Saving the 6 stars || ASTRO ☆

《6; El que sólo necesita amor》

06
"El que sólo necesita amor"

Larissa se encontraba ya en el último trecho del sendero. Estaba feliz porque ya casi terminaba su cometido, pero todavía le faltaba una persona, y no sabía con quién podría encontrarse.

Por suerte el día estaba nublado, así que el sol no incineraba a los viajeros, que no habían tomado un descanso desde la última vez.

Rocky iba en la espalda de Larissa, y no dejaba de balancear sus piecitos a los costados de las caderas de la muchacha mientras tarareaba una canción.

A los chicos les causaba ternura, pues el pobre estaba reteniendo sus impulsos de pararse y mover el esqueleto al ritmo de una pegadiza canción.

- ¿No estás cansada, Larissa? -Preguntó Eunwoo atento.

- No, puedo cargarlo un rato más. -Le sonrió.

- Lo siento... -Se volvió a disculpar el jóven y todos le sonrieron.

Caminaron por un largo rato, hasta que a lo lejos pudieron divisar un árbol con algunas flores rosadas.

- ¿Un árbol en el medio de la nada? Pidan un deseo. -Dijo MJ mirando fijamente aquel árbol.

- ¿Aquí puede haber árboles? -Preguntó Jinjin con una expresión de sorpresa en su rostro.

- Bueno, es cierto que esto no es un desierto, sino una zona muy descuidada. Si alguien se tomó el tiempo de cuidar una porción de tierra, podría mantener un árbol tranquilamente. -Dijo Larissa encogiéndose de hombros.

- Miren, detrás hay una cabaña. -Dijo Sanha señalando el lugar.

- ¡Oh! Eunwoo, ¿puedes sostener a Rocky? -Preguntó Larissa y sin esperar respuesta subió a Min Hyuk a la espalda del mayor.

- Ehh, sí, de nada. -Dijo un tanto confundido sosteniendo al niño con dificultad.

Larissa comenzó a correr y todos imitaron su acto intentando alcanzarla.

Larissa sonreía, estaba muy feliz, por fin habían encontrado a la última estrella del sendero, pero a su vez sentía miedo. No le gustaba ver a esos niños sufriendo por alguna u otra causa.

Jadeando se detuvieron frente a una pequeña casa color rosa pálido, con puerta y ventanas color blanco. Era muy bonita.

En la puerta, como todas las demás, tenía un escrito, pero a diferencia de las de las otras casas que estaban escritos con tinta o tallados sobre las viejas puertas de metal, esta tenía un bonito cartel de madera colgado en medio de la puerta. Esto hacía un más bonito y presentable mensaje. Inspiraba confianza.

Con el corazón en la garganta, y más nerviosa que nunca, Larissa se acercó, carraspeó su garganta y leyó en voz alta el mensaje.

"¡Bienvenido!
Ten un bonito día.
Moon Bin."

Todos se sorprendieron. El mensaje no dejaba ninguna pista como en las demás casas.

- Debe ser alguien amable. -Dedujo Rocky.

- ¡Miren, aquí hay otro mensaje! -Dijo Sanha quien se encontraba frente al enorme árbol.