Capítulo 6 : Uniendo Lazos

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Punto de vista de Seiryū

Después de un acalorado monólogo de cuán desagradable puede ser la Voz de Dios, proseguí con el objetivo original que buscaba al subirme a este lugar. Tomé posición y dirigí mi mirada al gran espejo que estaba frente a mí. Lo que pude divisar me dio entre admiración, miedo, y una pizca de sorpresa.

Una criatura pequeña, del tamaño de un perro, un poco más grande que un chihuahua, con unos abultados músculos en las piernas traseras y una pequeña cola. En la espalda lo que parecía ser el comienzo de unas pequeñas alas se asomaba tiernamente, todo mi cuerpo estaba cubierto de una rugosa capa de escamas color café.

En mi boca se asomaban unos afilados colmillos, y sobre ésta; dos pequeños agujeros que supongo son por donde respiro. ¡Era impresionante! Me encantaba mi apariencia, pero también me sorprendí al ver tal diferencia entre un dragón y un humano.

Traté de mover mis alas, pero no obtuve ni una pequeña reacción. Estuve así un buen rato, hasta que por fin asimilé completamente mi nueva apariencia; el color es un tanto insípido, pero si ignoras ese aire de ternura que me rodea, puedo llegar a ser un imponente dragón, a pesar de que aún soy solo un simple bebé dragón...

Me bajé de un salto, la verdad es que si lo miras desde esta perspectiva, el lavabo estaba bastante cerca... Creo que son las desventajas de ser tan pequeño... Camine de vuelta a la habitación, se siente raro caminar a 4 patas, pero no es para nada incómodo.

Me acerqué al balcón y con poco esfuerzo pudo divisar efectivamente de que estábamos de noche. Es una lástima que no hayan relojes o celulares a mano. La verdad es que me lleva mosqueando hasta hace un rato la siguiente idea...

Este es otro mundo. Ya que en mi mundo, "La Tierra", no existen dragones, ni un sistema de "nivelación" como el que existe aquí, así es que, decir que estamos en otro mundo es bastante acertado. Pero el aspecto de las personas, la forma en que hablan y hasta esta habitación tiene un estilo "medieval", incluso los guardias llevaban armadura y portaban espadas.

Es como si hubiera regresado en el tiempo a la "Edad Media". Supongo que por lo mismo no deben estar demasiado avanzados en la tecnología como en mi vida pasada. Aunque si lo vemos desde el punto de vista de que en este mundo existen cosas como la magia, y criaturas como los Dragones, lo hace ser mil veces más interesante que un simple y común celular, o un avión de mi mundo.

Empecé a sentirme cansado, después de todo, acabo de nacer, y ya he adquirido demasiado conocimiento sobre muchas cosas... Mi mente necesita una siesta...

Salté nuevamente mientras me agarraba de las sábanas de la cama, hasta que escalé completamente la orilla. Me recosté sobre la montaña de cojines y me acurruqué sobre mí mismo, jamás desperdiciaría la oportunidad de dormir en una cama con tal nivel de comodidad...

~

El tiempo pasó...

Me desperté al sentir unas caricias recorrer mi espalda, cuando abrí los ojos pude ver que la pequeña de antes, estaba frente a mí con lágrimas en el rostro. ¿Estás bien? Le di una mirada de preocupación y acaricie su mejilla con mi cabeza. Al parecer se calmó, apenas sintió mi tacto comenzó a acariciarme nuevamente y dejó de llorar.

-(Calia): Eres bastante raro, sabes... Nos acabamos de conocer pero eres tan amable... Por cierto, aún no te había dicho mi nombre, soy Calia... Un gusto conocerte de nuevo, Seiryū.

Puse mi pata junto a la suya y la miré fijamente, por supuesto que soy amable, después de todo; lo quiera o no, ahora soy tu familiar. Sería incomodo que no tuviéramos una buena relación, jejeje...

Seiryū: El Despertar De Una Leyenda (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora