En la inmortalidad de tu voz, vive mi ser, el amor que una vez existió, nunca se extinguió, más allá de las palpitaciones, sonidos, caricias, besos, gemidos y todas esas fascinaciones amorosas, apasionadas, calurosas, no estás aquí, hoy más que te deseo, no estás aquí, y no es que no te necesite, simplemente no es mencionable ese hecho, cuando el hecho es más que claro, es incoherente que no se denote tu falta, el incontenible vacío, las ganas de llorar que me haces sentir, porque podría llorarte una y otra vez, noche tras noche, inclusive cuando parezco feliz, lloro, cuando estamos en una fiesta, lloro, podría pasar una eternidad llorándote y no me secaría, no me cansaría y no desistiría de nuestro pasado, podría seguir llorándote otra eternidad y estaría seguro, convencido, inmerso en la totalidad, en la absoluta verdad, que si esto no es amor, no sé qué es.
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Lo que no te dije y no supiste mirar
PoetryLo que no se llega a decir muere en el alma, así que por eso lo escribo. Antología de poemas y textos de amor, desamor, ilusión, esperanza, la vida.