El Árbol Mágico

Una Trágica Noticia. (Capítulo 4)

Me sentí tan feliz de que ella aceptara mi petición, ya no había nada que me impidiera compartir junto a ella, salir juntos, tomarle de la mano y llevarle a conocer esos lugares que tanto me gustan, donde en realidad puedo sentirme yo, pero aunque la lleve a muchos lugares, esté árbol es nuestro lugar preferido, el lugar donde le conocí, donde nos dejamos tantas notas, donde pase momentos inolvidables.

Ese día mi hermana me levanto como siempre, salto sobre mi cama, me abrazo, para ese entonces mi padre tenía unas semanas desde que se fue, resulta que lo necesitaban en su trabajo, pero si le daban un mejor sueldo, eso beneficiaba mucho a nuestra familia, mi madre le extrañaba pero se hacia la fuerte, siempre se llamaban por teléfono y el venia al menos unos días cada 3 meses, una parte de mi deseaba que el tiempo pasara rápido e irme a estudiar, así para ese entonces mi padre podría venir a abrir su negocio en el valle, no tendría que estar tan apartado de la familia, pero ella vino a mi mente, entonces desee por un instante que ese tiempo se hiciera eterno para llegar, lo se es algo egoísta de mi parte, pero sin duda eran mis pensamientos en aquel momento.

Llevaba a mi pequeña hermana a la escuela, mi madre atendía su lindo jardín, ese día iba sonriendo de oreja a oreja, mi hermana me veía extrañada, era extraño para ella verme tan emocionado así, luego de dejarle en su escuela, me reuní con mi amigo, le conté que por fin me anime a decirte para conocernos en personas, el se alegro por mí, ya sabía quién eras tú, por sus averiguaciones descubrió que eras la sobrina política de los dueños de la hermosa mansión que queda en lo alto de la pradera, aunque la mayoría del año esa casa vivía vacía, tal parece que lo que me contaste era cierto, solo viniste de vacaciones, mi amigo me miro algo extrañado tal parecía que le preocupaba que me enamorara de alguien que se marchara en un determinado tiempo, pero hice caso omiso a sus palabras.

Pase esa tarde junto a él, compartimos con varias amistades, compre muchas cosas para la casa después de todo era mi deber cuidar a mi familia, ese día tuve miles de cosas que hacer la verdad no pude dejarte la nota que tenía en el bolsillo, realmente me sentí mal, no quería que pensaras que no me importas, ese noche no pude dormir daba vueltas en mi cama, y no pude evitar salir por la ventana, lo sé era casi una locura salir en la noche pero por ser un valle tranquilo, realmente nunca sucedía nada así que no me quedaría tranquilo hasta dejarte esa nota.

Por fin pude llegar puse la nota en la pequeña abertura me emociona que le leas, allí te comentaba lo importante que eras para mí, lo mucho que deseaba que llegara el día de la esperada cita, pero como te lo dije esperaba que tú me dijeras cuando estuvieras lista, yo esperaría el tiempo que fuera necesario, si se que estaré junto a ti, fue lo que te puse en la noche con un pequeño mensaje de te quiero, me fui a casa en realidad hacia un frio terrible por suerte nadie noto mi ausencia, lo digo por mi madre tiende a tener el sueño realmente ligero.

Al llegar el nuevo día cumplí mi monotonía, ayudar a mi madre, llevar a mi hermana y te juro que en todo el camino, no te logre sacar de mis pensamientos, tal parece que estas eternamente en mi corazón, luego de salir de mi trabajo a medio tiempo en realidad no era bien pagado pero ayudaba en la tienda del padre de mi amigo, allí se me iba el día echándole una mano, acomodando cajas y despachando en el local, la paga no era muy buena pero no lo hacía por dinero, era más bien por compañerismo, las horas fueron pasando y la verdad me iba impacientando más, al salir del trabajo me despedí rápido de mi amigo.

Al llegar a nuestro árbol encontré tu nota, no me decías cuando nos reuniríamos eso me distrajo un poco, pero no te juzgaría si aún querías alargar nuestro encuentro, en tu nota pude notar algo de preocupación, me comentabas que tus tíos te prohibían cosas que odiabas que te trataran como una niña, pero que en parte les entendías porque estabas bajo su cuidado, me contaste que te permitían salir menos, pensé en ese momento que clase de familia tiene ella, es que desean tenerle encerrada, sin embargo seguí leyendo me comentabas que me querías, que te importaba y que me deseabas hacer feliz, no puede evitar pensar que igual deseaba lo mismo.