Epílogo

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Seis meses después...

-Jung Soo... ¿crees que estoy haciendo bien?...-

-No, no estás haciendo bien... -

-¿Cómo?...-

-Debiste hacerlo hace seis meses, cuando te trajo por primera vez...-

-Tenía miedo... aún tengo miedo...-

-Es lo correcto, y lo sabes... anda, abre de una vez que solo tienes dos horas antes de que él llegue...-

-Está bien...-

Abrí la puerta de ese departamento... he venido muchas veces con él... me he quedado a dormir, conozco cada rincón de todas las formas posibles, pero hoy estoy muy nervioso... mi corazón late nervioso...

-Ten dejo tus cosas... suerte...-

-Espera!...-

-¿Qué?...-

-¿En verdad crees que estoy listo para esto?...-

-Hee... ya no hagas esperar más a mi hermano...- aprieto los labios y respiro hondo...

-Está bien... Gracias Jung Soo...-

En cuanto cerró la puerta, me quedé parado, petrificado, sin saber que hacer... respiré hondo un par de veces antes de cerrar los ojos y regañarme mentalmente...

-Basta Heen... no, Heenim ya no, recuérdalo... Heechul, Kim Heechul!...-

Me cuesta trabajo aún olvidarme de ese nombre, a veces siento que el verdadero es en realidad el sobrenombre que me fue puesto en ese lugar... volteo a ver a mi alrededor...

-¿Por dónde empiezo?...- murmuro...

Hasta que veo esa maleta en el piso... sonrío...

-Creo que debería empezar por ahí...-

La sujeto y camino hasta la habitación...

Dos horas después...

En cuanto entré sentí que algo era diferente... creo que... si... puedo percibir su aroma... sonrío al descubrirlo, me doy cuenta de que si es así, entonces por fin ha decidido usar él mismo la llave... jamás lo ha hecho, siempre que viene soy yo quien abre la puerta...

No escucho ruido alguno... por lo menos la sala y el comedor están en completa oscuridad... la cocina... dejo escapar una leve risa, no tiene caso revisar la cocina, dudo que esté preparando la cena...

Decido ir al único lugar en el que podría estar...

Abro la puerta poco a poco esperando encontrarlo recostado en la cama... dormido... pero me sorprendo cuando no es así... termino de abrir la puerta un poco confundido... reviso con la mirada toda la habitación... no veo nada diferente...

-¿Dónde estás?...-murmuro...

Continuó revisando desde la puerta la habitación... entonces veo algo diferente... camino hasta esa puerta, la abro de golpe... y no puedo evitar sonreír más ampliamente...

Paso mis manos acariciando todas y cada una de las prendas que están colgadas en ese espacio que estuvo vacío por seis meses... es su ropa... mi corazón se acelera de la felicidad...

Aún estoy disfrutando el momento cuando escucho ruido que viene del cuarto de baño... volteo y camino rápido hasta ahí... de nuevo, abro lentamente la puerta, y por fin lo encuentro... su cabeza hacia atrás con los ojos cerrados, disfrutando de un baño caliente en la tina...

Levanta su cabeza y abre sus ojos.... me ve parado en el marco de la puerta... muerde su labio inferior, y sonríe levemente...

-Siwon... llegaste...- puedo ver que está un poco nervioso...

HeenimDonde viven las historias. Descúbrelo ahora