Seiryū: El Despertar De Una Leyenda (PAUSADA)

Capítulo 18: Final del Torneo

En ese momento no lo dude y salte rapidamente sobre el Lizard que casi doblaba mi altura. Debido a [Rugido de Dragon] logre que se quedara quieto un par de segundos, pero eso era mas que suficiente... Aterrice sobre la mano que en esos momentos estaba agarrando la espada y me aferre rapidamente a su cuello como si lo estuviera abrazando, al mismo tiempo mis pies estaban rodeando el brazo derecho apretando sus articulaciones y no permitiendo que pudiera usarlo. Cabe decir que no estaba tratando de demostrarle algun tipo de cariño extraño a este lagarto, simplemente lo estaba asfixiando con toda la fuerza que tenia mientras hacia lo mejor posible para bloquear uno de sus brazos.

Al menos esa era la idea, ante una situación desesperada se requieren medidas deseperadas.

Si no puedo derrotarlo en fuerza... ¡Entonces voy a estrangularte hasta que admitas la derrota! ¡Puedes golpearme, apuñalarme o intentar tirarme pero no me rendire! Si lo se... Me habia vuelto completamente loco, pero tomando en cuenta que no era una batalla a muerte estaba bastante comodo con mi desicion. El Lizard hace mucho que ya habia salido de su estupor y ya estaba intentando soltarse de mi, aun tenia un brazo libre, pero su espada ya habia caido al suelo luego de que apretara su brazo y le produjera el suficiente dolor para soltar su arma.

-(Rek): T-Tu... ¡Sueltame! Uhhh....

Viendo que no podia soltarme a pesar de que se retocia y trataba de tirarme, comenzo a lanzar uno tras otro golpe sobre mi. Mi espalda, mi rostro, mi abdomen y cada parte de mi cuerpo estaba expuesta y fue maltratada sin menor consideraron. El dolor estaba nublando mi conciencia y mis garras se apuñalaban fuertemente en el cuerpo de Rek intentando no caerme por sus poderosos golpes. Sus puños eran poderosos, mas de lo que habia predicho.

-(Yo): ¡Uohh!.- mi boca se abrio inconcientemente mientras mi saliva salpicaba producto del dolor.

Podia ver claramente como el Lizard se desesperaba, ya no podia oir el exterior y mis ojos se estaban haciendo pesados, pero la cara del Lizard estaba casi peor que la mia... Se estaba asfixiando, casi sin fuerzas se dejo caer al suelo mientras yo pensaba que ya habia ganado. Quizas... Fui un tanto iluso. Rek cayo al suelo, como si estuviera sentado, y la espada que habia caido anteriormente ahora estaba a su alcance. La hoja fue levantada temblorosamente, mientras mis ojos abultados, ya casi rojos veian como esta se apuñalaba en uno de mis brazos.

¡Mierda!¡MIERDA! La sangre empezo a fluir, pero me negaba a soltar mi agarre, ya habia llegado tan lejos. ¿Porque...?¿Porque me rendiría ahora? Espere un segundo ataque pero este nunca llego. 

Se han cumplido las condiciones necesarias. La habilidad [Aferrar Lv1] subió a [Aferrar Lv2]. 

Ambos brazos del Lizard habian caido sin fuerzas, su mirada estaba fijamente en mi, como si dijera... ¡Cai en tu trampa maldito! Incluso antes habia usado su cola tratando de golpear mi espalda pero la intercepte con la mia, fue como si jugaramos a las vencidas, pero con nuestras colas... Al igual que sus brazos ya habia dejado de forcejear. En ese momento abrio suavemente su boca.

-(Rek): ...Tu nombre... ¿Cual es tu nombre?.- escupio con un poco de dificultad.

-(Yo): Seiryu... ¿Y el tuyo?.- respondi tambien mientras el sudor recorría mi cara por el esfuerzo.

Ya sabia su nombre, pero igualmente pregunte.

-(Rek): Rek... Seiryu, lo recordare. La proxima vez... ¡Sere yo el que te gane!.- justo después sus ojos comenzaron a caer, probablemente estaba por desmayarse.

Justo antes de que lo soltara, una voz se escucho a lo lejos.

-(Gale): ¡Suficiente!¡El ganador es Calia Vanhart!