Saint Seiya: El Cosmos despierta

Cap 5: "Una Cruda Verdad"

Dos días después de su llegada a Oriente Saori notó que era tiempo de irse y retomar su misión pues Seika ya se había adaptado al orfanato, a la compañia de Mino y los demás niños

Estaba segura que Seika estaría a salvo sí se quedaba ahí

No se despidio de nadie y salió del orfanato horas después de que el sol se hubiese ocultado

Camino sola por las calles de Japón, no percibió peligro alguno sin embargo sentía que alguien la seguía

—¿Quien esta ahí? —inquirió desconfiada al girar la cabeza sobre su hombro

No obtuvo respuesta y comenzó a desesperarse

¿Es que acaso se equivoco y en realidad nadie la seguía? ¿O esa persona era lo suficientemente astuta para no dejarse ver?

De todas formas debía alejarse de esas calles. Aceleró el paso y comenzó a correr sin razón alguna

Chocó contra el cuerpo de alguien y ahogo un grito al ver de quién se trataba

—¡Por los dioses Shun! ¡Me asustaste! —reclamó Saori con el corazón en la garganta

—Saori, ¿estas bien? ¿Qué sucedió? ¿Por que corrías? —cuestionó el caballero de androméda preocupado

—Antes que nada ¿¡Qué haces aquí Shun!? No deberías estar aqui ¿¡Por que me seguiste!? —exigió Saori alterada. Luego comprendió que era él quien la había estado siguiendo todo este tiempo

—Saori, no es lo que piensas. Me preocupé cuando te ví partir junto con Seika, no quería incomodarte con mi presencia asi que me mantuve a distancia. Perdoname, por favor —suplicó el peliverde

Saori soltó un suspiro pesado. Sabía que la intención de Shun era buena, pero aún así se estaba poniendo en mucho peligro al estar con ella

—Debes irte Shun —declaró la diosa cabizbaja—. No quiero que te pase nada. Vuelve a...—

—¿Volver a donde? —interrumpió andrómeda alzando su tono de voz—. ¿Al cuarto que ocupo en la fundación Kiddo? Ese no es un hogar Saori, no lo considero mi hogar. Mi deber como caballero es protegerte, debo estar a tu lado

Saori niega en respuesta

—No quiero que me protegas Shun. ¡No más! No quiero que termines como...—nuevamente fué interrumpida

—¿Como Seiya? ¿Es lo que ibas a decir, Saori? ¿No entiendes que no fué culpa tuya su destino? —escuchar ese nombre hizo trizas el corazón de la diosa—. Cumplió con su deber, él deseaba protegerte al igual que todos

Nunca había visto un rostro tan determinado y decidido en Shun. Ni que decir de sus palabras, si hubieran salido de la boca de su hermano Saorí no se sorprendería, pero...viniendo del caballero más noble y gentil de los cinco bronces era simplemente imposible de asimilar

De todas formas quiza (solo quiza) Shun tenía razón y no fué su culpa, pero eso no quitaba el hecho que Seiya pereció protegiéndola a ella y no solo él, los caballeros dorados también lo hicierón

—Esto es díficil para mi —admitió sollozando—. Me siento responsable de que Seiya no haya podido reencontrarse con su hermana ni con Mino, ella...debías ver su cara cuando supo lo que pasó en los campos eliseos

—Se que es duro Saori —el caballero de andrómeda colocó una mano sobre el hombro de Athena—. Pero no debes olvidar que nos tienes a nosotros y siempre te apoyaremos, el estar separados ahora no cambiará eso

***
En algún lugar de Siberia, Hyoga se encontraba entrenando frente a un gran glaciar de hielo. Volver a la rutina lo hizo sentir bien, pero al mismo tiempo nostálgico

Cada puño y golpe que lanzaba contra el imponente muro de hielo le trajo millones de recuerdos, en su mayoría con su maestro

Sin darse cuenta pequeñas lágrimas escaparón de sus ojos asi que Hyoga detuvo su golpe en seco para limpiarlas

—No debes llorar —dijo alguien a sus espaldas. Hyoga ya había reconocido esa voz, pero de todas formas terminó volteando para ver a Naira

No dijo nada, no tenía nada que decir. No la conocía y sin embargo tenía curiosidad por la extraña habilidad que demostró hace unos días cuando se conocierón

No pudo resistirse a averiguar sobre ella en el pueblo

—¿No vas a decir nada? —interrogó Naira dando unos pasos con sutileza. No quería incomodar al caballero cisne aunque sospechaba que ya lo había hecho interrumpiendo su entrenamiento

—Pregunté por ti en el pueblo y los aldeanos ni siquiera conocen tu nombre —declaró Hyoga

—Es de suponerse, acabo de llegar hace unos días acá. Nadie me conoce excepto tú —Naira sonrió sonrojandose un poco, pero bajo la mirada para que él no lo note

Por su parte Hyoga meditó su respuesta y terminó creyendo en su palabra

—¿Que te trajo para acá entonces? —curioseó relajando su rostro. Sí al principio le incomodaba su presencia, pues ahora ya no. Es más, empezaba a reconocer a Naira como su nueva amiga

—Es la razón por la cúal nos conocimos —afirmó Naira sonriendo de lado. Esto confundió al cisne—. No creeras  que nuestro encuentro fué pura casualidad ¿o sí, Hyoga?

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Gracias por su apoyo en esta mini historia:) sus votos y comentarios me alegran el día

¿Qué les pareció? No se porqué, pero me costo escribir este cap:'D Ya en los siguientes caps veremos como Nayra encaja en la historia:'D ella tiene un propósito en todo esto!

La imagen en multimedia me mató:'(

Pregunta! ¿Qué signo son? Yo una acuariana con orgullo! :)