Tales Of A ~Crazy~ Love

¿Familia De Tres?

- ¡No! ¡Total y definitivamente no!
- ¡Por favor, por favor, por favor... - repitió incontables veces, hasta que la palabra dejó de tener sentido - Te prometo que yo me haré cargo, lo saco a pasear y todo ¡Por favor!
- En mi vida voy permitir que metas un perro en esta casa, olvídalo.
- ¡P-pero... Mira lo hermoso que es! - acercó el cachorro al rostro de Ayden y jugueteo con él unos segundos - Además es tan chiquito, ¡No puedes dejarlo en la calle!
- ¿Chiquito? ¡Es un pastor Alemán! ¿Tienes idea de lo que crecen esos bichos? Además... ¿De donde se supone que lo sacaste? - mientras hablaba ella estaba concentrada en el animal, mientras jugaba con sus diminutas patitas y hacía voces extrañas - ¿Me estas escuchando? Sácalo ya mismo o tú y tu perro dormirán en la calle.
Ignorando sus regaños, pasó indiferentemente a su lado y se acomodó en el sillón junto a su nueva compañía.
- ¡Hey, mujer hablo en serio! Saca esa cosa de mi sillón ahora. - no tenia sentido, cuando Mel se metía una idea en la cabeza nada ni nadie se la sacaba, menos si se trataba de perros, gatos, cobayos, conejos, tortugas, aves; en fin, cualquier animal que caminara sobre cuatro patas, o en su defecto dos; volara o nadara - Condiciones. - dijo suspirando y unos ojos de niña pequeña se enfocaron en él - Tú lo limpias, a él y a todos sus desastres, mantenlo alejado del sillón y de la cama, lo sacas a pasear cada día y como llegue a mear acá adentro se van los dos, ¿Escuchaste?
De pronto una garrapata se aferró a sus caderas gritando y casi llorando de alegría - ¡Gracias, gracias, gracias!
La aparto con sobreactuada molestia y le dedico una mirada de odio verídica.

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Hombre, mujer y perro estaban sentados en ronda sobre la alfombra de la habitación principal. - ¡Terry!
- ¡Marshall!
- ¡Whisky!
- ¡Hitler!
- ¿Hitler? ¿En serio?
- Si, Hitler. ¿Porque no?
La metralleta de nombres absurdos continuo por varios minutos y el entusiasmo poco a poco fue desapareciendo hasta hallar uno que les guste a los tres.
- Kyle...?
- Nah, Olaf...?
- Nah... Corcho?
- Nah, espera... Si, ¡Corcho! Corchito para los amigos, me gusta ¿Tu que opinas pequeño?
El nuevo miembro de la "familia" movió la cola, dio una vuelta sobre si mismo y profirió enérgicos ladridos de aprobación, supongo, o igual ya estaba harto de todo el rodeo y quería terminar de una vez para que alguien le diera su plato de leche y poder ir a dormir en paz.
- Supongo que le gusta, no esperaba que reaccione así a su nombre, como en las películas o historias de la tele.
- Bueno querida, nuestra historia no esta lejos de ser como esas...
- ¿A que te refieres?
- Olvidalo.
- Pues bien, decidido, tu nuevo nombre sera Corcho. - mojo sus dedos en "agua bendita" y la salpicó sobre el perro quien se retorció con un rápido movimiento que salio casi por instinto - Ya estas, bendecido. - cabe aclarar que, ni Mel ni Ayden apoyan la religión católica, ni lo que sacudieron sobre Corcho era agua bendita, de hecho era jugo de naranja pero... Ahí el chiste.
También cabe decir que nadie durmió en toda la noche porque alguien se la paso ladrandole a una ventana, y no, no fue Mel que a pesar de ser un poco perra, no llega a tanto.