James

Punto

He entregado todos los pedidos del día de hoy, he acomodado todos los libros desordenados y he confirmados los pedidos que entran y salen así que señora Delia son las dos de la tarde eso quiere decir que es hora de irme, -en efecto Jan es tu hora de salida haz hecho el trabajó de hoy y yo diría que hasta más eres un buen empleado de esos que ya no hay tengo suerte de haberte encontrado, eres un joven muy trabajador amable con los clientes y sobre todo honesto no se cómo tus padres pudieron haberte hecho eso-, disculpame señora Delia preferiría no hablar de eso son asuntos personales que por terceras personas llegó hasta las puertas de mi empleo y personas ajenas al problema por lo que le pido de favor que no vuelva a mencionar eso, -está bien muchachito, no me gusta meterme en asuntos que no me incumben lamento haberlo hecho no volverá a suceder-. Gracias señora Delia ahora me retiró con su permiso que pase buen dia nos vemos hasta el lunes cuidese, -igualmente Jan nos vemos descansa y despeja tu mente un poco-, si señora Delia nos vemos, agitó mi mano diciendo hasta luego mientras salgo de la tienda pensando de nuevo en eso que quiero olvidar pero sólo al tratar de olvidar recuerdo y recuerdo más, maldita sea maldita sea quiero olvidar eso. Me dirijo caminando hacía un pequeño establecimiento de comida rápida pensando en que mierda haré de esto que me queda de vida, llegó pido lo primero que veo en el menú y sacó mi celular y cómo por milésima vez me quedó viendo esa fotografía pensando en lo que pudo ser, en el pasado y sientiendo un nudo en la garganta y un dolor en mi pecho mientras comienzo a llorar de nuevo hace ya dos días que no lloraba pero caí en el error de mirar detenidamente la fotografía, en verdad esa fotografía es hermosa se nota tanta felicidad tanto amor que al final todo resultó ser falso, pero aún así amo esa fotografía sabiendo que todo fue falso que todo se fue al carajo. Amaba los momentos que pasaba con esa persona mi persona especial, mi pieza del rompecabezas, mis pensamientos mi todo esa persona aún tiene todo de mi incluso con lo que haya pasado, incluso que todo este cubierto de mierda y que sólo haya sido más que un pasatiempo me alegro de haber vivido lo que viví con esa persona. A esa persona le dije una de las palabras más importantes del mundo y sinceramente no me importa haberlo dicho ya que en verdad lo sentía ya que en verdad siento amor hacía esa persona, amo a esa persona.
-Joven aquí está lo que ordenó, ¿está bien?- me pregunta el empleado del lugar, claro estoy bien sólo cosas personales asienta con una sonrisa y se retira de mi, comienzo a comer sin pestañear ya que debo de ir al supermercado y regresar al departamento a dejar las cosas. Voy saliendo del pequeño local y ahora debo de tomar algún bus que me llevé al supermercado, me dirijo a la parada de buses y esperó el indicado para irme, no tarda mucho en llegar saco unas monedas de mi bolsillo subo los escalones le entregó las monedas al conductor mientras el me regala una forzada sonrisa, miró a todos lados para ver si pudiera haber algún asiento disponible y si los hay, me voy hasta la parte trasera del bus y me siento en el asiento del rincón y pierdo mi mirada en la ventanilla viendo pasar al mundo de aquella cuidad en la que crecí, viendo cómo los árboles corren a la velocidad del bus cómo la gente se ve borrosa y mirar adentro del bus y ver alrededor de 12 personas más que me acompañan en mi trayecto, bueno eso quiero creer yo.
Llego a mi destino me bajo del bus y entró al supermercado, suele ser igual que siempre que iba con mamá a hacer las compras con ese mismo guardia en la entrada y ese estante de lentes a la derecha al entrar, tomó el carrito del super y me voy conduciendo, mientra voy recordando las cosas que debo comprar debí haber hecho una lista para no olvidar nada, pero ahora ya es tarde tendré que hacer que mi cerebro trabajé de más y recordar todo lo que debo y necesito comprar, primeramente lo que necesito son toallas de baño, shampoo, jabón y demás cosas de baño ahora que lo voy recordando jamás entré a la cocina, pero por lo que me dijo el casero la estufa y demás cosas funcionaban de maravilla y que aún quedaba algo de gas, ya que si no tendré que llamar al servicio para pedir gas, bueno me distraje con eso que más necesitó, comida, cortinas y una vida desde cero, lo último no lo encontraré aquí.
