Prólogo

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Las fiestas de niños ricos y mimados siempre son lo mismo; mucho alcohol, drogas y cero seguridad.

Fergus Dunbroch y Agnar Arendelle lideran los rankings de millonarios en Escocia y Noruega, las hijas de ambos estarán en la fiesta anual de "caridad" que se realiza en New York, era justo el lugar al que Jack y yo nos dirigíamos. Nos pusimos tan capullo como los pobres maricas que asisten a esas fiestas, cubrimos nuestros tatuajes con maquillaje para que no sospecharan de nosotros, y nos vestimos como pingüinos para tener la atención de los objetivos: Mérida Dunbroch & Elsa Arendelle

- Recuerda el plan, Flirtear con ellas, llevarlas a un lugar apartado y dar el golpe

- Será sencillo escapar con ellas de esa fiesta – sonrió de lado

- Si tenemos suerte saldremos de esa fiesta mucho antes de que sus padres se den cuenta de que ellas no están ahí

- ¿Qué si se dan cuenta? – giro el auto a la izquierda hacia la quinta avenida

- Si algo sucede sacas tu arma y dispara – dije en un tono sombrío – y recuerda Tu y yo no nos conocemos en esa fiesta Frost

Llegamos a la gran mansión Fitzherbert donde se realizaba la fiesta. Bajamos del auto y nos dispusimos a entrar, en la puerta un hombre alto y fornido nos detuvo para pedir nuestra identificación, luego de que la mostramos nos dejó pasar... luego vino lo difícil la fiesta entera estaba custodiada por cuatro guardias a cada esquina de la casa

- Mierda – musite

- ¿Ahora qué? – me pregunto Jack mientras veía a todos los rincones de la fiesta

- Procede con cautela, la fiesta esta custodiada y no podemos fallar o nos atendremos a las consecuencias con Norte – asintió unos separamos por la fiesta buscando nuestros objetivos

La muchedumbre se mezclaba haciendo casi imposible encontrar a Mérida, hasta que se de repente una melena rojiza se cruzó por mi mirada, me acerque unos pasos hacia ella para verificar que era la correcta y así era, pelirroja, piel blanca, estatura mediana y ojos color turquesa una belleza completa... lástima que esto es trabajo, de no ser lo ella sería el tipo de chica que llevaría a mi cama, su mirada se cruzó con la mía y me sonrió,le devolví la sonrisa... iniciamos el juego de la seducción con miradas coquetas,sonrisas y gestos un poco subidos de tono, hasta que ella se dispuso a caminar hasta mi << Te tengo >> pensé . Llevaba puesto un vestido azul que se acentuaba y resaltaba sus atributos. Iba a ser difícil sin que nadie nos notara gracias a ese maldito vestido

- Hola – saludo un poco tímida, pero a mí no me engañaba, se notaba por todo lo alto en que ella era una experta en esto

- Hola dulzura – la tome de la cintura y la acerque un poco a mí – ¿Disfrutas la fiesta? – ella sonrió coqueta <<Como me encanta que caigan tan fácil >>

- Estaba un poco aburrida – mordió su labio y paso su dedo por mi pecho – hasta que apareciste tu

- Oh puedes creer que también animaste mi noche y presiento que la pasaremos muy bien más tarde preciosa – sonrió y mordió de nuevo su labio

- Podríamos empezar a la hora que tú quieras – se acercó más a mí y empezó a depositar besos y pequeños mordiscos en mi cuello

- ¿No quieres disfrutar un rato más de la fiesta? – pregunte fingiendo incredulidad, ella se separó de mi cuello

- Estoy segura de que ellos estarán bien sin mí – se acercó y beso la comisura de mi labio, yo sonreí de lado ante su propuesta << Dulzura, haces más fácil mi trabajo>> pensé

MURDERSWhere stories live. Discover now