UN ÁNGEL ENTRE MIS SOMBRAS

Capítulo 11

POV Christian

-¡Anastasia!- Grito cuando llego al clímax.

Estamos jadeantes, con la respiración entre cortada.

-Wow, apenas inicio mi vida sexual, y ya me follan en el escritorio- dice y esconde su rostro en mi cuello.

-Me alegro ser yo el responsable, con quien iniciaste tu vida sexual- joder ha sido un polvo alucinante.

-¿Y ahora qué?- Pregunta

-¿Quieres más sexo?- Wow, es insaciable

-No, al menos no por ahora...me refiero ¿a que somos?- Mierda, insiste en eso.

-Anastasia, yo nunca he tenido una novia...verás, hace unos días atrás quería suicidarme- ella se estremece por mi confesión

-Y ahora estoy aquí contigo, y honestamente... nunca me había fascinado tanto una mujer, y eso que he tenido muchas- todas las mujeres que he tenido han sido sumisas.

-¿Que quieres decir, con que no haz tenido novia...pero si mujeres?- Salgo de ella

-Que tal. Si vas a mi casa está noche...quiero decirte el hombre que soy...y si después de eso no quieres verme. Aunque me duela el alma, te dejaré ir- se me forma un nudo en la garganta

-¿Eres un asesino?- Pregunta preocupada

-¡No!-

-¿Un corrupto? ¿Traficante? ¿Violador? ¿Pedófilo? -

-Nada de eso- contesto

-Entonces ¿por que crees que me iría?-

-Por que soy un moustruo-

-¿Qué?-

-Está noche, te lo explico- la beso los labios.

Ana y yo nos vestimos, se que ella está muy intrigada, con lo que acabo de decirle.

-Ahora me iré.- Vuelvo a besarla.....

Salgo del restaurante después de despedirme de Anastasia, me encanta esa mujer, ojalá no salga huyendo. Por que me doleria hasta el alma, si decide irse. Debo ser honesto con ella, es una mujer increíble, deseo con todo mi ser, que no se vaya...

***************

Anastasia ha quedado estupefacta, al oir que soy un sádico.

-Di algo, por favor- suplico, puedo oír los latidos de mi corazón

-¿Que quieres que te diga? Esto es un poco dificil- responde

-¿Te irás?- Por favor no lo hagas. Mis manos sudan, y mi estómago duele

-No Christian, no me iré...pero dame un poco de tiempo- sonríe, y empiezo a relajarme.

-¿Por que lo dejaste? Me refiero que, si era algo que te satisfacía, ¿por que dejaste de hacerlo?- Mierda.

-Mi vida dejo de importarme, después que murió mi padre, y descubrí que ...- me callo y bebo mi copa de vino.

Estamos sentados en la sala, en mi gran sofá.

-Dime Christian, necesito entender-murmura Anastasia, y también bebe de su copa.

-Tenía una fuerte depresión, todo dejó de importarme...mi familia, mi vida, mi negocio todo, incluyendo mi vida sexual, hasta que te conocí hace unos dias atrás-

-Yo no pude ser tu salvación - dice sorprendida. Sonrio

-Anastasia, en estos días haz logrado que ni mi sicólogo, o mi familia había logrado hacer- salvarme de mi mismo

-Me entusiasmé contigo, algo que ninguna de mis sumisas había logrado...eres tan diferente al resto de las mujeres- cojo su mano pequeña.

-Tu me das esperanza. Esperanza de seguir viviendo, y espero que no me dejes, por que volveré a sumirme en la depresión.

-No lo entiendo...¿que tengo de especial?-

-Eres dulce, hermosa, valiente, inteligente. Y estoy seguro que nunca harás lo que yo quiero, me tienes fascinado Anastasia Steele- beso sus nudillos.

-Y que decir del mejor sexo de mi vida- se sonroja

-Christian- dice avergonzada.

-Anastasia, yo no tengo ni idea de las flores y los corazones, pero contigo quiero intentarlo. Que dices ¿te arriesgas conmigo?- Digo esperanzado.

-Wow...me gustas, como ningún otro hombre, despierta en mí, lo que nadie había logrado despertar. Y yo también quiero arriesgarme contigo-

-¡¿Es enserio?!- No disimulo mi emoción

-Si Christian, pero estarás a prueba una semana...después veremos- sonríe. Y mi oscuro corazón se hincha de felicidad.

-Espero pasar la prueba- le tomo el rostro con mis manos, y lo beso apasionadamente.

Nos separamos por falta de aire.

-Pasa la noche conmigo nuevamente- suplico

-Si- susurra

-Ven- tiendo mi mano , y ella la coge de inmediato.

La llevo hasta mi dormitorio....

[·· ·· ·· ·· ·· ·· ·· ·· ·· ·· ··]

Me despierto por culpa de la maldita alarma. Abro mis ojos, son las seis, veo a Ana que duerme plácidamente, es demasiado hermosa. Demasiado para mi. Anoche follamos hasta quedar completamente agotado. Es curioso que las dos ocasiones que he dormido con Anastasia, no he tenido pesadillas ¿será mi atrapa pesadillas?

Decido volver a dormir...

-Christian despierta, se hace tarde- escucho una voz dulce.

Abro mis ojos, y me encuentro con unos hermosos ojos azules mirándome. Wow que lindos, quiero despertarme siempre asi.

-Que bonito despertar- murmuro.

-Si, pero hay que levantarse-

-Está bien, bañemonos juntos-...

Después de una excitante ducha, Ana y yo tomamos desayuno, y ahora la llevo a su casa, para que pase cambiarse de ropa, para que vaya al restaurante.

-Christian ¿estás seguro que quieres intentar algo conmigo? Ósea quiero decir... a ti te gustan las sumisas, y yo no quiero hacer ese papel- suelta ella de repente.

-Estoy muy seguro- afirmo

-¿Y si te aburres de mi?- Pregunta preocupada

-No pasará

-¿Cómo lo sabes?

-Por que ninguna de esas mujeres que fueron mis sumisas, despertó el deseo, la pasión, y me provocó lo que tu me provocas- ella me sonríe con esa linda sonrisa que tiene.

-Aún así es extraño que quieras cambiar de la noche a la mañana- musita

-No es extraño, hacía más de un año que dejé el mundo de las sumisas- sigo conduciendo.

-¿Me dirás tus razones?-

-Algún dia-

Por ahora no voy a decirte que la maldita que me dio la vida, nunca me quiso, y simplemente se deshizo de su estorbo. Pero por suerte un dulce matrimonio se hizo cargo de mi. Pero la vida me castigó arrebatandome mi padre.

Finalmente hemos llegado al edificio donde vives.

-¿Irás al restaurante hoy ?- Pregunta

-Por supuesto, me encanta la comida preparada por mi chef, favorita...pero lo que realmente me fascina es el postre- digo con voz ronca. Ella se queda roja cómo un tomate.

-Será mejor irme- me da un dulce beso en mis labios.

-Nos vemos despues- sale de mi auto.

Y sonriendo cómo idiota , y con unas inmesas ganas de vivir, me voy a Grey house. Debo hablar con John Flynn