Capítulo cincuenta y nueve

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Hoy. Hoy es el día. Mia viene de camino. Estoy nervioso. Me he cambiado tres veces de pantalones y cinco de camiseta, suena raro pero sí.

-Te puedes estar quieto joder-Dani suspira y cruzo las piernas, pf-Que pesado eres enserio. Se supone que has quedado con ella a las ocho que es cuando llega, ¿No?, pues venga muchacho ve ya y me dejas tranquilo.

Le miro mal y suspiro. Joder. Tengo que salir ya, con tanta tontería voy a llegar hasta tarde.

-Ay Dani deja a tu hermano en paz-Mi madre se acerca a mí y comienza a arreglarme el cuello de la camisa.

-Por cierto, esa camisa es mía-Dani frunce el ceño y le lanzo un beso-Cuidadito con ella eh.

-Que sí Pesado-Me río y me saca la lengua.

-Vas muy guapo Jesús- mi madre sonríe y suspiro, cada vez estoy más Nervioso-¿Mia se va a quedar aquí me dijiste no?

-Eso significa que hoy duermo con Juan Carlos, ¿no?-Pregunta Dani suspirando y mi madre asiente- Me cago en todo.

Tengo que irme ya si quiero llegar a tiempo, creo que nunca antes he estado así. Salgo de casa nervioso, me muero por verla de nuevo.

[...]

Al llegar a la estación miro de un lado a otro, leo su mensaje, el tren va con retraso y tardará un poquito más. Me siento en uno de los bancos y cruzo las piernas. Vuelvo a levantarme y camino de un lado a otro.

Me sudan las manos un montón y no dejo de moverme. Se me ha caído el móvil dos veces y he perdido dos euros, que bien todo.

Alguien me toca el hombro izquierdo y cuando miro hacia el lado izquierdo no hay nadie, así que miro hacia el derecho. Me tapa los ojos y por su risa puedo percibir quien es, oh.

Agarro su cintura y sin pensármelo más me lanzo a sus labios, aquellos que he echado y echo tantísimo de menos. Sus manos se colocan sobre mi cuello y tras un largo e intenso beso se separa de mí. Sonríe y me abraza todo lo que puede.
Acaricio su espalda y beso su mejilla, no he echado tanto de menos a una persona en mi vida.

-Por fin-Susurra tímida y sonrío-Te echaba de menos Jesusín-Se ríe y acaricia mi mejilla-¡Estás muy guapo!

Me río ante su comentario y vuelve a abrazarme. Me encanta, simplemente me encanta enserio. Paso un brazo por sus hombros y se apoya sobre este, agarra su maleta y salimos de la estación.
No dejo de mirarla, me encanta tanto... Beso de nuevo su mejilla mientras esperamos que el semáforo se ponga en verde para poder cruzar.

-Estoy muy contenta de volver a verte-Sonríe y acaricio su mejilla-No puedo creer que te vayas a ir.

-Nos veremos muy pronto-Sonrío y vuelvo a besar sus labios, no me canso de ella.

-No quiero que te vayas-Se abraza a mí y acaricio su espalda su nuevo.

-Te prometí ir a verte y lo cumpliré-Me acerco a sus labios y asiente, sonríe y apoyo mi frente contra la suya.

Suspiro, aún no me creo que esté aquí. Vamos de camino a mi casa, menos mal que pasará la noche conmigo porque así tendré tiempo de hablar con ella.

Cuéntame al oídoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora