La Historia De Una Vampiro.

Capítulo 3.

No te dejare salir. Debes hacerlo. No, no lo haré, tú no puedes obligarme. ¿Enserio piensas eso? Esta más que claro.

— Te vi. —La voz de Lastarria se hizo presente a mis espaldas. Me sujeto de la cintura y apego su cuerpo al mio, bajo conmigo y me dejo libre al estar tocando ya el suelo.

— ¿Ella es? —Habló el chico.

— Si. Se ve débilucha, pero es porque aún no consume sangre.

¿Yo consumir sangre? ¡Esta loco!

— Un gusto. Soy Andrés.

— Ja, así le llaman a la menstruación hoy en día. —Dije con una risa.

De pronto se oyó el estallido de una carcajada, mire a mi lado y Lastarria reía y reía como si nunca lo hubiese hecho.

Andrés me miro serio. ¿No le gusto?

— ¿Cuál es tu nombre? —Agarro mi mentón. Aún se oía como Lastarria reía.

— Tha...Thabita. —Acerco su rostro al mio. Te va a morder. No, ¿cómo crees?

De pronto siento que caigo en un vació, y lo único que puedo ver es un lugar oscuro y en su centro una especie de pantalla con gran tamaño, cuando observo que todo es mi punto de vista. Veo como el se sigue acercando, hasta que yo lo pongo mi mano es su rostro y lo empujo. Miro a mi izquierda y veo a Lastarria aún con algo de risa. Rápidamente me acerque a su cuello y lo mordí con fuerza, pude escuchar un gemido por parte de el, hasta que veo como me abraza y susurra. 'Sigue bebiendo pequeña...'

Lastima que no soy yo quien siente ese abrazo. Si no que es mi parte vampiro, quien esta siendo abrazada por quien me mordió. De todas formas no tengo que pensar así, no quiero aceptar que es atracción lo que siento, solo es rencor. Si. Mucho rencor.

De pronto siento como vuelvo a la normalidad y mi sentidos regresan. Sentí como bebía su sangre. Dios, es tan delicioso. Hasta que lo sentí, sentí ese abrazo, no estoy segura, pero creo que percibí, ¿cariño?

Debo estar loca.

Desperté en una habitación sucia y que parecía estar abandonada. Sin pensarlo me levante y mire a mi alrededor, me puse de pie y observe cada detalle putrefacto de este cuarto. Cuando de pronto miro a mi espalda y veo a una chica colgando del techo, no, más bien, estaba flotando.

— ¿Qui... Quién eres? —Tartamudee, se parece a los fantasma de The House.

— Soy Belinda... —Habló. Su voz era suave y algo aguda. Bajo y se puse enfrente de mi.

— So... Soy Thabita...

— Un gusto. ¿Eres la novia de Lastarria o de Andrés?

— ¡De ninguno! —Me puse como tomate al oír eso. Ambos son atractivos pero... ninguno me gusta.

— Oh, Andrés es lindo~ ¿No crees?

¿A Belinda le gusta Andrés? Woaaa... genial.

— Eh. Si, pero no me atrae ni nada. Tiene lo suyo, pero nada más eso.

— ¡Eres muy amable! —Me 'abrazo' por así decirlo.— ¿Quieres ser mi amiga? Creo que tenemos mucho en común. ¿Qué ser mitológico eres? Yo soy un fantasma.

— Ya lo noté... jejeje. Pues yo soy un vampiro.

— ¿Desde cuando? Yo desde hace treinta años.

— Eh. Yo desde ayer en la noche.

- ¡¿Quién es Belinda?!

- Una ex amiga.

- ¿Por qué 'ex' amiga?

- Si me dejas seguir escribiendo te darás cuenta.

- Muy bien.