Candy se ubicó con sus primas y los dos chicos con el pretesto de que ya tenía hambre, su expresión era extraña, pero no podía decirse que fuera de enojo, era de miedo y confusión. Terry por su parte había empezado como un juego, pues pensó que la chica estaba amargada, pero mientras más tiempo había pasado con ella, más le atraía y aún podía sentir sus labios en lo suyos y no le pasó despercivido que en el último beso ella no había puesto la misma resistencia que en los anteriores, se había abandonado por un momento y se dejó llevar. Ella se había convertido en un misterio para él.
-Candy, ¿quieres hamburger o hot dog?
Le preguntó Terry que se había unido al grupo minutos después. A Candy le sorprendió la cortesía porque no había burla ni sarcasmo en él. Todos los demás dieron cuenta también y se miraban con complicidad.
-Hot dog, por favor.
-¿Con todo?
-Sólo con ketchup, mayonesa y un poco de mostaza, por favor.
Terry así lo hizo, lo puso en una servilleta y se lo extendió. Luego le dio un vaso de refresco con hielo. Candy le sonrió fugazmente en gesto de agradecimiento. Stear y Archie les sirvieron a las otras chicas y luego ellos también se sirvieron y se sentaron los seis como si estuvieran acampando. Reían y bromeaban de todo un poco, ya Candy y Terry no estaban tan tensos, aunque Candy estaba bien confundida y su cabeza era un nido, Terry de vez en cuando la miraba disimuladamente y pudo notar que a veces su semblante se tornaba sombrío y que en sus ojos había una profunda tristeza.
-Chicos, ¿no les gustaría ver que hay por este caminito?
Preguntó Annie mostrando un camino claro que se veía en la orilla del agua y que conducía a unas rocas donde podían ver caracoles adheridos a las rocas.
-¡Vámos!
Dijo Stear y Patty y Archie se les unieron. Terry iba a seguirlos, pero al ver que Candy no se levantó se sentó nuevamente a su lado.
-¿No vas a ir, Candy?
-No. Aún estoy muy llena.
Contestó Candy suavemente, pues al menos esta vez la había llamado por su nombre y no le dijo nada sarcástico, además, tuvo el gesto de acompañarla cuando pudo haberse ido con los demás. Su expresión seguía siendo sombría, había removido recuerdos y los fantasmas del pasado se apoderaron de ella.
-¿Quién fue?
-¿Qué?
-El cabrón que te lastimó así.
Candy se quedó perpleja. De dónde había sacado él que su estado de ánimo tenía que ver con un desamor.
-No sé de qué hablas, yo...
-Lo sabes. No quieras engañarme, conosco bien esa expresión y esa actitud tan a la defensiva.
Terry le decía eso en serio, de corazón y ella no salía de su asombro, pero no pensaba soltarle nada.
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Candy Candy: Amor de Verano
Fanfiction*Candice White es una chica hermosa y alegre que no cree en el amor ni en cursilerías, pero al pasar el verano en la villa de su tía conoce a un rebelde que le roba el corazón y la hace cambiar totalmente de opinión poniendo todo su mundo patas arri...