II. 22 de febrero de 2013- "Dear Maria, count me in"

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Ian y yo quedamos de vernos tres días después en la biblioteca de la ciudad para comenzar con nuestro trabajo, me sentía algo nerviosa porque no sabía si podríamos trabajar bien los dos, yo ya tenía un tema en mente, hablar sobre como la música influye en las personas, y para esto, usar mi banda favorita, All time low, pero dudaba que fuera un tema interesante para Ian, porque no sabía que le podría llamar la atención.

Llegué a la biblioteca un poco antes de la hora acordada, así que estuve esperando unos minutos hasta que él llegó.

—Buenos días, Adene— me dijo mientras me saludaba moviendo la palma de un lado para otro, ese chico ya me estaba cayendo bien.

—Buenos días, ¿listo para empezar con el ensayo? — le dije mientras entrabamos y escogíamos una mesa para trabajar.

—Sí, escucha, pensé en un tema para el trabajo, tal vez no te guste mucho, pero es algo que realmente me interesa.

—Ah, ¿sí?, yo también tuve una idea sobre lo que podríamos escribir— me moví un poco incomoda en mi lugar, que tal que no le interesaba mi tema.

—Bueno, digamos nuestros temas y así decidimos cual sería más fácil para realizar— me dijo.

—Pensé que lo podríamos hacer sobre la música.

—Adene, yo pensé lo mismo— soltó una risita

—¡Eso es genial!, ahora solo debemos elegir qué cosas hablaremos— saque mi carpeta y le enseñe una foto, —Mira, esta es mi banda favorita, se llama All Time Low, creo que lo mejor sería...— me interrumpió con un poco de emoción en su voz

—Querida María, cuenta conmigo— tomó la foto

—¿Conoces sus canciones? — dije algo sorprendida y emocionada, como no lo estaría si me había respondido con la letra de una de sus mejores canciones.

—All Time Low también es mi banda favorita— sacó su teléfono y me enseñó una foto que tenía de ellos.

—Creo que será muy fácil trabajar contigo.

Ian sonrió, pero esa sonrisa no llegó a sus ojos, me pregunté si tal vez se sentiría un poco mal, estaba helando afuera, pero no dejé que eso me molestara.

Seguimos trabajando en nuestro ensayo por un par de horas más, en las que hablamos de música y All Time Low, él me contó como los había conocido y que viajó hasta Chicago para su concierto, yo lo envidié porque siempre había querido ir a uno, pero mis padres no me dejaban.

Hablamos de algunas otras cosas, y descubrí que teníamos más cosas en común, como que a los dos nos gustaba tocar el piano.

Él se ofreció a prestarme su vinilo del nuevo álbum Don't Panic, me pareció muy agradable de su parte, porque no había escuchado las canciones aún, me gustaba ahorrar para comprarme el disco en vinilo, porque eran mi adicción, y hasta el momento que lo tenía en mis manos, lo escuchaba.

Me dijo que el lunes me lo daría en la escuela y que había sido muy divertido pasar el rato conmigo haciendo tarea.

Le dije que podríamos ser amigos porque teníamos los mismos gustos musicales y eso para mí era un gran requerimiento al momento de ser amigos, el solo se rió y me dijo que claro, le encantaría ser mi amigo.

Ian se fue a su casa, un rato después mi madre pasó por mí.

Al llegar a casa escribí en mi diario lo que había pasado ese día y como había conseguido un nuevo amigo.

Tal vez fue raro pedirle a Ian ser mi amigo ese día.

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