Jess
Hoy es mi primer día en la nueva escuela. A mi padre lo transfirieron de su trabajo, por lo tanto tuvimos que mudarnos.
No estoy contenta, pero al menos me queda un consuelo. Mi mejor amiga Lucy. Su padre trabaja con el mío y a él también lo transfirieron. Así que ahora somos vecinas.Ella y yo somos "gorditas", o al menos todos nos etiquetan así. Como si tener un cuerpo diferente te redujera sólo a eso. Un cuerpo. Nunca tuvimos novios, o muchos amigos. Mas bien solo nos tenemos la una a la otra. En nuestro colegio anterior siempre se burlaban de nosotras y nos decían un montón de cosas. Eso no es fácil de olvidar, pero aprendes a defenderte con el tiempo.
Lucy y yo decidimos que aquí seria diferente. Esta vez nadie nos humillará. O al menos, les costará vencernos.
Se que no somos como esas chicas bien dotadas pero nosotras también tenemos lo nuestro. Ya no vamos a avergonzarnos por ser gorditas. Porque no es un motivo de vergüenza. Es nuestro cuerpo, y nadie tiene derecho a maltratarnos por el.*Al día siguiente *
—Jess baja, Lucy ya llegó–dijo mamá del otro lado de la puerta.
—Bien, hoy será un buen día–esboce una sonrisa mirándome al espejo.
Tomé la mochila y baje casi corriendo. Me había pasado toda la noche decidiendo que ponerme. Luego de horas y horas de no decidir, elegí ponerme un jean azul, una blusa blanca con volados y unos tenis negros. Como mi cabello es largo lo recogí en una cola.
Al bajar, Lucy estaba esperándome al pie de la escalera. Llevaba puesto un vestido de mangas cortas azul que le llegaba hasta las rodillas. Su cabello rubio lo traía suelto.
—¿Lista?–preguntó sonriéndome.
Asentí. Me despedí de mis padres y después nos fuimos.La nueva escuela era enorme. Pero eso no era lo que me importaba. Desde que llegamos a la entrada todos nos miraban como si fuésemos bichos raros y de nuevo empezaron los comentarios. Es que la gente maleducada está en todos lados. De ellos nunca escaparás.
Los ignoramos e hicimos como que no nos importaba. Pero la realidad, o al menos la mía, es que si me hiere lo que murmuraban. Es duro recibir esos comentarios. Mas cuando sólo eres una adolescente. Pero eso no parece importarle a nadie.
Entramos.
—¡¡Cuidado!!, quítense del camino. No vaya a ser que las elefantas los pisen–gritó una chica. Llevaba un uniforme de porrista y su cabello castaño le llegaba hasta la cintura.
Todos rieron con su comentario. Me sentí tan humillada, era el primer día y ya había ingresado al infierno.
—Cállate escoba, nadie pidió tu opinión–respondió Lucy furiosa.
-Tranquila-la giré hacia mi.—No importa. Mejor vamos a los casilleros—La agarré de la mano y me la llevé.
Dylan
Max y yo caminamos hacia a Marcie. Ella tenía puesto el uniforme de porrista. Me encanta como le queda, acentúa su figura.
Somos novios hace dos meses y en ese tiempo todavía no ha pasado nada de nada. No porque yo no quiera, porque si la deseo. Sino que Marcie esta haciéndome esperar. No niego que si por mi fuera no tardaría ni una hora más en que pasara algo. Pero, ese no es el caso.
—¿Viste a las chicas nuevas?-le pregunté a Max mientras avanzábamos.
—¿Te refieres a las ballenas?–contestó él. Solté una breve risa tras su comentario.
—Exacto.
—No. Prefiero dar mi atención a algo que valga la pena–su mirada estaba puesta en la chica morena junto a Marcie. Skyler. Ambas son porristas. Además Skyler no esta nada mal.
Reí. Somos los mas populares, por lo tanto solo podemos estar con las mejores.
Tomé a Marcie por la cintura.
—¿Me extrañaste?–susurré en su oído.
Ella volteó y me besó de manera apasionada. La acerqué más a mi. Quiero sentirla más cerca.
—Mis padres no estarán en casa esta noche–dijo mordiendo su labio inferior.
—¿Me estas invitando?–respondí con una sonrisa seductora.
—Te estoy avisando–volvió a besarme, esta vez con más intensidad—. Si tu quieres venir, no te detendré.
Con su rostro entre en mis manos la atraje hacia mí. La bese deseoso de ella.
—Siento interrumpir–dijo Max—, pero hay que irnos–ladeó hacia el salón.
Me separe de Marcie. Volteé, pero antes de avanzar gire de nuevo hacia ella.
—Ahí estaré–susurré en su oído. Ella rió.
Nos fuimos.
El salón estaba repleto. Mi mirada se centro principalmente en las dos chicas sentadas al frente. Las nuevas.
—¿Te enamoraste o qué?–dijo Max golpeando mi brazo.
—Claro que no–fruncí el seño—. Ellas no son mi tipo.
—Menos mal–sonrió burlonamente–. Porque eso seria antinatural.
—Cierto–a pesar de haberlo dicho, por dentro me generaban curiosidad. En especial una de ellas. Tal vez me parecía un poco bonito, pero estoy lo suficientemente consciente como para no cometer el error de admitirlo frente a nadie.
Edit: 2021
Chicas antes de que me maten por las cosas que hay escritas en esta novela, quiero que sepan que esta novela la escribí hace años. Cuando mi mente era otra, y por eso quiero disculparme si en algún se sintieron heridas o molestas. La realidad es que cada tipo de cuerpo es hermoso y perfecto a su manera. Sin importar lo que yo, o cualquiera otra persona pueda decir. Lo importante es que se sientan bien consigo mismas. Y aunque esta novela, ya no refleja lo que me representa como persona ahora. Sólo quería que supieran que en ningún momento fue mi intención herirlas ni nada de eso.
*Si te gusto comenten y denle estrellita*
Gracias :-);-)
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¿Enamorados De Las Gordas? (Completa En Dreame)
Teen FictionDos chicos, dos chicas, una apuesta y un amor inesperado. Dylan y Max son los chicos más populares de toda la secundaria, son sexies, inteligentes, deportistas y muy guapos. Ambos disfrutan de su popularidad yendo a fiestas, saliendo con porristas...