Un beso, un corazón roto

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¿Y si en verdad Brian si estaba enamorado de mí? Esa pregunta me acosaba en la mente pero por alguna razón no quería aceptarlo, tal vez porque esa situación me brindaría varios problemas y empeoraría demasiado las cosas. Miré de reojo a Brian que tenía una alegre sonrisa en su cara, al parecer el notó que lo observaba porque se volteó a verme. Para no levantar sospechas o “esperanzas” como Austin había dicho, sonreí inocente y después miré la calle.

Bajo mis pies sonaba el ruido de las ramas caídas al romperse cuando las pisaba mientras que nos acercábamos al parque. Suspiré ruidosamente tratando de dejar salir algo de tensión de mi cuerpo, Brian me miro con el ceño levemente fruncido.

-¿Pasa algo?

-No, es solo que Austin…olvídalo- manoteé en el aire para no darle importancia

-No, está bien. Escucho

Inspiré profundamente, no sabía se sería buena idea de hablar de Austin las cosas que no me parecen con su “enemigo” por así decirlo, no creo que le agradaría pero es solo que necesitaba liberar algo de tensión hablando con alguien sobre mis pequeños problemas.

-Um…es solo que creo que lo que dice Austin es algo…exagerado no creo que sea cierto- reí algo nerviosa

-¿Qué es lo que dice?

Llegamos al parque y nos dirigimos a unas bancas para sentarnos, pensaba que esta sería una oportunidad para saber si era cierto lo que Austin sospechaba así que continué.

-Em…él dice que tú, que tú…bueno sospecha que sientes algo por mí y creo que lo exagera porque somos buenos amigos y él es muy celoso, ¿cierto?

Brian me miro en silencio por unos segundos y pude notar que al decir “buenos amigos” hubo algo que lo incomodó. En ese breve silencio temí lo peor.

-Eleonor

-¿Si?- lo mire atentamente

-Em…yo

Fruncí el ceño, de repente Brian se puso nervioso y se había sonrojado, se acercó un poco y yo lo miraba expectante y algo confundida. Se estaba comportando de una manera muy extraña y no normal en él, fue entonces cuando mi temor se había confirmado. Un poco de pánico surgió en mi al ver a Austin surgir detrás de un árbol, el todavía no nos veía pero Brian estaba muy cerca de mí.

-Eleonor…Austin tiene razón

-¿Qué?

Al decir esas palabras Brian se inclinó sobre mí y me beso, fruncí el ceño y confundida aparté a Brian de inmediato. De un momento a otro surgió un enojo de mí hacia él pero al ver a Austin parado e inexpresivo junto al árbol del que había surgido, ese enojo se reemplazó en culpabilidad.

Me paré rápidamente y corrí hacia Austin pero el empezó a caminar lejos de mí sin dirigirme la mirada. ¿Por qué todo esto me pasaba a mí? A veces pareciera que el mundo está en contra de mí. Corrí y corrí hasta que al fin pude alcanzar a Austin, lo agarre del hombro pero este se zafó bruscamente de mí. Se giró y me miró con decepción y enojo.

-Austin, lo siento. Tenías razón…yo—

-¿Sabes qué es lo más chistoso? Que hasta que no pase algo que te haga comprobar que algo es cierto, es cuando lo crees.

-Lo sé, lo sien—

-No Eleonor, no lo sientes. Siempre es lo mismo contigo, yo siempre tengo que ser el malo, a pero si yo hiciera esto con Becka tú me matarías y jamás me perdonarías. ¿Sabías que salí con Becka por un helado pero después te vi y la abandone? ¿Sabías eso? Ah no lo sabías porque estaba tan ocupada en probar que yo me equivocaba en Brian y hacerme ver como un pinche novio de mierda con celos excesivos. ¿No?

Austin me miró enojado esperando una protesta de mi parte pero lo único que quería salir de mi eran lágrimas, pero intente contenerlas.

-Oh.¿ Ahora no tienes nada que decir en mi contra? Estupendo

Y con eso se dio media vuelta y camino hacia su casa mientras se pasaba la mano por su cabello. Me quede parada en medio de la calle observando cómo se alejaba de mí, antes de abrir la puerta se giró y me vio con ojos de odio.

-Creo que esto no va a funcionar, siempre nos peleamos

-No, no Austin, por favor no hagas esto

-Ya tuve suficiente Eleonor, no funcionamos como novios

Abrió la puerta y entró a su casa cerrando de un portazo, ahora si estaba devastada. Oí como una rama crujió y mire en esa dirección, era Brian que estaba rojo como un tomate, abrió la boca para decir algo pero lo interrumpí antes de que emitiera un sonido

-Tú no me hables

Caminé a mi casa, entre y cerré la puerta. “Esto es una mierda” pensé y fue en ese momento cuando no pude contener más las lágrimas. Era todo, Austin toma una decisión y no hay vuelta atrás, en verdad no lo culpó. Él tenía razón sobre todo.

Always you~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora