Secretos

Capitulo 29; ¿Nadie?

Los parpados le pesaban, su cabeza parecía estar martilleada constantemente, por no hablar de ese continuo pitido que tenia en el oído

-Oh, Dios –Se incorporo despacio en la cama y sintió que todo le daba vueltas –Esto no me puede estar pasando –cerro los ojos y respiro despacio 

Entonces imágenes de la noche anterior llegaron a su cabeza, bailando subida a la barra de la discoteca, pelando con Dexter por otra copa, luchando por meter la llave en la cerradura, el sofá ¿se movía? –William –y abrió los ojos de golpe –No, no, no –¿Le había vomitado encima? ¡Dos veces! “¿En este estado? Estoy estupenda ¿no me ves guapa? ¿No te gusto?” –No-se tiro de nuevo en la cama con las manos cubriendo su cara ¿Le había dicho eso a William?

Trago saliva despacio, con un poco de suerte se habría ido esta mañana, Brian ya estaría aquí.   Se levanto de la cama y se agarro al cabecero ¿Aun estaba mareada? ¿Qué diablos había bebido anoche?  Camino lentamente hacia la puerta de la habitación, con miedo a abrirla, saco fuerzas y tiro de ella

-No seria para tanto –Brian reía divertido

-Eso lo dices porque no fue a ti a quien vomito –William le miro molesto

-¡Mami! –James salto de su silla y corrió hacia su madre para abrazarla

-No grites cielo –Cristal hizo una mueca mientras le abrazaba

-¿Estas malita? –Alexander se acerco a ella y le dio un beso en la mejilla

-Mama tiene resaca –Brian la miro divertido -¿Mucho dolor de cabeza?

-Creo que perdí un zapato –Cristal camino por el salón entrecerrando los ojos, le molestaba la luz

-Esta ahí –William camino hacia ella seriamente y señalo junto a la puerta de la habitación –Me lo lanzaste a la cabeza

-¿Eh? –Cristal no sabia donde meterse ¿Por qué seguía allí? Debería haberse ido ya

-¿Quieres comer algo? –Brian le mostró el plato de huevos revueltos

-No –Cristal tapo su boca con urgencia

-¡Eh! –William dio un salto atrás, no de nuevo

-Mierda –y ella salio corriendo hacia la habitación y se encerró en el baño

-Creo que es hora de que lleves a los niños al parque –William poso su mirada en Brian

-¿Eso no deberías hacerlo tu? –Brian levanto una ceja –Eres el padre

-Ahora tengo algo que hacer –Entrecerró los ojos mirando la puerta de la habitación

-No te pases –Brian sonrió y camino hacia la puerta -¡Vamos enanos! Os comprare Donuts