Desconocido envió un mensaje.

Día 40. Mi cumpleaños

Narrador Omnisciente:

Día sábado, aún era de madrugada, Emily dormía y su padre le preparaba una gran sorpresa. Era su única hija y ésta cumplía sus 17 años.

Pero antes, recibió un mensaje de su celular, lo que la hizo despertar.

Como pudo abrió los ojos, por qué aun seguía dormida.

El mensaje era de Lázaro y era vía Facebook.

Ella sin notarlo sonrió, pero fue una sonrisa que no se podría describir, era algo confuso.

El mensaje decía lo siguiente; "Wow, se que estás cumpliendo tus 17 años por qué es lo que todos te ponen en la biografía y.. admito que no sabia que tenías 17. El punto es que hace un mes y una semana estamos hablando, sólo conoces mi nombre y eso porque te lo conté hace uno o dos días. Quiero que sepas que hablar contigo es genial Mily, me inspiras confianza, cosa que no en cualquier persona veo y es genial. Tú también viste eso en mí (Lo sé), me has contado cosas que.. agradezco mucho que lo hayas hecho. Te convertiste en mi amiga, ¿contenta? y fue algo que simplemente no lo planee, sólo sucedió. Al principio te veía de una manera distinta a como te veo ahora, antes te veía fría, odiosa, y lo peor es que no sé si solo fuiste así conmigo. Ya se que no eres así y de verdad me alegra. Sólo un mes y tengo mucho que escribir al respecto, creo que más de lo que tu algún día me escribirías. Odio que estés tan lejos, me gustaría hablar contigo siempre y contarte mis problemas, no necesariamente a través de un red social. Te has convertido importante para mí y no quiero que eso se arruine ¿Okey? no sé si sueno cursi o como un idiota, tal vez sí como un idiota, pero este idiota siempre sonríe al saber que contestas sus mensajes y solo con eso me conformo. Eres especial Emily, no hagas que nadie lo cambie. Ah, y no te molestes por cosas sin sentido, sabes por qué lo digo, tu madre, es tu mamá a pesar de todo y te necesita, se que tu también necesitas de ella. Bueno, me estoy yendo un poco del tema, pero eran cosas que quería que supieras. Hoy es un día especial, igual que tú, no dejes que alguien venga y lo estropee. ¡Sonríe aunque los días sean grises! y si el pastel es de chocolate me mandas un pedazo por correo (Sé que no se puede pero vale el intento) ¡Feliz cumpleaños chica fría que no le gusta que le digan Emi! Pásala genial :).  "

Después de aquellas palabras, Emily quedó en shock, no sabía como responderle así que le envió un simple "Gracias" de su parte. 

En algunas cosas ella quedó confundida, se le notaba en su mirada pero sin importar eso, se ruborizó, como si algún chico le fuera hablado bonito, y tal vez sí.

Bajó la escaleras y se encontró a su papá, en sus manos tenía unas llaves, ella sabía lo que significaba... ¡UN AUTO!

Corrió hacía su padre, lo abrazó y comenzó a llorar, su día estaba siendo el mejor. 

Agarró las llaves y se dirigió hacia la parte de afuera de la casa, donde se encontraba su auto. Era un Ferrari de color rojo pasión. Entró a él y lo primero que hizo fue dar una vuelta. Ella ya tenía su licencia, solo faltaba el auto y ya lo tenía.

Después de dar la vuelta llego a su casa y se encontró con otra sorpresa, una fiesta que le había organizado su padre, estaba toda su familia; tíos, abuelos, primos y hasta.. su madre.

-Tuvo que haber sido duro para mi papá invitarlo- Dijo para ella.

Su mamá se lanzó hacia ella a penas la vio y le regalo un collar, pero no cualquiera, era de oro. Emily no dijo nada, solo movió la cabeza, como diciendo un gracias y.. no se habló más del tema.

El día continuó en juegos, risas y comer, la torta la disfrutaron todos los invitados, hasta Emily.

Casi terminando el día, ella entró nuevamente a su red social más habitada, el Facebook.

Tenía felicitaciones de sus amigos, familiares y una en especial le llamó la atención.

Era de Jess, un mensaje privado, igual que el de Lázaro.

Mosquetera: Hola Emily, sé que discutimos y que te traté muy mal.. pero, de toda la vida has sido mi amiga y no puedo dejar pasar esto. ¡Feliz cumpleaños mejor amiga! sabes que tenemos una conversación pendiente y todo eso, pero simplemente no pienso arruinar tu cumpleaños así que dejaré todo en el pasado y espero que tu lo hagas también. Me importas muchísimo, eres la persona a la que le cuento todo y discuto con ella siempre, pero seguimos juntas igual. Nuestra amistad no se cambiará por un chico jamás ¿recuerdas? pues.. eso sigue en pie. Pásala súper nena, eres mi estúpida favorita. Recuerdas que siempre estaré aquí, ¿cierto? y que las mosqueteras siempre están unidas, aunque una se caiga. Te quiero.

Y con eso, finalizó su día, había sido excelente para ella. Era el mejor cumpleaños que había podido tener.

Mi cumpleaños- Dijo, antes de dormir.

Lo que no sabia es que aún no terminaba, el lunes venía algo que le pondría los pelos de punta.