Al tratar de recordar todo lo que necesitaba y al forzar mi cerebro a pensar y al no hacerlo bien me dirijo a caja a pagar esas cosas que recordé, -buenas tardes encontró todo lo que buscaba-, me dice amablemente la cajera con una sonrisa más que fingida, claro señorita gracias respondo de igual manera. Tomó las bolsas con todo lo que compré y me dirijo a la salida, cuando de repente siento una presencia detrás mía, siento unas manos sobre mis ojos, -¿adivina quién soy?-, me dice una voz de mujer, yo le contestó que no se pero insiste con la misma pregunta una y otra vez hasta que se rinde de mis respuestas y me quita las manos del rostro entonces yo me giró y veo a una chica más o menos de mi edad, cabello largo color rubio unos ojos cafés claros y luce un vestido de flores que le llega hasta las rodillas, unas medias blancas que le llegan un poco arriba de las rodillas y unos zapatos color rojo que brillan tanto cómo sus labios de color del mismo color.
Me le quedó viendo detenidamente sin pestañear pero aún así no puedo descubrir de quién se trata, -¿ya no me recuerdas jan?- me dice mientras me toca su cabello, pues déjame decirte que no, en verdad no me acuerdo de ti por más que te miró no logró saber quién eres, te me haces algo familiar pero no sabría decirte concretamente de dónde.
-Parece que sigues igual de distraído Jan, pero no importa siempre fuiste así desde niño-, así que dices que me conoces desde niño le respondo, -pues si Jan te conozco desde pequeño soy yo Carolina soliamos ir en la misma escuela, solíamos estudiar cómo locos en la biblioteca, solíamos ser la presa perfecta para los brabucones de la escuela,- ¿en serio eres Carolina?, le preguntó demasiado sorprendido, -claro que soy yo, tal vez te estés preguntando miles de cosas y puede que una de las importantes sea, mi cabello-.
Pues la verdad era lo que más me tenía sorprendido, desde que te conozco solias tener el cabello castaño y parece que tu cabello de ahora no es teñido, -pues te revelare el secreto de mi vida en este lugar tan público Jan, resulta ser que esté es mi cabello natural mamá lo teñia de castaño ya que tiene creencias un poco extrañas, ya sabes tú la conociste, la señora era un poco rara, pero ahora que ya no vivo con ella no tengo porque teñirme el cabello ya que mi cabello natural siempre me gustó y ahora puedo lucirlo libremente-, ahora entiendo Carolina así que esta es la verdadera tú me parece excelente. -Si Jan, pero yo a ti te veo igual que hace años no haz cambiado en nada, bueno si ahora eres más alto tienes barba y luces un poco más robusto que en secundaria, y parece que ahora ya eres independiente eso es estupendo, sabes te haría miles de preguntas en este momento pero sabes, tengo una cita con un chico muy apuesto y no quiero llegar tarde así que te pido que me des tú numero para después contactarte y salir a platicar de nosotros, ¿vale?-, me parece bien Carolina, aún sigo un poco sorprendido por esto, mientras la estudio de pies a cabeza le dicto mi número, -bueno Jan me voy debo de verme con alguien así que nos vemos-, me da un beso en la mejilla me mira a los ojos, me brinda una sonrisa y se marcha.
Bueno yo también debo apresurarme ya que debo de llegar a dejar las cosas al departamento y limpiar un poco, Carolina jaja vaya sorpresas no vuelve a traer la vida, subo al bus me siento en la parte trasera me colocó los auriculares y por primera vez después de una semana vuelvo a escuchar música, parece que voy progresando en eso.
