capitulo 7: Kiss, kiss, kiss

429 30 4
                                    

Los labios del pelirrosa seguían jugando con los del pelinegro sus manos descansaban en el cuello del mayor ambos sumergidos en su mundo no buscaban lógica a sus acciones por que no existía solo disfrutaban del intercambio de caricias, el pelirrosa se separó por la falta de aire así que el mayor comenzó besar su cuello con dulzura dándole pequeños mordiscos pero el sonido de un celular detuvo sus acciones, saco el aparato de su pantalón donde antes lo había guardado.

—Eres la persona más inoportuna que conozco. —Dijo molesto el mayor separándose del joven quien comenzaba a pellizcar sus mejillas. —Espero sea importante.

—Cuñis que genio te cargas, ya consíguete alguien que te haga el favor. —Contestaba una voz alegremente. —Oye Jepp necesito que vengas a Jeju este fin de semana.

YongGuk camino hacia la puerta para hablar por en el pasillo, el joven de piel blanca se quedó solo inflando sus mejillas demostrando su molestia se bajó de la mesa para buscar una bandeja y llevarle la comida a JongUp. YongGuk se recargo en la pared del pasillo imaginando las diferentes maneras que podría matar a su amigo debido a que en verdad disfrutaba estar con su alumno preferido.

—Te has tardado en contactarlos. —Espeto molesto, una risa resonó por la bocina del celular. —Veré quien se hace cargo de Jae este fin, espero no sea una trampa.

—Por favor Jepp, soy tu mano derecha puedes confiar en mí ¿porque no te traes a mi novio? lo extraño—-Contestaba con un puchero el extraño joven. —He intentado marcarle pero no me contesta, pásamelo quiero escuchar su hermosa voz.

El pelinegro estuvo a punto de gritarle pero un ruido de platos lo asusto así que se asomó por la puerta para ver como el pelirrosa se había caído con la bandeja de comida, se tapó la boca para no soltar una carcajada.

—Nos vemos el viernes en la tarde. —Dijo fríamente el mayor. —Deja de acosar a mi hermano, él ni te voltea a ver consíguete una linda chica Zico.

—Nam ya me dio permiso tu eres el único que no quiere. —Contesto riendo el rubio. —Cuídate jefe.

El pelinegro soltó una tonta sonrisa para después terminar la llamada, Zico era uno de sus mejores amigos, habían crecido juntos, se habían metido en problemas juntos, era como otro hermano para él, entro a su departamento para observar como el pelirrosa trataba de limpiar el desorden pero parecía empeorarlo, noto como al final terminaba lastimándose un dedo corrió para sujetarlo y chupar la sangre que comenzaba a brotar, Zelo solo lo observaba sorprendido ante esa muestra de ternura trato de hablar pero sus palabras se quedaron atoradas en su garganta al sentir como era tomado con delicadeza para ser llevado hacia la sala donde se sentó en un sillón para que el mayor fuera por un botiquín sacando una vendita y poniéndola en la herida no sin antes limpiar la zona con algo de agua oxigenada.

—Listo debes tener más cuidado niño de papel. —Hablo con sorna el mayor dándole un beso en la frente al herido. —Deja que yo limpie el desastre.

—No tengo la culpa que tus platos sean de pésima calidad y se rompan al contacto. —Bufó el menor mirando la vendita que tenía unos conejos dibujados. —Deben de ser de alguna barata que te encontraste.

YongGuk volteo los ojos con resignación, esos berrinches por parte del niño mimado le causaban mucha gracia, limpia el desastre para después volver a preparar dos porciones para llevarles a los tortolos que descansaban en su habitación. JongUp abrió lentamente los ojos estaba cansado de fingir que dormía además de que estaba muriendo de hambre, se removió nervioso y trato de levantarse pero un brazo detuvo sus movimientos.

—¿A dónde vas? Aún está débil jovencito. —Hablo el rubio abrazando por la espalda al peliazul obligándolo a acostarse a su lado. —Descansa un momento más.

Never give UpWhere stories live. Discover now