La luna traia consigo la mayoria de veces, lluvia, pegajosa y terrible que podia enfermar a Rin en un tiempo muy corto. Era la desventaja de ser humano, el lo sabia, lo supo desde que la acojio, los niñoa moriannpor eso y Rin no seria una excepcion. Aunque durante esa temporada fria, ella no tuvo ninguna reaccion, lucia tan fuerte como un roble. El no sabia porque, hasta que un dia, cuando la luna aparecio de manera casi cobarde, caminaba lentamente con poca luz, lo que no era un problema para el, sintio entre las malezas un olor a limon y barro, se acerco y noto a una pequeña miko, la miko del hibrido toda manchada con barro, no la ayudo ni cuando esta la miro pero vislumbro una imagen que en su vida olvidaria, lucia como una tentadora presa en un plano no muy bien decorado.
La joven se levanto, limpio su cara, entrego una pequeña cajita a Sesshomaru que solo la tomo por curiosidad y se fue, enojada y herida, el no entendia porque y no le importo mucho siguiendo su camino a su grupo.
Cuando llego la pequeña Rin jugaba en la lluvia.
-Señor Sesshomaru ¿que es eso?
El lo extendio viendo la cara de felicidad de la niña.
-La señorita Kagome cumplio, si lo trajo.
-¿Que es esto Rin?
-Dulces para la gripe señor Sesshomaru.
-Hump...-Fue su unica contestacion y camino, sintiendo que debia haber ayudado a esa humana, aunque no entendia el porque.
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Sonrisa farsante.
FanfictionElla era muy calculadora, pero nunca creyo que existiria alguien que cambiaria su futuro. Junto a el veria un futuro diferente y encontraria un pasado aun latente.