Voy en elevador del edificio parece ser que a éstas horas los inquilinos del edificio no se encuentran en casa, la caja metálica se detiene y salgo de ella, giró mj cabeza hacia la puerta de mi apartamento y veo que hay dos personas fuera de el. No en este momento, no quiero verlos ahora pero tampoco puedo huir de esto siempre, camino me tiemblan las piernas, me tiemblan las manos estoy frío y siento que un miedo familiar recorre mi cuerpo desde la punta de los pies hasta el último cabello sobre mi trato de respirar cómo normalmente lo haría pero no puedo, esto es más de lo que puedo soportar, los tengo en frente tengo en frente a las personas que me dieron la vida y me criaron pero que ahora les tengo tanto miedo, mis padres.
¿Que hago?, estoy paralizado no se que decir o hacer, ¿a que diablos vinieron aquí?, -no vas a decir nada, ¿te vas a quedar callado ahí como idiota?-, escuchó la voz de papá arriba de mi mirada, mirada que se encuentra por los suelos en este momento, -¿me estás escuchando o resulta ser que la condición en la que te encuentras te volvió aún más idiota?-, no sé que contestar soy cómo un chico indefenso a su lado, hace dos semanas que no sabía nada de ellos y ahora los encuentro frente a mi apartamento, y lo peor de todo que no se en que plan vengan.
-Bueno muchachito si tú no vas a decir nada yo si, hace dos semanas que no sabemos nada de ti te fuiste sin decir nada y no me dejaste decirte nada, sólo quiero decirte que tus cosas ya están dentro de el lugar este quiero decirte que jamás en mi vida quiero saber nada de ti, si por mi fuera te quitaba hasta mi apellido, no sabes cuántas ganas tengo de romperte esa cara de idiota que tienes, eres lo peor que puede haber criado en mi vida eres una completa mierda, me siento más orgulloso de haber criado al perro callejero que a ti, sólo puedo decirte que ojalá que te mueras, te amaba con toda mi alma pero me defraudaste de la peor forma, tú madre piensa lo mismo, bueno me largo de aquí y espero y jamás nos volvamos a encontrar en la vida-. Veo irse a mi padre después de decirme todo eso, parece que sigue igual de firme que siempre me quedo recargado en la puerta tratando de pasar todas las cosas que Joseph escupió afuera de mi lugar, meto la llave a la cerradura y entró dejó las bolsas a un lado doy algunos pasos más adentro del apartamento y veo que todas mis cosas se encuntran ahí enfrente de mi, desde la cama hasta el trofeo de la escuela del que Joseph se sentía tan orgulloso y el cuál tenía en la vitrina familiar, camino más adelante y siento cómo las lágrimas empiezan a bajar por mis mejillas tomó el trofeo y lo veo detenidamente veo cómo Joseph se desquito con el, siento un nudo en la garganta, dejó el desperdicio de metal a un lado y tomó una caja de cartón que se encuentra un poco más adelante, la abro con cuidado y sacó lo que hay dentro de ella, parecen ser los retratos que se encontraban por toda la casa en los cuales me encontraba yo, sacó los álbumes familiares y empiezo a pasar de fotografía en fotografía, no tardo en darme cuenta que en todas me encuentro yo, parece ser que Joseph no quiere fotografías en las que me encuentre yo, asi que hablaba en serio con eso de que si pudiera hasta el apellido me quitaba. Entró al cuarto y comienzo a quitarme toda la ropa me quedó perdido en mis pensamientos y mi mirada perdida en el closet, giro la manija de la puerta y salgo desnudo de la habitación, pasó a un lado de todas mis cosas pero ni siquiera las veo, entró al baño me miro al espejo pero no me gusta eso que veo ese en verdad no soy yo, abro la regadera y comienza a caer esa fría agua sin pensarlo entró y me siento en el suelo de ese lugarcito, y me digo a mi mismo "lo que realmente estaba diciendo tu padre allá afuera era que te amaba y que te quería tal y cómo eras ya que eres su hijo del cual se siente tan orgulloso, te ama porque siempre fuiste el mejor para el", pero la realidad es otra estoy tirado en la regadera en estado fetal destrozado por las palabras de mi padre, llorando ni siquiera siento las lágrimas en mi cara ya que se pierden con la fría agua.
Pasada casi media hora salgo de la ducha y me preparó para salir me visto con la ropa adecuada me doy un mirón al espejo y veo que mis ojos están un poco hinchados pero aún asi debo seguir con el día ya que debo de llegar a mi trabajo de hoy, tomó mi saco las llaves y mi celular y salgo de la habitación topandome a mi mismo en la parte central de apartamento pero sólo pasó a su lado y me dirijo a la salida sin mirarme de nuevo cierro la puerta y me dirijo por las escaleras ya que cómo estoy en este momento no creó que sea conveniente usar el ascensor, salgo a la calle apenas se esta obscureciendo ya casi son las 6:00 de la tarde y no quiero llegar tarde al trabajo asi que pienso en tomar el primer bus que me deje cerca del centro ya que mi otro empleo queda en la parte central de la ciudad, -¡hey vecino 14!-, escucha una voz que grita giro mi cabeza en todas direcciones pero no veo a nadie, así que recuerdo que vecino 14 sólo me lo dice el vecino 12 así que volteó hacía arriba pero no veo a nadie en el edificio, tal vez sólo fue mi imaginación o que se yo así que caminó un poco para la parada de buses, -¡hey vecino 14!, ¿que no me escucha?-, escuchó que alguien me habla a mis espaldas así que me volteó y veo a Roberto en pijama parado frente a mi, -vaya vecino tuve que bajar corriendo por las escaleras ya que le grite desde allá arriba y usted no me vio, bueno vamos venga que le doy un aventon a dónde quiera que vaya-, no está bien puedo tomar el bus le respondo a Roberto, aparte veo que usted ya hasta trae la pijama puesto ha de estar muy cansado del trabajo y no quiero importunarlo, -jajajaja a con el vecino 14 habla cómo la gente mayor, mira Jan lo que te voy a decir es que yo no soy una persona mayor aparte soy tu amigo bueno eso quiero yo y los amigos se ayudan, lo que si se me hace una falta de respeto vecino 14, es que me hayas dicho que vengo en pijama cómo vas a pensar eso no, no, y no, esta es la ropa que me pongo cuando llegó de mis labores extranjeras en pocas palabras me visto así cuando llegó de mi empleo-, lo entiendo Roberto aceptó eso de que me lleves ya que voy tarde y no quiero llegar tarde de nuevo.
-Bueno Jan sube al tonto-móvil y vayamos a una aventura fantástica de atardecer-, ¿Roberto, porque eres tan amable conmigo?, -porque eres mi amigo y con los amigos hay que ser amables, bueno no sólo con ellos también con todos los seres humanos aunque en veces sean un poco complicados-, no entiendo bien Roberto pero no quiero confundirme más así que lo dejaré así, -me parece perfecto amigo Jan-.
-Oye Jan
Si Roberto
-Llevó conduciendo alrededor de 10 minutos y no se a donde rayos te dirijes
Es cierto no te dije
-Vecino 14 eres una persona muy misteriosa y se que me encantará ser parte de tu vida
En ese momento sólo le dije a Roberto a dónde iba y en el transcurso del camino no dije ninguna palabra más.
-Bueno llegamos vecino 14, no dijo ninguna palabra durante el camino-, no sabía que platicar contigo Roberto así que es por eso que no dije nada, -ay vecino 14 en esta vida siempre hay algo de que platicar, podría platicar de cómo se hace un ladrillo suena algo interesante para mi, pero algo si mi amigo Jan el silencio sólo es bueno es ciertas ocasiones o en ocasiones muy especiales, - lo entiendo bien Roberto tomaré muy en cuenta eso la próxima vez vale, -me parece excelente Jan-.
Ese día era una noche fría ya que adentro del auto se sentía una brisa invernal aún estando en verano, me dispuse a salir de auto pero Roberto me tomó de la mano y me dijo lo siguiente; -Que te vaya bien en tu empleo Jan, suerte-, después de eso se inclinó frente a mi y me dio un cálido beso en la mejilla.