Capítulo 1

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Había una vez, hace 16 años, exactamente el 17 de noviembre nació una preciosa niña en una cabaña en el bosque. Era de una familia de licántropos, la tribu Colmillos Plateados, una de las mejores tribus de todos los tiempos. Por desgracia, esta magnífica tribu estaba enemistada con la segunda mejor tribu, la tribu Camada de Fenris. La pequeña niña era muy hermosa y tuvo tan precioso nombre como era ella. Su nombre fue Emily, Emily tenia un hermano mayor llamado Patrick. Sus padres eran los líderes de aquella manada, su padre era el Alfa de aquella tribu tan perfecta, su nombre era Will. Su madre era la Beta de la manada, su nombre era Louisa. La pequeña niña creció feliz hasta los cuatro años y medio sin saber de la existencia de los licántropos, ya que ella aún era demasiado pequeña para transformarse, creció feliz hasta aquel fatídico día. Se oyen pisadas de lobos gigantes que retumban en el bosque acercándose a la cabaña. Era la tribu Camada de Fenris. Will, como buen líder que era se tocó una especie de marca que tenía en el brazo para llamar a sus hermanos, pidiendo refuerzos para enfrentarse a ellos. Este es el símbolo que tienen toda la tribu en el brazo:

Louisa se acercó a Patrick y le dijo estas dolorosas palabras que ningún niño de 6 años aceptaría nunca:

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Louisa se acercó a Patrick y le dijo estas dolorosas palabras que ningún niño de 6 años aceptaría nunca:

- Patrick, cariño. Tienes que ser fuerte y llevarte lejos de aquí a Emily mientras duerme. Llévatela con los humanos y tú también. 

- Pero, ¿papá y tú vendréis con nosotros?

Louisa miró con verdadero dolor y tristeza a su hijo y le dijo con toda la ternura que pudo emplear en su voz:

- No creo, hijo mío. Creo que esta es la batalla definitiva contra la tribu Camada de Fenris y es una tribu muy poderosa.

El pobre niño, con los ojos llenos de lágrimas le dijo a su madre:

- Pero, papá y tú no podéis morir. ¿Qué haré sin vosotros? No voy a poder. Mamá, no, por favor.

La madre, a punto de llorar, le dijo abrazándolo:

- Es la única solución, yo sé que quieres mucho a tu hermana y cuidarás de ella. Cuidaos y poneos a salvo. Te quiero, Patrick.

La madre le dio un beso muy tierno en la mejilla y se frotaron las narices, el saludo de la tribu Colmillos Plateados.  Louisa prestó atención a los ruidos fuera de la cabaña y, con mucha rapidez, cogió a Emily, que estaba profundamente dormida, le dio un beso en la frente y le susurró en el oído y se la dio a Patrick. Le dijo a Patrick:

- Llegó la hora. Corre, hijo. No te detengas hasta que veas el pueblo humano.

Louisa salió de la cabaña, se transformó y se puso al lado de su marido. Patrick salió corriendo de allí con Emily, intentando reprimir las lágrimas. Llegaron al pueblo humano después de mucho rato corriendo, y de la fatiga Patrick se desmayó.

Mi lobo interior #MLBI1 #PLC2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora