Please, help me...

CAPÍTULO 2

Salí del lavabo y pude comprobar que llegaba tarde a mi siguiente clase ya que no había nadie en el pasillo, tan solo yo.
Me dirigí corriendo a mi taquilla y miré que me tocaba, História. Cogí mis cosas y me fuí a mi siguiente clase.

Al llegar abri la puerta lo cual hizo que todos me miraran, espera, porque me miraban así? Miré mi reflejo en una pequeña ventana y pude ver como mi cabello parecía un nido gigante y mis ojos estaban hichados. Vi a Maddison riendo con Jace, su novio, alfinal de la clase. Me peiné como pude y me senté en el único lugar que quedaba.

La gente no paró de mirarme en toda esa clase, cuando estaba recogiendo, el profesor de História, James, me preguntó si podía hablar conmigo un momento.

James: Te a pasado algo?-Preguntó el profesor cuándo ya no quedaba nadie en la clase.
Sam: No... Sólo tube un pequeño problema nada más.-El profesor no sabía nada sobre mi enfermedad y pensé que no pasaría nada que por un día no tomase mis pastillas, no quería tener que formar un galeo por unas pastillas que las puedo volver a comprar luego.
James: Estas segura? Te he notado algo preocupada en la clase.-Dijo mirandome fijamente.
Sam: Si tranquilo profesor.
James: De acuerdo, ves a tu siguiente clase.

Asentí y salí de la clase de História para ir a la de Matemáticas.

El día transcurrió normal, al salir del instituto le conté a mi madre que perdí mis pastillas, saltandome la parte de Maddison, y me acompañó a comprar más.

Eran las 5:30pm y no sabía que hacer, así que llame a Liz para que viniera a casa un rato.
Al cabo de quinze minutos Liz apareció en mi puerta.

Liz: Heeey!-Dijo abrazandome.-Cómo estas? Me enteré de lo de Mad.
Sam: Shh! Bien...-Dije susurrando.-Mi madre no sabe lo de Maddison.
Liz: Ah! Losiento.-Dijo imitándome.-Voy a por un vaso de agua, ahora subo!-Dijo dirigiéndose a la cocina.

Mientras yo subía a mi cuarto la vi hablando con mi madre, parecía preocupada, aunque no le tomé mucha importancia y me dirigí a mi habitación.
Después de dos minutos llegó Liz.

Estubimos toda la tarde hablando y escuchando música hasta que se tubo que ir a casa.

Después de una hora mis padres me llamaron para que bajara a cenar.
Mi cena ya estaba sobre la mesa junto a mis tres pastillas, y mis padres aún se servían los platos, así que decidí esperarles para que no se enfadaran.

En la cena se les veía algo nerviosos, o asustados, no entiendo nada. Al acabar la cena volví a mi cuarto y intenté dormir, aunque me era imposible. Miré mi reloj y marcaban las 2:30am, ya es tan tarde? Bajé a la cocina a por un vaso de agua y me resultó ver a alguien cogiendo algo de la nevera, cogí lo primero que ví, una sartén y me acerqué cuidadosamente a esa persona, quería llorar, en el momento que estaba justo al lado alguien encenció la luz, mi padre, el cual me miraba extrañado.

Papá: Que haces?-Preguntó mirando a dónde yo pensaba que había alguien.
Sam: Lo siento, creí haber visto a alguien.-Dije algo dubtativa. Me había tomado las pastillas esto no me tendría que estar pasando, juro que vi a alguien buscando comida en mi nevera.
Papá: Cariño... No hay nadie.-Dijo guardando la sartén y sirviendome un vaso de agua, el cual yo acepté.
Sam: Buenas noches papá.-Dije dejando el vaso y volviendo a mi habitación pensando en esa persona.
Papá: Buenas noches hija, descansa.-Dijo papá quedándose un rato más en la cocina.