Hell ; Larry

XIII. Mr. No

Decir que me siento incómodo viviendo en el departamento de Harry es quedarme corto. La presencia de Niall apacigua el impacto pero sé mejor que nadie que su compañía es un lujo que tiene fecha de caducidad y muy seguramente esa tarde, al regresar del instituto él ya no estaría.

Con mi uniforme puesto salgo de la habitación para ir al cuarto de lavado en busca de mi morral, y no puedo evitar quedarme observándole. Harry dormía profundamente en el sofá, se veía algo incómodo y eso me hacía sentir mal, porque a final de cuentas era su departamento, y por mi presencia allí él ya había dormido dos días seguidos en ese incómodo sofá. Me sentía pretencioso y abusivo, aunque también sentía no tener la culpa, yo no le había pedido nada, él me estaba ayudando porque quería y yo... yo ni siquiera sabía cómo agradecerle el estarme tendiendo la mano, una vez más.

Mi mente estuvo dispersa en el transcurso de las clases, por lo mismo traté de concentrarme el doble en los dos exámenes que ese día presentaba, uno curiosamente, era de química. Sin buscarlo ignoré a Zayn todo el tiempo, aún tenía presente nuestra última conversación, pero con todo lo vivido yo no tenía ánimos para seguir pendiente a ese tipo de cosas.

—¿Puedo saber qué pasa contigo? —Zayn me interceptó en el descanso y caminó junto a mí hasta la biblioteca del instituto, yo aún seguía sin tener mucho apetito y no estaba nada seguro de haber estudiado lo suficiente para mi próximo examen del día—, te ves distraído.

—Solo estoy cansado, me acosté muy tarde anoche.

—¿Estudiando?

—Así es.

—Louis, ¿Puedo preguntarte una cosa? —enarco una ceja y me ubico en una de las mesas, él se sienta frente a mí mostrándose muy tranquilo y relajado, aunque había algo de incertidumbre en su mirar—. ¿Por qué no contestas mis llamadas?

Suspiro profundo y me quedo mirando un punto fijo en la mesa por varios segundos. En mi escape de la realidad he dejado muchas cosas atrás. No quiero preocupar a más personas, no quiero ser una molestia para nadie, no quiero que me restrieguen en la cara que no he podido con mi propia vida. Aunque mantengo mi celular encendido no contesto mensajes ni llamadas, eso incluye a mis padres, a Zayn y las otras pocas personas que aún se acuerdan de mí.

—No creo que sea correcto profesor.

—¿Por qué no?

—¿A su novio le parece bien que me esté llamando y escribiendo en todo momento? —le miré sin creer que esas palabras habían salido de mi boca con la rudeza con que lo había mencionado, y él me quedó mirando sorprendido, tanto que hasta tardó varios segundos para responder.

—Entiendo... —él juega con su lengua dentro de su boca y me mira como si estuviese pensando muy bien sus palabras—, Louis, no quiero que malinterpretes las cosas.

—Entonces no me confunda profesor —le sostuve la mirada y él una vez más se sorprendió por mi respuesta.

—¿Te sientes bien? Tú no eres así...

—Estoy estresado profesor, eso es lo que pasa.

—Vale —él finge una sonrisa y muy lentamente se pone de píe—, entonces te dejo solo.

—Gracias.

Concentro mi mirada en el libro que ya había abierto y me siento mucho peor que minutos atrás, ¿era necesario haber sido tan tosco con él? Me pregunto a mí mismo y no encuentro una certera respuesta. Había vivido tanto tiempo colgado a una ilusión que nunca significó nada que poco servía avivar sentimientos cuando él seguía sin tener nada para ofrecer, y dolía, claro que dolía estar rechazando su presencia pero yo ya me había convertido en un ser que esquivaba y evitaba el daño a mis sentimientos, yo no quería ser lastimado, ya había perdido demasiadas batallas, yo iba a levantarme y seguir adelante con una fuerte defensa a mi alrededor.