Llego a casa, como es de esperarse mi madre con sus aristócratas amigas discutiendo nimiedades, buscándo qué chico debe casarse conmigo, creo que mis padres aún no entienden qué no sú como ellos, quiero hacer mi vida yo sola y ganar cosas por mí, no por ellos no por mi familia.

La comida está lista, un rico puré de papas que Bertha mi nana y real sostén de mi casa sabe cocinar  tan bien que los difuntos quisieran volver a vivir sólo para probar su comida, un pavo asado y ensalada de lechuga creanme que necesitaba comer

miré la hora en el reloj del cómedor, es de esos de marmol que siempre aparecen en películas de miedo, 5:40 pm. debería irme a tomar una ducha y dormir un poco. esta noche planeaba salir al supermercado en pijama a la 1 am. y sólo ir a comprar aspirinas y un esmalte de uñas rojo casi negro, que de tanto usar se me había agotado.

Busqué mi celular para poner un póco de música mientras me duchaba, no estaba en mi maleta, busqué en mi habitación, no estaba, en mi auto tampoco. 

  -! LA MESA DEL HOSPITAL!- les juro que en ese momento mi rabia era tan grande que cualquiera que me dijera un mísero sonido le hubiera lanzado una bomba atómica verbal

- entonces por eso este paciente loco me estaba buscando, y ahora ¿qué rayos hago? ya sé,mañana buscaré su ficha clínica a ver si es que aún tiene mi teléfono, y si no pues que chévere, alguien mas a quien odiar-


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⏰ Última actualización: Nov 22, 2016 ⏰

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